Capitulo 38: ¿La historia se repite?.

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Aqui os traigo otro capi más y el último de esta historia =) aunque... ¡HABRA TERCERA PARTE! Todavía tengo que pensar como hacerla, por que no estaba echa... jajajaaja pero la subire la subire, ya que ha tenido tanto exito.

Os dejo con Raúl, lo siento si hay algun error, mientras escribía no podía evitar que se me calleran las babas... =] Es taaaaan hombre taaaaaan perfecto tannn agg... y vereís el epilogo aaaaaaai madre jajajaja

Bueno, nos vemos mañana con el epilogo! ;) Espero que os guste, espero vuestros votos y comentarios y daros las gracias por que me leaís, me comenteís y me voteís, nunca pense que esta historia fuera a tener  tanto exito, ni que fuera a poder subir la segunda parte, y mucho menos una tercera!! =D asiiiiii que mil gracias a todos.

Os dejo con nuestras gemelas adolescentes... ¿Os suena de algo la escena? =P

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P.O.V Marta

Llegamos a la fiesta, y lo primero que hicimos fue buscar nuestras amigas, que no tardamos mucho en ver, eran únicas. Me lo estaba pasando bastante bien, y tampoco tenía el problema de llamar la intención de ningún chico. 

Vi a mi hermana ponerse triste y mire en su dirección, allí estaba Cristian, el mujeriego, el ligón del instituto, bailando muy ordinariamente con una chica, que iba algo contenta ya.

-No te preocupes, no merece la pena que te pongas triste por ese mierda, vamos a pasárnoslo bien, que para eso hemos venido.- dije tirando del brazo de mi hermana para bailar con ella.

Estuvimos bailando unas seis o siete canciones, varios chicos se acercaron a bailar con nosotras, aunque tampoco les hicimos mucho caso. Me siento algo cansada, asique decido ir donde están nuestras amigas, seguida de mi hermana.

-Hombre Iván.- dije al ver a nuestro amigo desde parvularios.- ¿Qué tal te lo estas pasando?.- Dije levantado la voz para que me oyera.

-Bien bien, genial. ¡Hasta el ligado!.- Dijo riéndose. 

-Jajaja que tonto eres.- dije riéndome.

-Tata.- me dijo Ainhoa con una sonrisa deslumbrante.- Voy a bailar un rato con Cristian ¿ok?.- me aviso mi hermana, puse una mueca de inconformidad, que ella calmo dando un beso en mi mejilla.

-Eiii ¡que pasa don Juan!.- dije riéndome mientras levantaba el mentón de un cabizbajo Iván.

-Nada es que...- dijo mirando a mi hermana. Desde hace un año Iván había empezado a sentir cosas por mi hermana, por supuesto, me había dado cuenta.

-¿Es por mi hermana verdad?.- pregunte como si no fuera obvio.- ¿por qué no te lanzas y la dices que te gusta?.- dije sonriéndole.

-No... Nooo... ¿Tanto se me nota?.- dijo tras intentar negar lo innegable.

-No sé, para mi parece muy evidente.- dije riéndome.

Estuve un rato mas charlando con él, y después me fui a seguir bailando con mis amigas. En pleno baile, empecé a sentirme mal, triste, busque a mi hermana por todos los sitios de la pista de baile improvisada y no la encontré.  Tampoco veía a Cristian y sentí una punzada de dolor, pensado que podía estar mi hermana en peligro.

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