PERSPECTIVA: Tercera Persona
—Puedes llamarme "Señor S" -Se presento bajo aquella identidad —Platiquemos, oh, gran Myldark, señor dragón, "Acero de las Sombras".
—Ahórrate los halagos -Expreso el dragón oscuro su descontento ante la pronunciación de tales títulos.
—Solo pretendo satisfacer esa parte de ti, aquella que resplandece del orgullo de un dragón.
—Ya no me interesa alimentar una vanidad del pasado, quien antes he sido, ha quedado relegado en un tiempo olvidado.
—Como desees...
La entidad sombra se pone de pie y levanta su brazo derecho señalando con el dedo índice el oscuro abismo del cielo.
—¿Qué se supone que hay arriba?, tan solo veo oscuridad y nada más.
Pero aquella oscuridad pronto materializa una forma esférica, como una bola de cristal gigante flotante, manteniendo su flote en tinieblas que hasta el ojo de un dragón le costaba ver entre tal penumbra.
—Todo este "plano", empezó por eso... -Señalo el señor S a la forma esférica.
La gigantesca bola de cristal manifiesta recuerdos de Rozuel Drayt, aquella parte donde se enfrenta a un monstruoso Comandante Templario Frederic, siendo herido por este por una puñalada seria en el estómago. Una fuerza desconocida repele al Templario inhumano y salva a Roz, elevándole, desatando una explosión y haciendo desaparecer al mismo Trotamundos, junto a una malherida Riha, su compañera Lupian. Acto seguido, deja de transmitir imágenes y queda inactivo.
—Lo recuerdo, aquella fuerza era ajena a la magia, ¿qué fue eso?.
—Ya deberías saberlo a estas alturas del partido, aquello fue un fenómeno producto de una gran acumulación de PSI o energía ESP, como gustes llamarlo -Declaro la entidad.
—¿PSI?.
El dragón oscuro ya había observado tanto la existencia como el origen del Psi, el nacimiento de los Esper, en todo el recorrido que llevo como un especto en dicho "plano".
—Incluso tu actual portador, está directamente relacionados con ellos.
Rozuel Drayt, quien posee actualmente la armadura que alberga los últimos vestigios de su existencia espiritual, era en sí, un Esper.
—Un Trotamundos, como los llaman en tu mundo natal -Dejo en claro la entidad.
—Siempre he sabido de la existencia de los Trotamundos, pero nunca me llamaron la atención, los consideré solo otros incordios humanos de un mundo diferente, pues nunca supe cómo eran las tierras de donde procedían originalmente -Manifestó el dragón oscuro de manera reflexiva —¿Acaso todos los Trotamundos provenían de un mundo como el que acabo de ver?, ¿este plano acaso es donde ellos provienen realmente?.
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Metalord Revolution
FantasyUn hombre criado de manera funesta en su niñez de un insólito mundo habitado mayormente por Esper, se convierte en un traficante de armas gracias a su don de baja manipulación sobre metales con el cual las crea, viviendo clandestinamente en un país...