He Is Real (MinSung)

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-¡pero que guapo te has puesto!.

Gritó mi tía abrazándome permitiéndome el paso.

En efecto... Aquella persona que había extrañado recientemente resultó ser la imagen de mi tía.

Mi madre era la hija del medio, pero después de ella seguía mi tía de Icheon y era el mismísimo retrato de MinYoung. Al fin pude descifrar la razón del cual ella estaba entre mis sueños sin conocerla del todo.

Mi tía no era anciana, ni siquiera había llegado a la menopausia. Se veía realmente joven. Los recuerdos vinieron a mí. Cuando yo era un recién niño de cuatro años mi tía jugaba conmigo era como si fuera una hermana mayor. Ya que yo era muy apegado a ella y hacía berrinches para que mi madre me llevara a casa de mi abuela con el fin de que de esta manera ella pudiera pasar tiempo conmigo. Como fuimos creciendo. Ella se hizo adolescente y decidió emprender sus viajes por el mundo sola, con una simple mochila que le acompañará. Pero jamás perdía el contacto siempre me traía algún obsequio y yo le contaba mis secretos cuando llegué a la pubertad. Por el simple hecho de que ella no estaba en Corea confiaba en que no le diría a mi madre las cosas que yo le dijera.

Por eso en mis sueños ella tomó el papel de MinYoung.

-¿No estaba en Europa?.

-Sí, pero... Mira, tengo que presentarte a alguien.-Asentí entrando a casa con ella. Al parecer ya no estaba sola, sino que tenía familia. Una linda nena con ojos razgados, piel blanca, cabello rizado y castaño claro. Era como ver una versión de risitos de oro versión pequeña. Sonreí al verla mientras le saludaba con la mano.-Mientras estaba en Europa conocí a la persona con la cual quisiera disfrutar mi vida para siempre. Terminé casandome y sin darme cuenta, mientras hacíamos los preparativos de la boda resultó que estaba embarazada. Nos casamos allá, pero justo al tener los ocho meses de embarazo y de casados decidimos venir a dar luz en Corea del Sur, por lo cual. Esta pequeña traviesa está convirtiendo esta casa patas arriba.

Me sorprendí al escuchar toda la historia, que me había perdido.

-Supongo que eso ocurrió cuando... Estaba en coma.-Ella terminó la frase junto conmigo provocando que ambos rieramos y la pequeña de rizos también lo hiciera.

Su marido apareció después siendo amable conmigo para después presentarse. Tuve problemas al decir su nombre, por lo cual preferí apodarlo como "Ojos azules" ya que tenía los ojos de aquel peculiar color.
Su Coreano no era perfecto. Pues en aquella casa se comunicaban con el inglés e incluso la pequeña estaba aprendiendo.

-Dios mío, siento que tengo el mismo inglés que tu, bebé.-Dije escuchando como los adultos se comunicaban, mientras yo miraba a la pequeña entretenerse con un gran cubo donde debías insertar las figuras correspondientes en los huecos del cuadrado interactivo.
Decidí ayudarlo para después escuchar a mi tía Joo.

-Min, saldremos a comer. Así conocerás la ciudad de noche. ¿Qué dices?.

Me negué pero después ella insistió, por lo que no tuve otra opción. Por lo que me puse de pie y acompañe a mi tía a su vehículo. Ella se encargó de su hija, que era bastante calmada. No entendía porque decían que era un torbellino andante.

Su marido condució con ayuda del GPS para llegar a nuestro destino. Un restaurante coreano, donde cocinabamos a nuestro gusto aquellas carnes que en volvíamos en lechuga.

La pequeña al ser de noche y estar en el auto se había quedado dormida profundamente, permaneciendo en los brazos de su madre quien la arropaba.

-Are you sure you can eat with the baby in your arms?.

Habló ojos azules por lo cual tuve que asintir sin saber que ocurría. Pero después mi tía solo soltó una risita.

-I'm fine.-Respondió en silencio para no despertar a su bebé. Pará después volver a hablar en coreano conmigo.-No te asustes MinHo, me hablará a mí en inglés. Trató de que aprenda coreano así que solo sabe lo básico por ahora. ¿Cierto amor?.

-¿Ah?, si, si.-Respondió nervioso, provocando que ambos asiáticos rieramos.

-Me preguntó si estaba bien con la pequeña en brazos, y a decir verdad no me molesta.

-¿No va a comer ella?.

-Aún es pequeña, aún toma leche materna.-Mencionó acariciando los cabellos de su pequeña con rizos.-Me dijo tu madre que... ¿Al despertar te comportaste extraño cierto?.

Asentí comenzando a narrar le todo lo que había pasado por este largo período. Así mismo le comentaba casa situación por la cual estaba llevando en mi búsqueda. De la misma manera que le conté como habían sido mis sueños.
No mentía era difícil charlar, pues yo quería contarle muchas cosas detalladamente a mi tía Joo, sin embargo su marido le hablaba en ocasiones o nos miraba sin entender bien de lo que decíamos.

Al salir de ahí, miré la calle. Deteniendo mis pasos para después observar detalladamente la ciudad.

-¿Qué ocurre?.

No respondí y sólo me quedé en silencio.

-¿tuviste un déjà vu?

-Yo...-Mis manos se colocaron en mi cabeza, de la misma forma que cerré mis ojos.

JiSung... JiSung.

-No hyung, ya le dije que soy de Icheon. Solo tengo dos años viviendo en Seúl.

-¿ah sí? ¿Cómo era tu casa de allá?.

-Pequeña. Todo Corea es pequeño. Crecí en unos departamentos, cerca de un restaurante llamado "GongGyeogYum!" te ubicas fácil por un letrero que tiene "GGY" marcado con un dibujo animado de un señor barrigon. Caminas unas cuantas cuadras al este y en el edificio gris con un numero 452 es donde vivía.

Había recordado alguna de nuestras tantas pláticas. Comprendí la razón por la cual estaba en esa ciudad. Ahora necesitaba que me llevara mi tía hasta ese sitio, sin embargo su bebé seguía durmiendo. Y ellos se veían cansados. Por lo cual preferí mantenerme en silencio sin decir nada.

Estaba seguro que al día siguiente yo mismo iría en mi búsqueda a JiSung.