11

3.1K 379 122
                                    

Pov's Rubius.

Después de hablar por unas horas mas con Vegetta, decidí ya irme a mi casa ya que era demaciado tarde, y digamos que no es tan agradable que unos esqueletos estén persiguiendote con sus arcos.

Llegué a casa y lo primero que hice fue prepararme algo de comer, en el camino de vuelta me acabe todas mis chuletas de cerdo quedándome con nada, y necesitaba comer algo ya antes que muera (tenía medio corazón).

Puse en el horno unas patatas y unas cuantas chuletas, mientras que esperaba, no pude evitar recordar la sonrisa de Vegetta al verme, se le notaba feliz, y si el está feliz, pues yo también lo estoy, por esa razón fui hasta su casa para hacer las pases.

Mis pensamientos fueron interrumpidos al escuchar ruidos en la parte de arriba de mi casa, específicamente en mi habitación, no pude evitar subir e ir a ver qué pasaba. Estando arriba, ví que las luces de la habitación estaban apagadas, haciendo que empezará a caminar en lo oscuro, di media vuelta y ahí lo ví, a alguien que claramente no se le veía en la oscuridad pero sus ojos si, ojos morados y penetrantes que al verlos, no pude evitar dar un pequeño grito, pero al instante fui callado por las manos de esa persona.

- Shhh... No hagas ruido...- Su acento era raro, era una combinación de español con francés o algo así, mis nervios aumentaron cuando sentí su respiración por mi cuello- Mmm... Hueles a miel... ¿Será por qué eres un oso?- lentamente fue quitando su mano de mi boca.

- ¿Y t-tu quien coño eres?- Pregunté mientras me aferraba más a la pared que tenía cerca.

- Je, creí que ya te habían hablado de mi está mañana...- Respondió mientras se separaba un poco de mi, pero no lo suficientemente como para dejar de sentir su cuerpo- Soy... ¡Lobo nocturno!.

- ¿¡T-tu eres lobo nocturno!? ¿El que me dejó los regalos está mañana?- Sentía cómo mis mejillas ardían y mi corazón palpitaba a mil por horas, no podía creer que lo tenía enfrente mío- Wow... Esto es muy inesperado- solté con una rosilla de nerviosismos.

- Para mi también es inesperado...- Nuevamente acercó su rostro al mío, mientras me tomaba de mi cintura- Pero en mi caso... Fue inesperado en a verme enamorado de un chico tan lindo como tú.

Vi como se subía un poco su máscara, dejando ver unos rosados labios, corto la poca distancia que teníamos y me besó, ese chico me besó.

No pude evitar corresponder, sus labios eran suaves y tenían un sabor dulce, nuestras bocas se movían tierna y a la vez ferozmente, una de sus manos quedó en mi cintura, mientras que la otra fue hasta mi cuello para aprofundizar más el beso, sin querer saque un suspiro ante aquel acto por parte de él, mis manos temblorosas llegaron hasta su espalda, no sabía que hacía, solo me estaba dejando llevar.

Nos separamos bruscamente, respirabamos aceleradamente mientras que un poco de saliva salía de nuestras bocas, yo aún permanencia con los ojos cerrados y seguramente con mi mejillas todas rojas, sentí como se acercó hasta mi cuello y me susurro:

- Te amo mi pequeño Doblas.

Se alejo de mi y se fue, dejándome aún pegado en la pared y sin podermelo creer... ¿Qué mierda acabó de hacer?

。*♡。*♡。*♡。*♡。*♡

Gracias por el apoyo y amor al fanfic ^w^

Corazones reparados~•❤️❤️ [Rubegetta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora