He Is Real (MinSung)

Final

Un peso más se sentía en la cama, no realicé ninguna acción, ya que supuse que alguno de mis gatos quienes se habían subido a mi cama para descansar mejor.

Permanecí aún dormido, sintiendo una respiración en mi rostro, aquello de verdad me había comenzado a molestar un poco por lo que abrí mis ojos confuso.
Encontrándome con el rostro sereno de JiSung junto a mí. Sus ojos también permanecían cerrados por lo que no dude en acariciar su rostro con mi sonrisa mostrándose.

Miré a mi alrededor dándome cuenta que estaba en mi casa, justamente en mí habitación.

-JiSungie~.-Susurré entonando cómo si cantará una canción.

Justo cuando mencioné aquello, sus ojos de forma delicada se abrieron. Tenía un lindo rostro mañanero.

Seguro y estoy soñando.

-¿Qué haces aquí?

-Tus padres me dejaron entrar y me dijeron que te dijera que ellos van a salir, creo que iban a hacer las compras.

-Odio ir a hacer las compras. Entiendo la razón por la cual se fueron sin mi.

JiSung solo soltó una risita y después habló estando un poco nervioso.

-Y... ¿Cómo le harás cuando tengamos nuestra casa? ¿Harás qué yo haga el mandado, solo?

Me quedé totalmente confundido al escucharlo, pero tal vez y yo había entendido mal por lo que solo reí y asentí.

-Espero que te vaya bien solo.

Me imaginaba que él reaccionaria de diferente forma, sin embargo solo sonrió y con su dedo índice tocó la punta de mi nariz. Riendo de forma tierna y adorable.

-¿Sigues molesto conmigo?.-Su sonrisa había cambiado a un gesto de preocupación, pero en realidad parecía más la mirada de un pequeño cachorro mirándote para que le des una galleta canina.

A decir verdad, ya ni recordaba la razón por la cual me había enfadado. Solo al verlo conmigo de esa forma juntos en mi misma habitación provocaba que olvidara aquel sentimiento negativo.
Así que negué con mi cabeza, sin articular palabra alguna. Provocando una felicidad interior en JiSung.

-Hyung... Ese día fui muy grosero con usted. No debí de hablarle de esa manera, así como tampoco debí juzgar sus preferencias. Lo lamento mucho hyung.-Se le notaba su arrepentimiento de verdad estaba vergonzado, pues bien ocultó su rostro en mi pecho abrazándome con sus brazos y entrelazando sus piernas con las mías, tal cual y como lo haría un niño aterrorizado por escuchar algún ruido en la noche.

Tal como un niño, acaricié sus cabellos, ya que a él le encantaba cuando hacía aquello, provocaba que este sonriera y se olvidara de alguna preocupación.

-Eres tú. No puedo molestarme contigo, digamos que... Me sentí con aciago, totalmente apagado y débil por tus palabras.

JiSung al escucharme levantó su mirada para observar mis ojos, viendo como un destello se realizaba en mí.

-Hyung...

Ambos permanecimos en silencio mientras nos mirábamos entre sí. Debido a que él había sentido su corazón palmitar rápidamente (así como el mío lo hacía cada vez que tocaba alguna parte del cuerpo de JiSung) ahora que lo tenía abrazado a mí sentía que este órgano saldría en cualquier momento.

El silencio no se cortó con palabras, sino con acciones. Ya que había sido la iniciativa de JiSung el querer besarme en mis labios.
Los movimientos de nuestros labios eran lentos, suaves y delicados. Era como disfrutar de algún dulce favorito.
Se dice que el ala de una mariposa es totalmente delicada. Podría correr riesgo aquel lepidóptero al tener contacto en aquella zona de su cuerpo. Por lo tanto nuestro movimientos de labios eran así de finos.