Mi única misión eres tú

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Capítulo 21

"Bésame"

Lara

—No puedo creerlo, por fin los cuatro ángeles están juntos —sonreí y sin intención lo abrace enseguida, abrí mis ojos de par en aor y me aleje —. L-lo siento, no era mi intención.

—No te preocupes, debes de estar muy emocionada, pues ahora solo falta encontrar a la princesa —sonrio SeokJin.

—Si solo falta encontrarla —una chica se hizo presente la cual nos interrumpió.

—SeokJin aquí estas, ¿continuamos bailando? —le sonrio Kiera. SeokJin asintió.

—Nos vemos Lara —me giño el ojo y se alejo con Kiera.

Los veía juntos, no se bien que tipo de relación tienen ambos, pero se nota que son muy maduros, y que sin importar que pase, se quieren mutuamente, supir y mire al rededor, solo me distraje un poco y ya no podía visualizar a él chico de cabello rubio ni a la chica de ojos azules, eso era extraño. Interrumpieron mi búsqueda, mi mirada quejo fija en el abdomen de un chico, la subí poco a poco hasta encontrarme con una mirada tierna y dulce, era Jimin con una sonrisa de lo más hermosa.

—Hola Lara —me sonrio, no sabía precisamente como reaccionar, trate de fingir que estaba bien.

—Hola Jimin —le regrese el gesto con una pequeña sonrisa.

—¿Quieres bailar? —mis ojos se abrieron de pa ren par, que no se supone que su cita es Venus y no yo.

—¿Y Venus? —lo mire aglo seria —. Ella es tu pareja ¿no?

—Digamos que ella... esta disfrutando de esta noche —con un pequeño gesto señaló con su pareja a la post ahí se encontraba la chica con JungKook parecían contentos.

—Mmm, así que te cambiaron eh —traté de hacer una broma pero para nada funcionó.

—Oyeeee, no soy el único ¿que me dices de JungKook?, el era tu pareja ¿no? —me miró con una sonrisa, desvíe la mirada.

—Eso no te incumbe —escuche como soltó una risita y acercó su mano hacia mí —. ¿Que?

—¿Bailas conmigo? —me miró tierno.

—¿Que?, ¿ahora si quieres bailar conmigo? —le mire restandole importancia, el negó con la cabeza.

—Solo ven —sujeto mi mano e hizo que me parara, nos dirigimos a la pista.

Coloco su mano junto a la mía de manera correcta, con la otra colo mi mano en su hombro, su mano recorrió su cintura hasta llegar a mi espalda, en donde preciono provocando que me acercase a él; con aquellos tacones que había escogido para mí Kiera, ahora me encontrará más o menos a su altura, digamos que le llegaba a sus cejas. Comenzó una canción lenta, y justo inició el con el movimiento, balceabamos de lado a lado al ritmo de la música.

—Jimin yo... no se bailar —dije desviando la mirada algo avergonzada.

—Oye mírame —le hice caso —. Eso no importa, yo te ayudaré.