Mí profesor [AiBaku]

Capítulo 16 : Unas complicadas vacaciones parte uno.

— ¿Katsuki, me estás escuchando?

Bakugou suspiro en el teléfono, señal que si estaba escuchando pero no prestaba atención.

Había llamado a Mitsuki solo por sí se le llegaba a ocurrir pasar por la casa, nada más que por eso y ahora su vieja le pedía detalles que no estaba de ánimos para dar.

Al menos Masaru solo le pidió que se comportará y llamara en caso de emergencias.

—Mocoso al menos habla —gruño Mitsuki —Así sé sino estoy hablando sola.

El rubio rodó los ojos y se tiro en el sofá. Kirishima lo iría a buscar mañana temprano, sus maletas ya estaban hechas y solo quería limpiar un poco la casa antes de irse a dormir.

—Katsuki...bien —susurro la rubia —Esta bien sino quieres hablar por hoy, solo cuídate mucho, ¿de acuerdo? No quiero despertar a las tres de la mañana por una llamada donde me dicen que estás en la comisaría por hacer una locura.

Hay más posibilidades que los idiotas hagan eso que yo.

No lo dijo solo porque realmente no quería hablar con Mitsuki ¿Hace cuanto no la veía? ¿Cuándo fue la última que estuvo en casa? ¿Desde hace cuanto no peleaba con ella en persona y no por teléfono?

Apretó el celular en su mano, la llamada seguía en línea.

¿Ella acaso sabría lo que le traía tan mal? ¿Le daría algún consejo o se reirá de su mala suerte en el amor?

Katsuki no lo sabía, hace tanto tiempo que no veía a su madre que no recordaba mucho de su carácter aparte de sus gritos cuando hacía tonterías.

Se sacó el celular de la oreja y lo puso arriba de su cabeza a la altura de sus ojos.

"Vieja, llamada en curso" eso decía en la pantalla iluminada de su móvil.

Sin pensarlo mucho pasó su dedo pulgar por el celular, hasta llegar al icono donde la llamada finalizaba y luego de eso volvió a ver lo que decía la pantalla.

—Duración de la llamada, veinte minutos con trece segundos —susurro para sí mismo y bajo la mano hasta dejar el celular apoyado en su pecho.

Era la llamada telefónica más silenciosa que había tenido con Mitsuki.

— ¡Aoyama, te dije que solo trajeras lo necesario y esencial! —reclamo Mina viendo las valijas de el rubio — ¡Deja esas cosas en tú casa!

El rubio le vio indignado ¡Eso era lo esencial para él! Tres maletas tamaño familiar que llevaban su ropa, maquillaje y zapatos, lo necesario para sobrevivir una semana.

Mientras esos dos seguían peleando el resto se fue acomodando en los autos.

La salida que antes iba a ser solo de cinco personas termino por agrandarse debido a que Kaminari quería llevar a Todoroki y el bicolor pregunto sí podían llevar a sus amigos también por lo que el grupo fue creciendo más, más y más.