Capitulo 36: Pelotas rotas.

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Hola hola!! Aqui os traigo otro capitulo que espero que os guste! ;) 

Quedan dos capitulos de esta historia más el epilogo... ¿Quereís que la extienda un poco? Los dos ultimos capitulos son de la vida de Raúl y Lara ya más adultos, y con sus preciosas hijas con 15 aniñitos nada menos ¿Sabes lo que significa? ¡¡ Raúl celoso por sus hijitas!! jajaja.. 

Comentar, votar, decirme que quereís jajaja estoy a vuestra disposición =}

El capitulo de hoy se lo dedico a Rosmarizv, por que creo que ayer, te hice recordar algo triste =) asi que te dedico el capitulo por que te lo mereces!! =D

Espero vuestros comentarios, pensarloslo, ¿la acabo ya o la extiendo un poco con al vida de nuestras preciosas gemelas?. Os dejo, voy a concentrarme en la historia de MARIO!

Besssssssssssitos!

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Habían pasado un par de semanas desde que le di aquella sorpresa a Raúl. Estaba haciendo la comida, una gran comida. Venía mi madre con Daniel, mis tres hermanos, Jaime y Estefanía, Mario que trajo a Elena como acompañante, aunque ninguno sabíamos realmente que se traían estos dos.., mi padre con su mujer y mi "Hermano" y nadie más...

Decidí hacer ensaladilla rusa de primero, y encargue cinco pollos y hice una gran fuente de patatas fritas. Subí a arreglarme cuando hoy un grito. Baje corriendo en ropa interior y vi a Raúl tirado en el suelo, con cara de dolor, y sus manos en su entrepierna.

-Bebe, ¿Qué te pasa?.- Dije preocupada arrodillándome a su lado.

-Dios, tu hija Marta, me acaba de dar un balonazo en las pelotas.- Dijo retorciéndose de dolor, yo me empecé a reír y sin esperármelo Raúl me tumbo en el suelo y puso sus manos por encima de mi cabeza, junto a las mías, dejándome inmovilizada.

-Ahora no te ríes tanto...- Dijo pícaramente, bajo su vista hacía mi cuerpo y su semblante se puso serio.- Que cojones..... ¡Estás en ropa interior!.- Dijo sin dejar de mirarme.

-Te oí gritar y baje corriendo como estaba...- Dije riéndome.- Si me sueltas y dejas de mirarme y pensar cosas sucias, me podre ir a la habitación a cambiarme.

-Tienes razón...- Pero ni me soltaba ni se quitaba de encima ni nada. Note algo duro en mi intimidad, le mire con los ojos abiertos y me sonroje. Ni con el paso de los años, se había mermado el deseo que sentíamos el uno por el otro, si cabe, había crecido.

-Raúl...- Dije en un susurro...- bebe.- Dije más alto, me miró y me vio sonrojada.

-Lo siento yo...- Dijo mirando a mis hijas.- Lara ahora mismo no me puedo levantar...- Dijo dejándome extrañada, debió de verlo en mi cara, y me explicó.- Lara como has podido notar estoy empalmado, llevo pantalón corto, bañador para ser exactos, si me levanto ahora, mi hijo me va a preguntar que es el bulto que sale de mis piernas.- Me sonroje aun más. Mis hijas desaparición para aparecer minutos después.

-Papa, mama, a estáis aquí, ya han llegado los tíos y los abuelos.- Y aparecieron mis padres, Daniel, mis hermanos... Mi madre habría llamado y al no abrir, usaría su llave.

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