Esta es la historia de ___________ Elizabeth Cumberbatch Fletcher, la hija del famoso actor Benedict Cumberbatch y su madre escritora Best Seller Mónica Fletcher, dónde __________ conoce y descubre lo que ha evitado por años desde su adolescencia c...
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De una manera bastante extraña y de la nada para ser sincera, he quedado con Holland para tomar el té en la cafetería que está a dos cuadras de mi universidad, son las 6 de la tarde y voy saliendo de mi última clase llamada Expresión Simétrica.
Cuando me propuso salir me quedé algo impactada, le he dicho a mi padre que llegaría un poco tarde porque me quedaría a hacer unos trabajos con mi amiga Molly, por supuesto que no le diré que salí con Tom Holland.
Suena mi teléfono y observo en la pantalla de bloqueo, me indica con DM que ya está en la cafetería y que lleva puesta una gorra en la cabeza, algo ridículo ya que está extremadamente nublado como siempre.
Camino hasta la entrada de la cafetería y abrí la puerta de vidrio, el olor a café y pan se estrella en mi cara y mi estómago gruñe, creo que me ha dado hambre, lo busco rápido con la mirada y lo veo hablando por teléfono y riendo en la última mesa al fondo del local, si cree que pasará desapercibido solo con usar una gorra, entonces es muy estúpido.
Me acerque a él y en cuanto me vio terminó su llamada, se levantó
—¡Hola! — Se acercó a mi y nos saludamos de beso, huele tan delicioso, a mi parecer, el perfume de hombre es la cosa más adictiva del mundo.
—Hola —Me senté frente a él en la silla acojinada y coloque ni bolso en el respaldo de la misma.
—¿Quieres tomar algo? — La poca luz del locas hace que su rostro se vea diferente, pero eso no evitar que se vea muy sexy.
—Si, quizás ordene té con leche, ¿ya has pedido? — Sus ojos veían los míos, me sudan las manos.
—No, aún no, ordenaré lo mismo que tú.
Unos segundos después, un chico se nos acercó a tomar la orden, pedí un croissant con jamón y queso ya que en definitiva me dio hambre.
—¿Y bien ________, como es que no te conocí antes? — Colocó sus antebrazos sobre la mesa y de inclinó.
—Pues, a decir verdad yo ya te había visto trabajar con mi papá en The Current War pero nunca nos cruzamos ni nada. — Alzó las cejas y pasó la lengua por sus labios, me distraje solo un segundo.
—No recuerdo haberte visto — Se me escapó una risilla, por supuesto que no, se la vivió con dos chicas de utilerías y nunca las soltó, no es como que deseara hablar con él ni mucho menos.
—Pues yo sí, ¿que cosas no? — Daaah. Incómodo.
El chico que nos ha atendido llegó con nuestras tazas de té, nos ha dejado un tarro con azúcar y otro con leche fresca.
—No sabía que Benedict tenía una hija grande, solo sabía de los pequeños— Si, es más notable que destaquen mis pequeños hermanos Hal y Christopher.
