EL DESTINO DE FARID

FUTURO

—¿Qué? ¿Dónde me encuentro? —

—¿Acaso he vuelto a ver el futuro de una persona? –. Sé preguntaba Athenea levantándose sobre un verde pasto cubierto de sangre.

*Ella estaba al lado de una gran muralla, justo delante de ella cientos de miles de soldados combatían a muerte *

—¡¡No está respirando!! —. Gritaba un comandante rubio.

Athenea siguió el grito.

—¡¡Por favor no te mueras!! —. Gritaba una mujer de cabellos platiados.

El cuerpo de un hombre estaba tirado en el suelo, su armadura estaba destrozada.

—¡¡¡Un médico !!! —. Gritaba desesperada la chica de cabellos platiados.

*Una chica pelirroja acudió a la ayuda *

—! ZAIDA! —. Gritó la chica.

Athenea miraba al hombre tirado en el suelo, su rostro era casi irreconocible por las heridas y la sangre que lo cubría.

— ¡Zaida haré tiempo, no podemos dejar que Wyatt lo toque! —. Gritó el rubio tomando su espada.

*Un estruendo se escucho por las murallas*

—¡No puede ser! —.

—¿Este es el futuro que le espera? ¿Este es su destino? —. Se preguntó Athenea.

*Ella soltó la mano de Farid *

A la mañana siguiente.

—No, no tengo que advertirle —. Athenea se levantó de la cama y fue en busca del caballero.

Varios días habían trascurrido de la llegada de los soldados al Olimpo.

—El caballero del invierno, ayudó bastante con la defensa de la nación —

—Con su conocimiento estratégico ayudaría a proteger las murallas —. Decían los pobladores al parecer tenían una mirada llena de esperanzas.

Hileine acompañó al caballero a las salidas de las murallas.

—¿De verdad irás al Imperio Heroriano?

—¿Sabés de los riesgos que hay? —

—¿Tan importante es ir ahí? —. Preguntó Hileine.

—Debo ir, por qué mi prometida me espera... —. Respondió Él.

Hileine lo miró asombrada.

—Ella debe estar preocupada por mi, muchas gracias por todo —

—Espero encontrarnos después de terminar con esta guerra —. Respondió él subiendo a su caballo.

—Así será —. Hileine.

*Él caballero se marcho*
*Hileine observó a lo lejos, al parecer Athenea montaba un caballo, cruzó las puertas a gran velocidad *

—¡Princesa! —. Gritó Hileine corriendo detrás de ella.

*Athenea logró alcanzar al caballero *

—¡Alto! ¡Por favor espere! —. Gritó ella.

*Él caballero detuvo al caballo *

—¡¿Pero que hace aquí Athenea?! ¡Es peligroso! —. Preguntó Él.

—¡¡Por favor no valla!! ¡¡No puede ir al Imperio Heroriano!! —