El humo del fuego de lleno en
cada respiración,
más el inexistente intento
de tus pulmones por luchar se
ve en tus ojos ya vacíos.
El cielo se ve hermosamente horrible
con cada esteriotipo como un ángel quemándose.
Tus sentidos por allá y
tu contradicción del día jueves.
El sentido de lo que no lo tiene.
No lo posee algo que siempre
estuvo en venus.
La euforia me sumergía en el invierno.
Cómo una fuente en la que me hundía,
Solo que las manzanas sólo parecían
ser reales por unos instantes.
Observaba cada latido
con la mirada pegada,
En un intento por acercarme.
En todo el cielo se sumergia la emoción.
Un extasis del destino no escrito
en el oráculo.
La amenaza censurada que
nos llevó al deseo.
Indiferente sin sentido es todo y nada.
Cada recuerdo perdido en razón.
Sientes como cada pensamiento se lo lleva tu apresurado caminar,
Los apresurados latidos.
El cemento ser esclavizado con tu incoherente e in-humana sangre.
Una bala rota besando tu tímpano.
Los gritos desaparecer hasta que tu voz es un hilo irse lentamente con tus últimas palabras.
Tus cuerdas vocales retorcerse de insuficiencia y frustración.
Los gritos y el llanto no tardan en llegar a mis débiles sentidos.
Aún así gastas lo poco que te queda de fuerza y energía para tener la dulce imagen de tu amor.
Nada es la condena.
Otro joven asaltado.
Las evidencias jamás le harán
justicia a la forma en la que lo miraba.
Más la tortura de su egolatra sentir sin el de nadie es la causa de tu sonrisa llena de euforia.
Por qué una creencia es más
importante que una vida.
La hipocresía se ríe, dijo la voz de la señora con el bastón recubierto de cocaina.
Complice le devuelve la sonrisa.
Su muerte dejó de ser un crimen y se convirtió en un espectáculo.
Con cada cuerda tirante una creencia en que consiste el tratado de la vida.
Cerro sus puertas por siempre.
Las flores amarillas encarnan la belleza que ya no puede iluminannos en vida.
Con la muerte que ya no puede argumentarse.
El "ama a tu próximo" dejo de importar
Haz lo que tengas que hacer dijo el padre.
Pero no sigas a los colores.
El arcoiris solo es un efecto de la lluvia.
Ante cualquier diferencia las medidas de seguridad nos esperaban.
No nos conocían pero conocían
los Errores.
Los reporteros estaban precipitados
Necesitan las respuestas
para recibir su pago.
No estaba muy seguro de
que querían escuchar.
Por más que hababla las notas
eran rosas.
El mundo de las citas y yo somos
como un león con un traje.
Pero de todos modos estaba dichoso,
Mi madre me había conseguido una cita para hacerme entrar en razón.
Papá parecía perdido,
Como siempre observando
su antiguo álbum.
Ella dijo que ya era hora,
Debía estar feliz.
Los hombros como el gatillo de
la pistola de su mente.
No dan espacio.
Pero la del pecador si.
Sus mejillas fueron testigos del amor.
Ahora un frío sudor.
Su cuerpo fue la forma del amor.
Ahora una simple viñedo.
Los frutos de su amor se verán impregnados en las uvas de la cosecha.
Sus ojos un día fueron las ampolletas de su amor, ahora una triste estrella.
El consuelo de volver a encontrase los ha mantenido lejos de la muerte.
Si no estaba ya muerto.
Perdió la noción del tiempo.
Cada vez que veía una estrella fugaz volvía a aquel día de primavera.
Los niños decían que volverían a verse.
Los mayores de la cruz decían que sólo el amor verdadero podía tranceder la muerte.
Nadie lo sabrá.
Pero al menos ahora no habría
una ventana de distancia entre ambos.
Almenos no habría un anillo.
Almenos no habría un pueblo con antorchas.
Y aun que era triste triste para
cualquiera que los viera,
La mentira ya no lo asfixiaba.
Almenos podía estar más cerca de su amor.
Solo el espacio sabría lo
que les separaba.
La mentira se fue con el,
lejos de su esposa e hijo.
