Tres Caras

Capítulo 44

En ese momento en el que no sabía si hablar o no mi teléfono empezó a sonar. Cuando saqué el teléfono y vi quien era cogí la llamada..

LLAMADA

Madre: Me encantó el truco que utilizaste.

Tn: Gracias..

Madre: ¿Estás con ellos?.. - dijo en voz baja.

Tn: Dime una cosa - dije en español. - ¿Algún día dirás que sigues viva?

Madre: ¿Por que esa pregunta de repente?

Tn: Por que me gustaría dejar de engañarle a él.

Madre: Cuando dices "a él" te refieres al policía ¿no? - En ese momento vi como Conan ponía el traductor.

Tn: Si, me gustaría presentároslo. - dije mientras miraba a otro lado.

Madre: Bien.. Dile que seguimos vivos, que el por que nos hicimos los muertos es por que alguien nos perseguía a mi y a tu padre..

Tn: Ya veo por donde va la cosa. Bien, nos vemos.. Mamá. - Al decir eso todos me miraron. Al parecer la palabra mamá es algo que muchos conocen, y ellos no iban a ser menos.

FIN DE LA LLAMADA

Rei: ¿Mamá?

Tn: Veo que entendiste esa palabra. - dije sonriendo tristemente. - Ella sigue viva, al igual que mi padre.

Conan: ¿Que?

Tn: Al parecer una mafia se enteró del talento de mi madre ya que al ser maga era buena con las cerraduras, láseres, con muchas cosas.. Ellos querían que mi madre y mi padre se encargaran pero se negaron.

Conan: Por eso decidieron hacerse los muertos ¿no?

Tn: Era mafia de joyas quienes los perseguían..

Rei: ¿Esa mafia sabían de ti?

Tn: Mi madre quiso dejar la fama a un lado y la familia a otro, no quería que la prensa se metiera en nuestra familia. De seguro o no lo sabían o si lo sabían pero decidieron no hacerme nada ya que sería muy extraño, como mis padres supuestamente murieron ya no sería de nada hacerme a mi algo y además la policía investigaría mucho.

Rei: Cierto.. Se investigaría aquello ya que sería muy extraño.

Conan: Entonces ellos siguen vivos.

Tn: Si.. Están en Haido ahora mismo viviendo. Además.. Os acordáis aquella vez con mis tíos..

Conan: Si..

Tn: Pues eran mis padres.

Rei: ... - Este se quedó paralizado, parecía pálido. - Me estas diciendo que estaban allí tus padres..

Tn: Si, mi madre ya te conoce, te estuvo investigando. Ella quería saber si eras de fiar. Le caíste bien, pero mi padre..

Rei: ¿Tu padre?..

Tn: No se fía mucho.

Rei: ..... - Este se quedó congelado.

Yuya: Señor Furuya.. Nunca antes le vi con esa expresión.

Rei: Tn ¿te importa si me quedo en tu casa? - dijo mirándome.

Tn: ¿Eh?

Rei: Quiero hablar contigo.

Tn: Bien, como quieras..

Una vez que dejamos a Conan en la agencia, Yuya nos llevó a mi casa. Este se quedó en el salón mientras yo me cambiaba de ropa en mi habitación, dejé los cambios de ropa debajo de la cama para que no pudiera verlos.

Cuando ya me puse el pijama fui hacia él, este se quedó mirando una foto, al parecer en ella estábamos yo y mis padres.

Rei: ¿Tienes algún pijama de tu padre? - dijo mientras se quitaba la chaqueta.

Tn: Ahora que lo dices ellos dejaron algo de ropa aquí, bastante, pero se llevaron una poca para cuando la policía mirara entre sus cosas no sospechara. - dije mientras iba con él al cuarto de ellos.

Al llegar los dos miramos dentro del armario, encontré un pijama que le podía servir así que se lo dejé. Mientras cerraba el armario había algo que me extrañaba.. Empecé a mirar en su cuarto, pude encontrar el sótano hace tiempo pero a lo mejor había algo más.

Mientras él se cambiaba yo empecé a buscar por todas la habitaciones de la planta de arriba alguna habitación más.. A lo mejor un ático, o algo..

Tn: Si fuera un ático tendría que ser el techo.. O puede que como el sótano tenga que haber una llave. El sótano es el libro en una estantería.. Entonces el ático será.. No lo sé - Dije suspirando - A quien quiero engañar..

Rei: ¿Que buscas?

Tn: ¿Eh? - Al darme la vuelta lo vi con el pijama de mi padre.

Rei: ¿Buscabas algo?

Tn: No tranquilo - dije sonriendo.

Rei: Bueno..

Los dos bajamos al piso de abajo, estábamos haciendo la cena juntos. Mientras hacíamos la cena me fijé que era bueno con el cuchillo ya que era rápido y habilidoso.

Mientras cenábamos le conté el como me di cuenta de que ellos seguían vivos, claramente no le dije sobre Samy..

Cuando terminamos de cenar él se puso a lavar los platos, los lavaba y los dejaba en el lavavajillas. Al terminar este se sentó junto a mi, apoyó su cabeza en mis piernas y se quedó viendo la televisión en esa postura.

Empecé a acariciarle la cabeza, este se veía cómodo. Estábamos viendo una serie, justo cuando los protagonistas se estaban besando yo y Rei nos pusimos algo nerviosos.. Ellos empezaron a llegar un poco más lejos, nuestros ritmos empezaron a acelerarse. Él podía notar mi ritmo ya que al estar apoyado en mi pierna podía oír el pulso perfectamente.

De repente él se reincorporó, su mirada se puso en la mía. Los dos nos mirábamos sonrojados, nerviosos, avergonzados.

De repente sentí el impulso de acercarme a él, este al ver mis intenciones se fue acercando también a mi hasta quedar conectados. Nuestros labios era el punto donde los dos nos uníamos..

Queríamos más, sentí aquella adrenalina, aquél deseo, los dos lo queríamos. De repente él se puso en pie y me cogió en brazos, mientras íbamos hacia mi habitación él me seguía besando.

Al llegar a mi habitación él me dejó tumbada en mi cama suavemente, poco a poco se tumbó encima mía, sus besos fueron pasando de mi boca a mi cuello.

De repente su mirada se posó en la mía, le hice una llave para dejarlo debajo mía. Con solo un chasqueo de mis dedos hice que mi ropa desapareciera, este se quedó observándome detenidamente.

Rei: Tn..

Tn: Rei.. - Este empezó a quitarse la parte de arriba. Con chasquear de nuevo los dedos le quité lo que le quedaba de ropa.

Rei: ¿Estás segura? No quiero hacer algo que no quieras hacer tu.

Tn: Yo estoy segura Rei - dije mientras lo besaba. De repente sentí como él iba adentrando su miembro poco a poco en mi, una sensación de placer y dolor empezó a apoderarse de mi.

Rei: .... - Sentí como su respiración se agitaba con cada estocada que el daba.

Sensaciones que nunca antes había experimentado, no sabía si yo fui o no la primera en él pero no me importaba, ahora lo único que quería era que no se separara de mi. Sus brazos me sostenían, estaba sentada encima de él en el filo de la cama.. Aquello era algo que no podíamos parar una vez que empezamos.