𝐍𝐎 𝐓𝐈𝐌𝐄 𝐓𝐎 𝐃𝐈𝐄 [𝑪𝒐𝒎𝒑𝒍𝒆𝒕𝒂]

０１

- Búsquenlo, encuéntrenlo y elimínenlo- El ángel Miguel era conocido por muchas cosas, una de ellas era su poca paciencia.

-Entendido- los tres ángeles formularon al mismo tiempo.

El cielo no era un lugar tan pacífico como se hacía ver en el mundo mortal, era más estricto y competitivo, la mayoría de los ángeles eran vanidosos y competitivos entre ellos.

Solo se necesitaba una pequeña chispa para activar las defensas propias, era como un reflejo que ya venía desde su creación.

El trío de ángeles que estaba conformado por Ara, Eridanus y Lyra. Son unos de los primeros ángeles en la creación aparte de los principales.

-Yo me encargaré de buscarlo en las jaurías, ustedes en sitios sociales, puede que se quiera camuflar con un humano- Eridanus expandió sus alas y prendió vuelo a la tierra.

-Nos tocó la parte más aburrida- Ara se dirigió a la base de observación.

-Supongo que prepararé las cosas- Comentó por radio ángel en una frecuencia donde solo ellos tres podían comunicarse.

-Si encuentran algo no duden en avisarlo- Eridanus ordenó.

-Si, aja- A Lyra no le gustaba que le dieran órdenes y menos Eridanus.

Después de unos días ya estaban preparados, sabían la ubicación de su objetivo y tenían un plan preparado.

Su objetivo era un hombre llamado Hydrus, un hombre lobo, él contrabandeaba gracia de ángel en los mercados sobrenaturales y que mejor lugar para vender que un bar sobrenatural, es a donde se dirigen actualmente.

-Coloquence esto sobre la marca angelical- Todas las criaturas sobrenaturales tenían una marca que los distingue, solo se puede ver a ojos de otros monstruos.

-¿De que es?- El ángel observó más detenidamente la marca -¿Vampiros? creo que está ves caímos muy bajo.

-Ni lo menciones- Lyra sólo pensaba en terminar este trabajo.

-Tienen que ponerse esto- Ara saco unos vestuarios de la bolsa negra que traía consigo.

-¿De dónde sacaste esto? ¿de la basura?- Eridanus no se sentía cómodo usando esa clase de ropa, muy diferente a la que usaba habitualmente color crema, esa era oscura y opaca.

-Deja para otro momento tu sentido de moda y póntelo-Lyra replicó mientras se ponía las prendas.

-Tenemos que aparentar ser uno de ellos, vestir, caminar y expresarnos tal y como lo harían- Ara termino de vestirse para posteriormente salir del auto.

-Nos vemos en la entrada- Lyra salió de igual manera dejando al ángel solo.

El mejor lugar para un bar sobrenatural era un pueblo casi deshabitado a mitad de la nada, solo los sobrenatural sabían de la existencia de él.

Fuera de el bar se encontraba un hombre, el cuidador, era el responsable de que ningún mortal entrara, solo pedía el "Tatuaje" que en pocas palabras era la marca.

-Bien, entraremos los tres juntos, los vampiros viajan con su nido, nosotros somos pocos así que se podría decir que somos los responsables del nido- Ara nos murmuró cuando vimos el bar.

-Vamos- Lyra fue la primera en acercarse, detrás de ella se encontraban sus compañeros.

-Oye amigo solo queremos pasar por unos tragos, viajamos por mucho, será rápido lo prometo- Había un sujeto que hablaba con el cuidador junto con sus amigos.

-Sin tatuaje no entra- replicó.

-que clase de tatuaje, Sam muéstrale el tuyo- uno de ellos dejó ver un tatuaje de rosa en su brazo inferior.

-Esa clase de tatuaje no, ahora largo antes de que los ahuyente-

-Vámonos chicos, estás personas no quieren nuestro dinero- el grupo de hombres se dirigieron a su auto pasando por un lado de nosotros.

Tuvo que fingir que se volteaba por ellos, por su "sangre" pasa hacer más creíble su actuación.

-Tatuaje- el cuidador aún estaba observando al auto que se alejaba del bar.

-Claro- dejó al descubierto su muñeca para que la checara.

El cuidador volvió sus ojos verde brillante para poder ver la marca reluciendo de un rojo oscuro.

-Vampiros, pasen- Abrió la puerta dejándolos pasar.

El lugar estaba lleno de seres sobrenaturales, desde harpías hasta ogros.

-Parece que encontramos el basurero- Eridanus informó por la frecuencia de radio ángel.

-Necesitamos separarnos para cubrir terreno- Opinó Ara mientras se dirigía a la zona de las mesas en dónde se encontraban jugando algunos juegos de cartas.

Eridanus se dirigió a la zona de billar y Lyra a la barra, lo único que faltaba.

-Un diablo verde- La Ninfa que atendía le dejo un vaso con el líquido verde.

-Vaya, no había visto antes a una chica bebiendo de esos- señaló un chico pelinegro que se encontraba a unos asientos de ella.

-Y a ti que te interesa- Tomo un poco de Absenta mientras pasaba la mirada por el alrededor.

-Me llamo Corvus- Extendió su vaso en señal saludo.

-¿Te pregunté?- Lyra sólo buscaba a Hydrus, no le interesaba nada más.

-¿Que criatura eres? No eres como la mayoría de los de aquí - Corvus cuestionó -aparte eres nueva en esto-

-Como sabes, no te conozco y no me importa, ahora lárgate - Replicó la chica alejándose un poco del joven.

-Esta bien, empecemos de nuevo, me llamo Corvus soy un leviatán y a quien quiera que busques con tu mirada puede que yo lo conozca, solo dime quién- Parece que ese chico no entendía, pero si es verdad que conoce a todos aquí puede ser de ayuda.

-Soy... Leila, soy vampiro y estoy buscando a Hydrus- Por primera vez le dirigí la mirada permitiendo verlo de mejor manera.

Tenía unos ojos que le hicieron quedar en blanco.

Pero que estaba haciendo, tenía que concentrarse en su misión, aparte, él era un Leviatán, lo peor de la creación, el boceto de todo lo sobrenatural y humano.