Capítulo 48

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POV: Ginebra.

Han pasado nueve meses desde que volví a Dublín, de William lo último que supe es que sigue con Emily.
No les mentiré mi corazón dolió, una vez más me sentí traicionada pero lo dejé estar, me dije a mi misma que ya necesito pasar página y tratar de seguir con mi vida. Aunque ya a estás alturas debo comprender que William jamás cambiará. Seguirá siendo el mismo patán de siempre, aunque así.. No niego que lo sigo amando pero como me prometí a mi misma que lo olvidaría, al parecer ya lo estoy logrando.

¿A quien quieres engañar? Me dice mi conciencia..

─Ma.. mamá. ─Me llama mi pequeña Milena, estamos a principios de junio, decidí traerlos al parque ya que les encanta, hace un poco de viento pero nada que no se solucione. En unos días será su fiesta de cumpleaños ya que en octubre cumplieron años pero debido a lo acontecido decidimos posponer la fiesta de cumpleaños.  Lo festejaremos en grande Kian y Myke se han encariñado tanto con los gemelos que andan presumiendo que tiraran la casa por la ventana. Dijeron que ellos se encargaran de todo, que yo solo me encargue de prestarles a los gemelos cosa que me causo mucha gracia...

Sobre el embarazo de Gianina estoy de los nervios ya que en estos días está por dar a luz, Kian anda que se muere de la emoción y yo igual. Llegará mi primer sobrino a este mundo, esta bendición los ha unido aún más Kian, es muy atento con Gianina le a cumplido cada antojo, a cuidado muy bien de ella.

Hace tres meses atrás han decidido mudarse a Dublín y aquí estamos, me han dejado la casa y ellos viven en un apartamento a dos cuadras de mí, he solicitado un préstamo en el banco y me lo han otorgado. Duré cuatro días buscando una casa que estuviera al alcance de mi presupuesto y por supuesto que sea la casa de mis sueños.

 
Busque algo cómodo para vivir, la casa de mis sueños siempre ha sido lejos de la urbanización, pequeña pero cómoda que tuviera tres recámaras, sala de estar con un enorme ventanal para observar los días lluviosos, una chimenea y por supuesto una enorme cocina con encimera de granito. Y lo que me hace muy feliz es que la he encontrado, a un precio muy accesible y está en perfectas condiciones, ya podremos tener nuestro propio lugar. Myke me ayudó en la negociación ya que este es un experto en el tema.

Myke al fin se decidió a pedirle a Carlotta matrimonio, recuerdo muy bien ese día.

Flashback...

Ginebra que vas a ordenar— Me preguntó Kian.

Aún no lo sé, para los bebés pizza de pepperoni, y para mí una ensalada césar. ─

─No aprendes a mi Ginebra que he pedido casi todo el menú, muero de hambre. ─Expresa Gianina, todos reímos.

Amor tu puedes pedir todo el restaurant si lo deseas, nuestro hijo tiene que estar bien alimentado al igual que tú. ─Le responde Kian depositando un beso en sus labios, son tan tiernos que adoro a esta pareja.

Carlotta ¿Dónde has dejado a mi hermano? Si no se separa de ti las veinticuatro horas del día. ─Le pregunta Kian.

Me citó aquí en este lugar, imaginé que aquí estaría esperando por mi. ─No acaba de terminar la frase cuando entra Myke por la puerta del local, a nosotros nos había hecho venir, no sabíamos el motivo solo dijo que sería una cena familiar, y aquí estamos apoyándolo como la familia que somos.

Myke traía entre sus brazos un enorme y hermosos ramo de rosas rojas y en la otra una botella de champagne, se acercó hasta la mesa donde estábamos y extendió el ramo de rosas a Carlotta, está se sonrojo al instante lo que le siguió fue sorprendente ya que Myke depositó la botella de champagne frente a Carlotta y está traía un gran moño en color dorado. En uno de los lazos traía un anillo de compromiso, Carlotta lo observó y se puso de los mil colores, Myke se arrodillo.

Sentimientos OcultosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora