He Is Real (MinSung)

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Karaoke.

No sabía cómo pero habíamos parado en aquel sitio de diversión.
Teniendo nuestra cabina para duplas.

-No sé porque, quisiste que vinieramos aquí.

-Pues... En mi sueño tu y yo hacíamos un dúo quisiera dedicarte esa canción.

JiSung solo levantó su ceja tomando asiento mientras revisaba en el Gran libro con las listas de las canciones de aquel karaoke.

-Bien... ¿Quién es el artista?.

-Ah... No recuerdo. No sé.-Dije ya que me había parecido totalmente confuso que jamás haya mencionado el nombre de la canción o algo así. Solo en ese momento la cantamos y fue todo.-Solo recuerdo que me molestaba contigo ese día.

-Entonces menciona una parte de la letra, tal vez y con eso lleguemos al nombre de la canción.

-Si... Era algo así como... . Nega useul ttaena himdeul ttaena
Hangsang jikyeojulge neoreul wihae
Siganmajeo geoseulleoseo ne ape natanalge I believe I believe Y tu respondías con Sesangi bakkwieodo byeonchi anha yaksokhae jullae. (Cada vez que sonrías, cada vez que sea duro para tí, Siempre te protegeré
Por tí, Puedo ir en contra del tiempo
Para poder aparecer en frente de tí, Yo creo, yo creo, Incluso si el mundo cambia, ¿Me puedes prometer que nosotros no lo haremos?).

JiSung prestó con tanta atención a la letra pero negó.

-No conozco ninguna canción como esa.

-Me prometiste que nunca cambiariamos y al parecer tú si lo hiciste. Eres otro no el mismo que recordaba.-Dije en tono triste conforme a la letra de la canción. Ya que esa parte le correspondía a JiSung.

-Tú me creaste a mí a tú manera. Cantaré una hip hop.

Él tenía razón por lo que solo me senté y dejé que él colocará la música que quería. Puso uno de sus géneros favoritos por lo que me dejó pensando en sus palabras y como correspondía con la letra de la canción.
Al parecer ahora debía componer la.
En mi mente se vino otra estrofa donde él decía que me amaba.

-Más que mañana, más profundo que la eternidad
Te amo.-Susurré tarareando aquella parte de la canción, sin darme cuenta que la que cantaba JiSung había finalizado.

-Toma, únete.-Dijo entregándome un micrófono por lo que me negué bajando mi mirada, sin embargo él se agachó y besó mi nariz.

-Es por tu beso de la mañana.

Sonreí al escucharlo y pensar en que él no había cambiado para nada. Lo que me hacía muy feliz. Había acertado en eso.

Me puse de pie estando con ánimos y nos pusimos a cantar algo de pop. Y nuestros artistas favoritos. Estaba viviendo en un déjà vu.

Al estar algo cansados de estar bailando con la pandereta y de estar moviéndonos sin control caí al sofá a descansar mientras me recostaba en este. Y miré que también él quería tirar se como yo. Por lo que me senté dejando que él descansará y este mismo colocó su cabeza en mis piernas. Sonreí y comencé a caricia sus cabellos.

-Me gusta que hagas eso.-Dijo cerrando sus ojos yo solo sonreí y continúe.

-He practicado con mis gatitos casi toda mi vida.

Él soltó una risita que me pareció bastante tierna. Por lo que sonreí a mi puro impulso.

-¿Hyung?.

Me llamó mucho la atención que me llamara de esa forma por la que solo respondí con un desconfiado "Si".

-Te investigue por redes sociales a ver que tipo de persona eras y vi que eres mayor que yo. Eres mi Hyung ¿por qué no me lo dijiste? No te respeté debidamente.

-No es importante. Llámame cómo quieras.

-Seguiré diciéndote MinHo, no quiero que mi hermano se confunda cuando diga "Hyung".

-Esta bien. Aunque también puedes llamarme ah... Cariño.-Dije con una risa juguetona pero JiSung no siguió mi juego él solo permaneció en silencio.-¿JiSung? Era broma ¿sí?.

-¿lo juras? ¿Juras qué todo esto es una broma?.-Dijo en tono serio levantándose para después sentarse y mirarme detenidamente, mientras su tono de voz iba subiendo de volumen incrementándose poco a poco.

Me quedé en silencio sin saber que decir. No creí que él fuera tan tonto y pensara que yo había actuado todo. Por lo que mi mirada decayó.

-Sí. Caíste.-Dije riendo nervioso y en voz muy baja.

JiSung al escucharme empezó a reír a carcajadas limpiando sus lágrimas que le salían de la risa.

-De verdad me asusté, creí que sí eras gay.

Él seguía riendo por lo que yo solo permanecí en silencio. Hasta escuchar sus palabras decidí irme.

-¡Dios mío pero que asco! Besé a un hombre y lo peor de todo es que lo haces mejor que mi novia. Besas increíble. ¿Con quién practicabas?, me imagino que con tu novia ¿no?.

Al levantarme me sentí ofendido totalmente.

Y es que en mis sueños él era el homosexual y yo la persona que le dañaba. En la vida real yo soy el homosexual y él me hiere.
Pero lo amo.

Escuché que comenzaba a gritarme para que yo no logrará irme, pero solo ignoré y continue con mi destino. Ahora más que nada quería ir a casa. No me sentía lo suficientemente capaz para seguir soportando sus humillaciones.

Como bien tenía planeado fue hacer oídos sordos a JiSung y después tomar un autobus a la casa de mi tía Joo por lo que al llegar con esta pude pedir prestado dinero para que pagará mi boleto de ida a Seúl.

Al llegar con ella estaba totalmente triste que al verla pedí un abrazo. Me dio palabras de consuelo y así mismo ánimos para salir adelante.
Me preparó chocolate caliente y mencionó que mañana en la mañana iría mi autobus a Seúl.

No hablamos mucho de lo sucedido con JiSung, pues ella sabía que no era correcto por lo que comenzó a contarme como había sido sus días sin mí en casa y de todas las mentiras que le dijo a mi madre.
Era divertido a decir verdad.

Esa noche. No dormí para nada. Ya que en mi mente perduraba aquellas palabras de JiSung retumbar por mi cabeza.
Sin más al hacerse el sol comencé a darme una ducha para despertar mejor y a preparar mis cosas.
Mi tía se despertó con el fin de despedirse de mí.

-¿Volverás a visitarme?.-Asentí para después hacerle cariños al bebé.-¡Que bueno!, por el trabajo de mi marido en caso de que le pidan volver a Europa. Te avisaré.

Asentí e intercambiamos números telefónicos para después ella y su marido me llevarán a la estaciones de autobuses. La bebé venía dormida en los brazos de su padre, pues para ella aún era temprano.

Me despedí y salió mi autobús. Si viviera en un cuento de hadas o una película habría visto a JiSung por la ventana. Sin embargo no fue así. El clásico cliché de película. No existe.