A través de un juego

GRADUACION

"¿No se lo diremos hoy a tu padre?, ¿verdad?" ¿Cuán adorable era que Cole todavía le seguía teniendo miedo a mi papá? A pesar de todo, ayer nos había ido bastante bien a pesar del incidente de la puerta. Para mi gran alegría, Dylan se había llevado la mayor parte de su ira. Tendría que regalarle algo, por haberse encargado de quitar a mi novio del centro de su atención, aunque lo haya hecho sin querer.

"Dios, no, ¿estás loco?" Le pregunté, riendo mientras me sentaba y lo miraba acostado. Papá no iba a poner sus manos en mi hombre, muchas gracias. "Se lo diré por teléfono a miles de kilómetros de distancia. Honestamente creo que no se sorprenderá, pero prefiero evitar los riesgos. O a ti." Toqué su cabello, sonriendo ante los nervios en sus ojos.

Cole sonrió. "Sí, evitemos que me haga algo. Y cuando lo llames, le diré a mamá que llame a sus contactos y que haga que su pasaporte se venza o algo así."

Me mataba. "Él no irá a Alemania a buscarte." La expresión en el rostro de Cole me decía que no me creía, el pobre chico. "Bueno, creo que no lo hará. ¿Y qué contactos tiene tu mamá para los pasaportes?" De alguna manera no me sorprendía. Tenía el presentimiento de que Laura Sprouse podía hacer lo que sea.

Cole tiró suavemente de un mechón de mi cabello. "Con mi mamá nunca se sabe, Lils. Cuando pensó que me habían secuestrado, ella mencionó al FBI. He aprendido a no cuestionarme ciertas cosas."

Eso me hizo reír. "Tu mamá es increíble." De acuerdo con el reloj, ya eran pasadas las ocho. Maldición, tenía que levantarme. "Pero no es tan increíble para salvarnos de mi padre si él llega y nos encuentra en la cama."

Cole se movió demasiado rápido, saltando de la cama y tomando sus boxers en un solo movimiento. Era gracioso y caliente verlo moverse así. Me reí de su culo sexy que iba camino a la ducha. Pensé en unírmele a él, pero supongo que toda la charla sobre mi padre encontrándonos en una posición comprometedora mató el ambiente. Si tuviera que elegir entre el aire y Cole Sprouse, elegiría a Cole.

Él no estaba en mi habitación cuando regresé y me reí mientras me sacaba de mi clóset mi conjunto de ropa interior negro. Me agaché a colocarme las bragas y casi salto del susto cuando escuché su voz detrás de mí. "¿Estás intentando matarme?"

Reí mientras me giraba a mirarlo. "No, estoy intentando vestirme para aparentar ser dulce y virginal para cuando mi padre regrese." No es que él fuera a creerlo, pero lo intentaría.

Cole largó una risotada ante la idea de virginal y le tiré mi sostén. Él lo tomó y le dio vuelta entre sus dedos, sonriendo. "No sonabas tan virginal anoche cuando me rogabas que te cogiera." Maldición. Eso era cierto. "Todo lo que tengo que hacer es mostrarle esto y verá que no eres ninguna de esas dos cosas."

Sostuve mi mano en el aire y como el buen hombre que era, me lo entregó, no sin antes suspirar. "Como si te atrevieras a mostrarle mi sostén a mi padre. A papá y a mí nos gusta mantener las apariencias. Lo que él no sabe no nos lastimará a ninguno." Sus ojos se agrandaron y evité la tentación de besarlo. Si lo hacía ahora, su ducha se retrasaría y nos atraparían. "Ve a ducharte; tenemos que estar allí a las diez." Me coloqué mi sostén, en vez de tirarlo como él quería, y me puse el vestido negro que me había comprado para la ocasión mientras él se duchaba.

Necesitaba algo para comer, así que devoré un bagel, mientras esperaba que la gente apareciera. Podía escuchar signos de vida en las otras habitaciones. No tardarían mucho. Fui a mi habitación para ver si Cole ya había terminado y casi muero cuando lo vi de pie en mi habitación usando un traje que probablemente costaba más que el auto de Barb. Dios, él era hermoso.

Cole sonrió ante el charco de baba que probablemente estaba haciendo mientras lo miraba. "¿Ves algo que te guste, amor?"

¿Gustarme? ¿Estaba loco? Tenía que retenerme para no atacarlo. "Diablos, mi papá va a arrestarte."