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-Mi madre piensa que eres mujer.-Dije entrando al auto para comenzar a conducir a casa de JiSung.

-¿y por qué no le dices la verdad?.

-¿Te imaginas? Me Odiarían para toda la vida.

-Tu hermana no te odia, y ella lo sabe.

-Todo gracias a tu hermana, quien le dijo.-Dije en un susurro, pero me había escuchado.

-¿Eso significa que le tengo que decir yo a tus padre? ¿O mi madre?. No entiendo cual es el problema, a mi madre le hizo feliz escuchar eso. Así debería ser con tus padres.

-Escucha... Todo este tiempo que hemos salido como pareja, te he ocultado a ellos, por lo mismo. No me gustaría que algo horrible pasara. No sé si contigo o conmigo. Por eso no quiero arriesgarme, mi familia es muy homofobica. No me quiero imaginar como se pondrán si les expreso que yo pertenezco al grupo que ellos odian. Es como si fuera un judío viviendo con nazis. Nada bonito.

-Entiendo...-Susurró mirando la ventana sin decirme más, acerca de toda nuestra charla.

Noté que estaba un poco decaído por lo que le dije, así que tomé su mano entrelazandola con la mía y conducir solo con una mano cambiando de rumbo para dirigirnos a otro sitio y no la casa de mi novio.
Decidí conducir casi a las afueras de la ciudad donde solté un suspiro y lo miré para acercarme a besar sus labios.

-Le diré a mi madre sobre ti.

JiSung sonrió por lo que se dejó venir a mi pidiéndome que le abrazara. No dude en devolverle el abrazo y besar su mejilla.

-Eso me pone muy feliz hyung.

-Ese es el chiste. Que tu seas feliz y si es posible... Conmigo.

-¡por supuesto que lo soy!.-Dijo casi gritando.

Reí y permanecimos aún en el auto disfrutando de nuestra estancia. Hasta que sentimos hambre. Conducimos a una tienda de panqueques por lo que nos adentramos y comimos de aquellos panes endulzado yo con cereales y JiSung con fruta.

A decir verdad era un buen desayuno digno. Cuando llegamos a casa de mi novio. Me dejó el pase a su habitación por lo cual permanecí con él un rato más. Sin embargo creí que ya había durado mucho lejos de mi casa. Al pasar unas tres horas en esa casa que no era la mía.

Me despedí y salí de ahí dirigiéndome a mi propio hogar. Por suerte mi hermana se había ido temprano, por lo que no tendría que llevarla a casa o pasar rato con ella en ese hogar.

Al llegar me di cuenta que ellos ya estaban comiendo. No quise acercarme, pues sabía que mi madre me preguntaría en cualquier momento de la mesa. Así que solo pase directo a mi habitación.
Nadie me habló, así como yo tampoco.

Me di una ducha y después me encerré en mi habitación para ver algo de películas disfrutando de la soledad. Solté un suspiro al aburrirme y comencé a chatear con JiSung para mi mala suerte él estaba en comiendo con su familia por lo que no duramos en la charla. Tuve que esperarlo mientras colocaba un juego en mi celular y me entretenía realizando lo.

Pasé una hora ahí. Después me dio hambre. Así que bajé en busca de alimento. Encontré ramen instantánea por lo qu comencé a realizarla. Brincando de susto al escuchar la voz de mi hermana. (pues la cocina ya estaba sola, los platos limpios y mis padres realizando sus actividades, igual que mi hermana)

-¿Mamá te vio tener relaciones con tu novio?.-Decia en forma de burla cruzada de manos en el marco de la puerta.

-ah...en realidad no. Solo nos escuchó es todo. Pero ya habíamos acabado.-Dije mientras revisaba si mi sopa estaba lista. Pero tenía que seguir esperando.

He Is Real (MinSung) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora