Cap. 9

250 45 3
                                    

Todo había sido muy confuso, cuando nos dimos cuenta ya habíamos sido cegados y lanzados por la energía devastadora de Aike.

Al menos fue solo por un instante, cuando volví a ser capaz de abrir los ojos estaba algo atontado y mareado, había rodado un par de metros hasta chocar con un escudo de energía que algún alumno había creado protegiendo a sus compañeros, pero el Maestro, Mirai y yo habíamos recibido el golpe de lleno.

–Estáis todos bien? –Preguntó el profesor haciendo que el escudo desapareciera.

Pero el grito de dolor de Aike me hizo volver de un golpe a la realidad.

No se ni como conseguí ponerme en pie para correr de nuevo hasta él viendo que su brazo izquierdo sangraba con abundancia.

–Duele... –Se quejó tratando de no gritar del dolor.

–Lo se, lo se, respira –Pedí intentando mantener la calma quitándome la camiseta con prisas para ponerse la y taponar las heridas por la cantidad de sangre que echaban antes de hacerle levantar el brazo por encima de su cabeza–. Que alguien llame al médico! Por favor!

La profesora Mirai estaba tratando de recuperar la consciencia al lado de la caja con armas mientras el Maestro había perdió por completo la consciencia y estaba tirado en el suelo al lado de la pared.

El profesor que estaba haciendo los exámenes mando a un alumno lo más rápido que pudo y corrió a ayudarme como podía mientras Aike solo era capaz de temblar y llorar del dolor con una espesa aura negra.

Que narices acababa de pasar?
.
.
.
Una ambulancia terminó teniendo que venir llevándose al Maestro al hospital junto con Aike mientras la Mirai y yo solo estábamos aún aturdidos.

–Toma un chocolate –Me dio un enfermero al comprobar que todo estaba bien.

Mi energía también estaba bien, pero era para ayudarme a salir del aturdimiento extraño.

La profesora Mirai solo se tomó un caramelo y enseguida comenzó a caminar por toda la habitación murmurando hipótesis por lo que acababa de ocurrir.

A Claus jamás le había ocurrido algo así... así que yo tampoco tenía claro nada.

Cuando nos vieron lo suficientemente bien nos dieron la noticia de que el Maestro había recuperado la consciencia, le estaban haciendo pruebas, pero en principio solo había sido un mal golpe en la cabeza que necesitó solo un par de puntos.

Aike era otro tema...

Gracia y Abel ya estaban aquí preguntando histéricos que pasaba.

–Por lo que hemos comprobado el arco que disparó rompió las poleas impactando directamente en el brazo izquierdo, no es algo que suela ocurrir, pero las heridas las hemos podido tratar bien y cicatrizar todo lo posible –Explicaba la médica que se había encargado de él intentando mantener la calma–. Ya le hemos hecho algunas pruebas y está bien, no ha perdido energía y solo tienen que terminar de cerrarse naturalmente, quedarán cicatrices, pero hemos sido incapaces de cerrar más las heridas. Enviaré él informe al profesor Kalu como pone en su expediente y en cuanto tenga su visto bueno le daremos el alta.

Y la médica se despidió de Gracia y Abel para irse mientras yo entraba directamente en su habitación.

Miraba fijamente la máquina que vigilaba sus constantes vitales.

Tenía todo el antebrazo izquierdo vendado hasta la palma de la mano.

–Que tal estás? –Pregunté haciéndolo volver a la realidad y mirarme.

Black (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora