Vuelta a la ciudad // CDM // CastielxSucrette

XXX - Una sola opción.

Caí sobre mis propias rodillas gritando su nombre, se había puesto en medio para recibir ella la bala en mi lugar. Las lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos sin ningún tipo de control. Le dí la vuelta para ver dónde había caído el impacto y ví que era en su abdomen. Ella tenía sus ojos clavados en mi mientras que con mucho esfuerzo, levantaba su brazo para retirar las lagrimas que recorrían mis mejillas

- No llores Cassy...- Dijo con un hilo de voz, podía sentir el dolor que tenía.

- ¿Por qué lo has hecho Elena? ¿Por qué? ¿Por que te has interpuesto?- Le dije llorando desconsolado.

- Castiel..  Si esa bala llega a alcanzarte, el solo hecho de que la plata se traspasase a tu sangre... Estarías muerto de manera inevitable, no podía dejar que eso...- Comenzamos a escuchar la risa de Jonathan. 

- ¿Ves? El amor te ha hecho débil y asqueroso. Es una simple humana, tarde o temprano hubiese muerto, y mejor que lo haga pronto, así se te quitaran esas tonterías de la cabeza cuanto antes. 

La ira se podía ver a través de mis pupilas, quería arrancarle con mis propias manos la cabeza a ese desgraciado. Iba a hacerle pagar por esto, por Elena y por toda la gente a la que nos había hecho sufrir de una manera u otra.  

- ¿A mi? ¿Asqueroso?- Dejé delicadamente a Elena en el suelo y me levanté apretando los puños con gran furia.- Mírate, un asqueroso vampiro que no piensa más que en si mismo, que durante mucho tiempo ha tenido a sus "hijos" doblegados y que me ha doblegado a mi. El único ser asqueroso que existe en esta sala, eres tú. 

El resto me estaban mirando, sé que todos podían intuir lo que estaba pensando, y no podía hacer nada más que rezar por que fuera así. Jonathan no paraba de mirarme fijamente, sé que podía intuir que no iba a quedarme quito ante lo que acababa de pasar. Estaba apunto de dar un paso hacía mi cuando Nathaniel, convertido en licantropo, le derrumbó. En ese momento se enzarzaron en una batalla que nos iba a dar la distracción suficiente a los demás como para mover ficha.

Jonathan y Nathaniel estaban envueltos en una batalla de golpes dónde los insultos provenían de ambas partes. En un momento de despiste, Lyssandro, Leigth y yo aprovechamos para acercarnos a él y poner en marcha el plan de las capsulas con la sangre de Rosalya para acabar con ese desgraciado. Todos os acercamos mientras ese desgraciado estaba en el suelo e intentamos zafarle. Incluso con nosotros cuatro encima de su cuerpo intentando inmovilizarlo, nos resultaba imposible. Tenía una fuerza sobrehumana. Finalmente nos lazó a todos por los aires. 

Mientras que estaba tirado en el suelo lo único que podía pensar era como íbamos a lograr salir de esta. Como íbamos a conseguir vencerlo cuando incluso con la fuerza de nosotros cuatro era imposible detenerle. Me dí la vuelta y lo ví acercándose a mi, mientras balanceaba la cabeza en señal de negativa.

- Y pensar que creía que ibas a ser mi mejor discípulo... Creía que eras diferente a esos inútiles que hacía llamar hijos, no creías en el amor, eras un corazón roto que erraba sin rumbo por este plano, pero tuvo que llegar ella, tuvo que llevarte por el mal camino... Castiel tu...- En ese momento se encontraba frente a mi, pero no pudo terminar de completar lo que iba a decirme por que se escuchó un disparo acompañado de un agónico grito por su parte.

Calló de rodillas frente a mi, momento en el que pude ver como Elena, con las pocas fuerzas que su cuerpo conservaba había disparado y ahora, se desplomaba. La bala había dado en la columna del vampiro y la plata estaba haciendo que le ardiese como si le clavasen un hierro ardiendo. Me dirigí corriendo a Elena.

- Elena, ¡Elena!- No paraba de darle pequeños golpes en la cara, podía sentir como las ultimas fuerzas estaban abandonando su cuerpo y no podía permitirlo. Comencé a llorar desconsolado, estaba perdiendo muchísima sangre.- Elena, Elena por favor, no me dejes.

- Castiel... - Mire y todos estaban rodeándome.- Si quieres que sobreviva... Hay una sola opción.- Cuando estas palabras salieron de la boca de Lysandro lo pensé. Estaba la opción de... convertirla.