Black (Yaoi/BL)

Cap. 37

–Solo es una pierna, de verdad, ya llevas 3 días durmiendo en ese sofá, hacer que Siro, recién recuperado, también tenga que dormir ahí por un día o dos no me hace mucha ilusión –Insistió en su negativa de que nos quedáramos a dormir.

A Siro hoy le dieron el alta, con mi energía al final se había recuperado y el doctor Kalu trataba de recuperar también a Klari.

Edmundo al terminar con Siro se fue tan rápido como llegó.

El problema realmente era que mi energía no era compatible con la de Klari, así que la estaban ayudando a recuperarse de forma tradicional.

A demás a Siro no habían parado de repetirle que su tiempo de cazador en los pocos años que llevaba ya tenían que llegar a su fin.

Los Archer habían destrozado su cuerpo en misiones suicida, y por muy pequeñas que fueran las lesiones constantemente tenía esas pequeñas lesiones que al final no resultaban tan pequeñas para su cuerpo.

El doctor Kalu tenía razón, el historial médico de Siro era extremadamente amplio para la edad que tenía.

–Hay uno de Seguridad vigilando la puerta, no te preocupes que nadie va a venir a matarme –Bromeó Klari como despedida.

Nos despedimos de ella y del de seguridad y nos fuimos a casa agarrados de la mano.

De camino le mandé un mensaje a Andre y a Chad, ayer ambos habían sacado hueco para ir al hospital y estaban un poco preocupados.

–Cariño, que tal estás? –Dudé preocupado por como le estaba afectando esto.

Siro se mantenía tranquilo en todo momento, su aura blanca y pura lo demostraba, él era muy tranquilo.

Pero que de repente le dijeran que debía dejar de ser guardia...

–Bien, gracias a ti perfectamente –Respondió con sinceridad dejando ver su aura tintes amarillos y rosados besando mi mano–. No te preocupes por lo de que no puedo seguir ejerciendo, ya lo sabía.

–Como que lo sabías? –Pregunté algo desconcertado.

–Los que manejamos nuestra energía cuerpo a cuerpo y con la necesidad del contacto para que afecten al rival solemos tener una profesión corta, muy muy corta –Respondió viéndose de verdad en su alma que esto no le pesaba ni dolía–. Normalmente la gente llega a los 27, pero bueno, viendo mi historial es normal que yo tenga que dejarlo ya. Es algo que nos dicen desde muy pequeños, para que afecte lo menos posible cuando llegue el momento.

–Y que vas a hacer? –Dudé un poco más tranquilo al ver su paz.

–La verdad es que no tengo ni idea –Suspiró con algo de pesadez–. Esperaba tener un par de años más para averiguarlo, y sino siempre podía trabajar de cualquier cosa que me dijeran los Archer... nunca esperé que pasara todo esto.

Si... por mi culpa pasó todo esto en menos de un año.

–Aún así voy a seguir protegiéndote –Susurró parando un segundo de caminar pasando su mano libre por mi mejilla poniéndose frente a mi–, eres mi vida, da igual mi estado, lucharé por ti, para que no tengas que volver a hacer nada que te haga sufrir... siento que hayas tenido que hacer todo esto.

–Cariño, ya no eres mi guardaespaldas –Respondí llevando mi mano a su mejilla–. Está bien... aunque duela yo también quiero protegerte.

Yo fui el que cortó la escasa distancia entre nosotros para besarlo.

Al final supongo que había entendido que las cosas eran así.

Matar o morir... y definitivamente prefería matar a ver morir a Siro.