Las lluvia se dispersa a lo largo del cielo, gotas de agua caen por el techo, la puerta se abaniquea sumergida en su dominante ira...
La helada calidez de mis manos me brinda sobrevivencia, los repentinos escalofríos subiendo por el cuello bajo, las delgadas sábanas rendirse ante un cuerpo muerto, el ardor invisible gritar a tu sistema...
En pleno apogeo, la lluvia conserva su elegancia innata.
Las aves buscan refugio en la constante sobrevivencia de la jungla en la semivacia calle
La calidez corporal rendiré al espíritu de otoño en invierno, y lxs perr@s refugiarse del abandono de un hogar lejano...
Los párpados pegados de "la nada" se hacen cada vez más pesados en esta lucha.
La nariz volverse ligeramente carne congelada directo al refrigerador, junto con los latidos de un corazón vendido.
Y el foco de interés perderse de este mundo dominado en una relación tóxica y desigual con la humanidad. Y, supe entonces, que debía dejar de buscar... La enemiga que el estado quiere hacer ver; una aliada, para la perspectiva local.
Entre dos opciones : forrarse de cigarros y Marihuana, o ser obstinada/do y persevarente rompiendo con la inversión para mí conciencia ambiental.
(Simplemente, no lo sé...)