El día se oscurecía lentamente, tenía un poco de sueño y el restaurante estaba lleno de personas, tal vez porque era fin de semana.
No sabía nada de Joe y su presencia no me hacia falta, él tenía que pedirme disculpas, en los últimos años me enteré que en el siglo XXI existía el orgullo.
Me senté en una silla a observar el paisaje, todos los locales estaban llenos de luces, se veían alegres, por primera vez.
Annie entró con un hombre tomada de la mano, se me hacia difícil entenderlo. Ella no se ha enamorado nunca y tampoco asiste a Johnson's. La observé y llevaba un vestido lila y tacos morados, una trenza lucía su melena rubia, me miró y sonrió acercándose.- Camila ¿Qué haces aquí? ah, trabajas aquí.
- Sí, ya veo que no vienes sola.
- Sí, claro él es Robert, mi prometido ¿Te llamabas Robert, no?
- Sí. -Dijo él.
- Mucho gusto, soy Camila. -Dije extendiéndole la mano. Les doy una semana juntos.
- ¿De qué trabajas? ¿Por qué no has ido a la universidad? eso de Joe y tú va en serio ¿no?
- Mesera. Y mi madre dejó de pagarla. Joe está bien.
- Él pero ¿ustedes?
- No quiero hablar de eso.
Los dirigí a una mesa. Robert era un moreno alto, sus ojos eran verdes. Era atractivo y hacia buena pareja con Annie.
Les hice el pedido y se lo llevé a Rodney. Luego se los entregué con un vino.
Me recliné en una silla y comencé a escribir sin saber, escribí algo que era cierto, el amor no era una mierda, sino las personas de las que te enamoras.Estaba segura que lo había leído en una página web, y solo se me vino a la mente.
Me coloqué la chaqueta con la cual había llegado, la noche estaba fría, mi turno había acabado. Annie me invitó a su mesa luego de que Robert se fuera.- ¿Qué pasó con Joe? no lo conozco bien, pero explícame.
- Vivo en su casa, y él peleaba.
- ¿Cómo? ¿Por qué era sádico o por diversión?
- Peleas callejeras.
- Continúa.
- Luego le dije que prefería que corriera en motos, allí conocí a su ex-novia.
- Vale, no me dejes intrigada.
- Se acostó con ella y creo que la maté, aunque las posibilidades son pocas.
- ¡Al fin sacaste a la Camila que no conocía! dime, ¿Cómo la golpeaste? ¿Con martillo? ¿La enterraste viva?
- Nada de eso. Solo le pegué y ya quedó inconsciente ¿Quién queda inconsciente por mí? a esa chica la rasguñan y muere. Bueno en fin, Joe está arrepentido.
- Un chico arrepentido vale millones.
- Si te fallan una vez lo harán dos veces.
- No todos.
- Creo que sí.
- Crees, eso es una suposición.
- Creer es casi afirmar.
- Casi.
- ¡Basta! no todos son así, ganas. -Mentí.
- Dime que lo perdonarás.
- Nada me hará cambiar de idea.
- ¿Por qué? él está re-bueno.
- Que sea Brad Pitt o Leonardo DiCaprio.
- No te arrepientas luego.
- Annie...
- Solo digo.
- Me estás presionando.
- ¡Mierda, haz lo que quieras!antes eras vulnerable.
- La vida me ha enseñado demasiado, Annie. Pude ganar el premio de la mujer que más ha llorado en diecinueve años.
- Estoy totalmente de acuerdo. ¿Por qué no lo perdonarás?
- ¿Se siente bonito que te engañen?
- Vale, ya entiendo. Pero Joe te ama, ahora asiste menos a la universidad por una razón, tú.
- Por eso existen los niños suicidas, por la presión. Lo perdonó, pero hace otra cosa y me olvida.
- ¿En serio?
- No.
- Piénsalo, te deseo lo mejor.
- Bien.
- Adiós. -Dijo dirigiéndose a la puerta.
No sabía que hacer, estaba completamente confundida. Mi mente negaba rotundamente a que volviera con él y mi corazón quería volver a palpitar por él.
Decidí marcharme del lugar e irme a casa o tal vez volviera a Spring Hill.
Cuando salí Emely estaba cerrado el local, casi siempre era yo la última que se iba. Emely desapareció entre lo nublado que estaba esa noche y me dirigí a mi camino. Iba a cruzar una calle cuando impacto contra una pared con un beso robado.
- Joe, suéltame. -Dije alejándolo, fue inútil.
- Camila...
- ¡Joe, mierda! - Siguió besándome -, Déjame.
Una música y unas luces de un auto nublaron lo que me quedaba de vista, un hombre bajó del auto y se acercó a nosotros, mientras una chica esperaba en el asiento. ¡Mi salvador!, pensé.
- Dijo que la soltarás. -La voz era familiar.
- ¿Quién eres tú para decirme lo que debo o no hacer con mi novia? -Dijo Joe.
- Su ex-novio.
Quedé estupefacta, era él y repentinamente apareció como Batman. Cuando desperté de mi mundo lejano ya Joe y Alonso estaban en el suelo con puños y sangre, no sé como pero Annaís apareció intentando separarlos.
- ¿Qué haces tú aquí?
- Es mi nueva novia. -Dijo Alonso.
Me cayó en el hígado. Después de tanto tiempo, después de que yo se lo haya quitado, los dos seguían sintiendo cosas uno por el otro, que noche.
- Si te vuelves a meter con Camila te voy a... -Dijo Alonso.
- Es mi novia. No es mi culpa que me haya preferido a mi y no a ti.
- Imbécil.
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Por Su Amor
De TodoCamila y Alonso han tenido un amor de cuento de hadas, con el pasar de dos años juntos, aún siguen teniendo una química inmarcesible, son inseparables, pues parece que su amor es más grande que todo lo que les rodea. Los problemas que han afrontado...