La última voluntad

Capítulo 26

Pov Lidia:

-Bueno, Lidia, me comentó Ethan que estás ayudándole con una tarea de su clase de coreografía freestyle -dijo la madre de los hermanos dejando por un momento los cubiertos al lado del plato.

-Así es, estamos combinando varios estilos -dije después de tragar el trozo de carne un poco bastante cruda.

-Espero que tengáis buenas notas -dijo su padre, mirando a sus hijos seriamente.

-Kat nos comentó que vuestra familia y tú os habíais mudado desde Rosewood, ¿es cierto si no me equivoco? -volvió a hablar su madre.

-Bueno sí, el hecho de que me hubiesen invitado a estudiar aquí, motivó que mi padre pidiera el traslado en su bufete de abogados -dije limpiando mis manos en la servilleta que tenía en mi regazo.

-Oh, ¿tu padre trabaja como abogado? -dijo Natasha sorprendida, yo asentí mientras tragaba unas de las patatas hechas al horno, que sorprendentemente estaban bastante comestibles -¿Y tu madre?

-Oh, a mi madre le encanta organizar eventos, así que cuando supo que a mi padre le daban el traslado. Compró un local en el centro para instalar sus oficinas, aunque creo que todavía el arquitecto no le ha dado una fecha sobre el término de la obra -dije pensando si mamá lo había mencionado en alguna de nuestras conversaciones.

-Oh sí, las obras en esta ciudad tardan un poco bastante, a menos que conozcas a los arquitectos adecuados -dijo el padre de Ethan.

-¿Cuál es el arquitecto que dirige la obra de tu madre? -preguntó su mujer -Si quieres yo puedo recomendarle uno.

-Creo recordar que se llamaba Anthony Blake -dije echándole una mirada a Ethan, quien no había hablado desde que nos sentamos solo comía y parecía aburrido.

-Oh, entonces no tendréis ningún problema, es el mejor -dijo ella sonriendo abiertamente.

-Sí, aunque mamá sigue un poco estresada por no trabajar, se dedica a dirigir los eventos de Filadelfia desde casa -dije sonriendo un poco tensa, mamá suele estresarse demasiado y gritar por la casa para tranquilizarse y descargar sus frustraciones con quienes no tienen culpa -No soporta estar sin hacer nada, necesita el ajetreo de una oficina.

-Como otra que yo me sé -dijo Ethan riéndose, yo arqueé la ceja al escucharlo -Tiene cada segundo de la semana planeado.

-No es malo planificar las cosas -dije defendiéndome -Me ayuda a tener todo organizado.

-Ya, pero es mejor dejar un tiempo libre para relajarse -dijo levantando la ceja izquierda sin apartar la mirada de mi, conocía sus métodos de relajación y que dijese esa indirecta en medio de una comida con sus padres me sorprendía, creía que comentarios como estos no lo diría delante de sus padres, aunque debo aclarar que este es uno de los más light.

-Me gusta aprovechar el tiempo al máximo. -dije mirándolo seriamente -Así luego puedo pasar tiempo con mi familia, mis amigos y mi novio.

-Eres tan mona -dijo mirándome con ternura -Siempre sabes qué decir -cogió mi mentón y me besó delante de sus padres.

Intenté apartarme ligeramente pero me sujetó de la nuca. Mordí su labio inferior sin hacerle demasiado daño, después de un par de segundos.

-Ethan -mascullé riéndome.

-No hay nadie, puedo besarte cuanto quiera -dijo señalándome con la cabeza y pude comprobar que era cierto sus padres y su hermana nos habían dejado solos cuando comenzamos a besarnos.

-¿Qué van a pensar tus padres de mí? -dije con una sonrisa apenada.

-Que me haces feliz, que estás enamorada de mí -dijo colocando un mechón de mi cabello detrás de mi oreja, sonriendo bobamente.