Puedo Tenerlo?

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By Tay

-¿Te sientes bien?   - Preguntó Off mientras hacía girar su automóvil a la izquierda. Sujetaba el volante con ambas manos y tenía la mirada fija hacia el frente, en el tráfico que a esta hora se pone un poco intenso. Rebasa uno que otro auto y seguimos nuestro camino a la Universidad, pasamos por unos pequeños puestos que están situados en la acera, en ellos se venden gran variedad de dulces y postres típicos de Tailandia. Se detiene detrás de un camión de alimentos ya que el semáforo dio luz roja indicando que paremos la marcha.

Él aprovecha para comprar algunos dulces, los vendedores ambulantes que se pasean hábilmente entre el tráfico le ofrecen varios, pero él siempre elije los mismos. Trufas de chocolate blanco con virutas de chocolate negro. Está de más decir que son los favoritos de Gun, ya que a Off no le gustan los dulces, él nunca los prueba, a no ser de la boca del mismo Gun.

Este camino se me ha hecho tan habitual. Cuando él está de viaje vengo solo - cuando puedo, que es casi siempre- Y cuando trabaja en la oficina, como hoy, muchas veces venimos juntos para recogerlo e ir a comer los tres.

-Claro que sí     - Respondo dándole una gran sonrisa antes de asentir con la cabeza    - ¿Por qué preguntas?

Le da el pago a aquel muchacho desgarbado, quién no a de tener más de quince años. Le dice que se quede con el cambio, el chico sonríe, le da las gracias y un pequeño wai, me mira.

- Últimamente te he visto muy distraído ¿seguro estas bien? mira que te conozco, no me mientas.

-Estoy bien, un poco cansado por el trabajo, pero bien, no te preocupes    -Le afirmo dándole una sonrisa sincera.

-Hum, ok, sabes que puedes contarme lo que sea ¿verdad? yo estoy para ti incondicionalmente.   -Me dijo mirándome a los ojos. Yo Asiento nuevamente.

-Serás el primero en enterarte, Peng, si me pasa algo, te lo contaré.

El camión da marcha y nosotros también. Fijo mi mirada otra vez hacia la ventanilla del auto, son casi las dos de la tarde, hora en la que Gun sale de clases. Se supone que está es nuestra hora de comer, pero Off prefiere recoger a Gun, después pasamos por algún restaurante y se asegura de que se esté alimentando bien, después de almorzar lo lleva a casa. Es muy protector; y a mí la verdad, me gusta pasar tiempo con ambos.

Tengo tantos años conociendo a Off, que casi siempre puedo adivinar sus movimientos. En la oficina es cien por ciento profesional, maneja muy bien a su equipo. Incluso lo hace mucho mejor que mi propio jefe de grupo, es por ello, que los proyectos de gran envergadura se los destinan a él y su equipo. Parecen ser una gran familia, pero como en todas las familias, siempre hay una oveja negra, y en está, es Mild.

En mi vida me había cruzado con una persona tan caprichosa como ella. La tipa odia a los gay's. Y obviamente en la oficina; saben que tanto Off, Toptap y yo, lo somos. Bueno, en realidad Off es bisexual, pero eso no cambia el hecho. Ella nos mira con desprecio a toptap y a mí, pero puedo jurar por mi vida que no es la misma mirada que tiene cuando ve a Off. Muchas veces en las reuniones generales que se dan cada mes, yo la he visto como lo observa mientras él da información de algunos proyectos a su cargo y, no, no es con desprecio, yo lo describiría como una mirada de "frustración". Estoy casi seguro que a ella le gusta él, pero como les digo, Off es tan profesional, que puedo apostar que ni se a dado cuenta de sus miradas, si yo fuera él, me cuidaría de Mild, cuando se empecina con algo, ella es muy peligrosa.

Eso es en el aspecto laboral. Ahora, en el personal, Off da un giro de ciento ochenta grados. He tenido la oportunidad de verlo en relaciones anteriores, y pues la verdad me daba un poco de pena con su pareja anterior, él era tan distante. A pesar de tener varios años con Arm, nunca lo trató como trata a Gun. Con él era un poco...como decirlo..."frio". Sí, esa es la palabra correcta. Off siempre ha sido así con sus relaciones pasadas. Una vez que terminó con Arm, nunca dejó de ir al trabajo, ni se dio un tiempo para él. No sabría decir si a él le afectó o no el término de su relación, porqué nunca lo vi llorar ni lamentarse, de hecho, casi nunca lo hace.