Come with me

Veintiuno

— tiene que haber otra opción — Alessia daba vueltas por la estancia — ¿sabes que van a sospechar si empiezan a desaparecer personas?

— y ¿si solo los convierto? — sugirió el Vampiro

— ¿eso que implica? — ella tomó asiento frente a él para poder tomarlo de las manos — no los matas pero quedan vivos para siempre

— si, básicamente pero obviamente no entiendes que está pasando hasta que lo vives y el problema es que si yo no encuentro sangre ellos tampoco lo harán

— así qué hay dos opciones, se vuelve un pueblo lleno de vampiros o un pueblo fantasma gracias a todas las muertes que habrá ¿no?

Adam asintió, no quería hacerlo pero las provisiones se habían acabado bastante rápido y no había opciones de buscar a un doctor que le ayudara con su problema.

Alessia estaba entre mantener vivo a su ahora novio y en saber qué demonios había pasado con la señora en la casa, fijo su mirada en Adam, él estaba con la mirada baja intentando mantenerse despierto.

— toma mi sangre — me dijo sin más

— Alessia ¿que? — este levanto la mirada — no, no podría hacerte eso

— no toda, no me conviertas solo lo que necesites — se sentó a su lado — no es mucha ¿o si?

— no, pero tendría que hacerlo al menos una vez cada cierto tiempo

Los ojos brillantes del vampiro se fijaron en los de ella, sabía que si hacía eso no había vuelta atrás, no sabía si iba a poder detenerse y detenerse justo a tiempo.

— Alessia — prosiguió — quiero que estés segura de esto, intentaré hacerlo lo mejor posible pero hay una pequeña posibilidad de que

— ¿que me mates? — cuestionó la pelinegra — ya se Adam, creo que al momento de aceptar estar contigo sabía a lo qué me enfrentaba

— no quiero que eso pase, al final podría convertirte pero la muerte también está implicada

— dame unos minutos y ahora vuelvo — dijo Alessia — piénsalo bien en cómo quieres hacer esto y mientras yo iré a preparar algo

Adam frunció el ceño, vio como la chica entraba a la habitación ahora designada para ambos, echó su cabeza hacia atrás, no quería hacerle esto a Alessia y menos después de lo que acababa de pasar, estaba débil, no había sido sincero con ella respecto a la señora y las cosas se estaban complicando cada vez más.

Se estaba quedando dormido, sin fuerzas casi cuando escuchó que Alessia lo llamaba desde dentro de la habitación, se incorporó, fue hasta ella y cuando entró encontró a la chica con una especie de vestido antiguo, blanco en su totalidad que dejaba al descubierto los hombros de la chica.

— ¿estás seduciéndome? — le cuestionó divertido

— no seas tonto, bueno un poco pero no era el objetivo en si — dijo ella apenada — es para facilitarte las cosas — señaló su cuello — justo aquí cariño

— Sia, esto no es un juego — se acercó, pero para tomarle las manos — es importante, me vas a dar tu sangre, que no es como cualquier otra

— ¿mi olor te dice qué tal buena o mala es mi sangre?

— la de todos ... pero la tuya es especial ya te dije — se sentó al borde de la cama

— estoy muy muy segura de lo que estoy haciendo Adam

El vampiro cómo era costumbre llevaba el atuendo de andar por casa, su característico pantalón negro, su bata y más nada, lo que facilitó a Sia hacer su siguiente movimiento, acarició el marcado torso del pelinegro, lo que lo hizo tomar una postura más erguida.

Alessia dejó la comodidad de su asiento en la cama para sentarse a horcajadas en las piernas de su novio, en un solo movimiento paso todo su largo cabello a su hombro derecho para dejar al descubierto su piel.

— insisto, ¿tratas de seducirme? — la voz de Adam se volvió más ronca — lo estás logrando

— ¿si? Me gusta hacer ese trabajo — le guiño — vamos Adam yo se que lo necesitas

— ya no se a que te refieres — sonrío con dificultad

— mi cuello te espera — se acercó un poco más a él

La acercó con la mano en su cintura, recorrió desde su clavícula hasta debajo de su oreja con su nariz, su aliento era un poco frío así que la piel de la chica se erizó, Adam siguió con su juego de seducción y su ahora misión de conseguir sangre.

Las manos de la chica recorrieron de nuevo el torso para terminar quitándole la bata, después volvió hasta su cabello para poder entrelazarlo con sus dedos, se separó para besarlo.

— hazlo ya — jadeo ella un poco insistente — Adam, por favor

La beso de nuevo, la mano que tenía en su cintura recorrió su espalda tan lentamente que hizo que ella echara la cabeza hacia atrás, los besos en su cuello de la chica no se hicieron esperar y unos segundos más tarde sintió una especie de pinchazo en la parte lateral de su cuello, un líquido recorrer por este mismo y sabía que Adam por fin había decidido tomar algo de ella para sobrevivir.

Pensó que la sensación iba a hacer como cuando donas sangre y te sientes algo mareada, pero al parecer él literalmente solo tomó una pequeña parte, sintió su lengua recorrer el hilo de sangre que había dejado escapar para después volverla a besar.

— ¿estás bien? — dijo Adam lamiendo sus labio y aún con la chica en sus piernas dejó que la sangre hiciera efecto, la sonrisa volvió a ponerse en su rostro

— si, pensé que iba a ser un poco más extraño — se quiso levantar pero las manos grandes de Adam no la dejaron — solo iré a limpiarme

— no, no te vayas — logro decir — quiero estar contigo

Los ojos verdosos, casi amarillos chocaron con los de ella para hacerla sonrojar y morder su labio inferior, Adam pasó su cabello hacia atrás para tener una vista mejor de esas clavículas que se le marcaba tanto como a él.

— oh no señor vampiro, ahora me toca a mí recorrer ese fuerte cuello — le sonrío coqueta y lo lanzo a la cama — ¿quieres jugar? Vamos a jugar

— tenias que haberte desecho de ese anillo hace mucho tiempo atrás

Ahora las manos frías del pelinegro recorrían los muslos de Alessia, ella bajo para repartir besos por el torso hasta llegar a su cuello y poder besarlo a su antojo.

Después de desprenderse de toda la ropa o la poca que les quedaba encima, los movimientos se volvieron lentos pero continuos, Adam disfrutaba del tacto de la suave piel de la chica mientras ella se aferraba a los fuertes músculos para hacer el trabajo más fácil, ambos llegaron a un nivel de excitación y placer al que ninguno de los dos estaba acostumbrado a sentir.

Alessia pensó que era por el "vinculo" que ahora compartían, Adam sabía de sobra que ella con la que tenía que estar al menos lo que le sobrará de vida.

La chica se levantó de la cama para ir a ver el estado de su cuello, dos pequeños agujeros eran los que se podían notar, bastante escondidos.

— ¿te dolió? — Adam la abrazó por detrás observado su reflejo — me refiero a la mordida

— ¡tonto! — bajo la mirada apenada — no, para nada pensé que me sentiría mal o mareada pero todo bien

— gracias — beso las dos heridas — gracias por hacer esto por mi

— lo que sea por ti

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Holi ¿cómo están? Espero que bien, que estén tomando sus precauciones con todo lo que está pasando en el mundo Justo ahora 🙈

Ojalá les haya gustado el capituló, es algo amm diferente, pensé que me costaría un poco más de trabajo escribir esto pero bueno ahí quedo 😬

Gracias como siempre por leer y cuídense muchísimo.