VIAJE EN EL TIEMPO [SCORBUS]

FRED II WEASLEY

Rose como buena chica responsable, se despertó más temprano que todos. Una vez lista se dió cuenta que faltaban 20 minutos para que todos los estudiantes estuvieran en el Gran Comedor. "Tanto me demoré con el cabello" pensó y es que había sacado ese cabello enmarañado que decían, tenía su madre en sus tiempos de estudiante. Así que como buena prima y compañera decidió despertar a los demás con un potente Aquamenti.

Al terminar con su hermano, se dirigió a la última habitación que faltaba, la de Albus y Scorpius. Movió con suma delicadeza el picaporte de la puerta y abrió muy despacio. Sin esperar encontrarse con aquella escena.

Albus tenía rodeado a Scorpius por la cintura. Ambos con una sonrisa envidiable en el rostro y un poco de sonrojo. Si bien tenían puesta toda su ropa. La mano de Albus estaba tocando la piel descubierta del rubio.

Se veían malditamente adorables. pensó Rose. Una lástima que os tuviera que despertar.

-Aquamenti- un fuerte chorro de agua salió de la varita de la pelirroja, mojando a su primo y a su amigo.

-¡Que demonios! -exclamó Albus- ¡Rose! -se sonrojó al ver a su prima. Rose no sabía si era por miedo o por enojo.

-¡¿Qué fue eso Rose?! -preguntó Scorpius- con un simple grito bastaba.

-Miren el lado positivo, ahora ya no tiene que bañarse -Albus y Scorpius la miraban mal- Ah no ser -se hizo la que pensaba- que se quisieran bañar juntos -los chicos se sonrojaron y Rose rompió a carcajadas.

-Emm Rose no es lo que piensas -excusó Albus.

-Sí, solo que emm... no había otra cama -siguió Scorpius.

-Y por eso es que Albus te tenía abrazado -inquirió la Weasley levantado una ceja y volviendo a reir por la cara de ambos magos- Chicos -los miro seriamente- no se preocupen, no le diré a nadie. Ustedes lo harán a su momento y si alguien no lo acepta, pues yo estaré ahí para lanzarle un mocomurcielago  -los chicos le sonrieron agradecidos- . Bueno, ya casi es hora de irnos; faltan 5 minutos para bajar así que apresúrense -y salió por la puerta.

Los chicos se secaron y salieron a reunirse con los demás en la sala para desayunar pero al parecer ya se habían ido.

-Albus, ¿Cómo crees que se lo tomen nuestros padres?

-No lo sé, pero no me importa -agarró la mano del rubio- yo te quiero y eso me hace feliz.  Además tenemos tiempo antes de volver al futuro. -Scorpius se rió y Albus aprovechó para besarlo.

-Ya vamos -Scorpius se separó y Albus gruñó- se nos hace tarde.

-Esta bien -puso una mano en el hombro del rubio.

-¿Qué haces? -inquirió este.

-Te abrazo -se encogió de hombros-, eso hacen los amigos -y así salieron rumbo al Gran Comedor sin percatarse de la persona que se encontraba atrás y había escuchado todo.

***

El trío de Oro se dirigía también al salón comedor junto a los gemelos. Estos últimos estaban ansiosos, pues conocerían a su hijo y sobrino. Llegaron al Comedor y fueron a sentarse comenzando a comer.

-Me pregunto quién fue la desafortunada que se casó contigo Feorge -su hermano le dio un codazo- Quieres que sea alguien en específico o aún no te gusta nadie.

-La verdad es que si quiero que sea alguien pero no sé si me corresponda, mejor no me hago ilusiones -contestó George algo desanimado no muy común en él- Y tú que me dices ¿Hay alguien?

-¡Angelina!

-¿Qué? - se sobresaltó George .acaso a Fred también le gustaba ella. se preguntó.