Cap. 12

220 43 0
                                    

Cuando escuché lo de los abuelos de el sirviente entré en pánico.

Llegué incluso a dudar de Siro... era mi guardaespaldas por que Gracia y Abel se lo habían dicho y por encima de mi siempre estarían ellos... tal vez Siro en realidad sabía todo esto.

Sabía todo y solo me manipulaba para mantenerme cerca, feliz y controlado.

O eso creí hasta que escuché y vi el recuerdo de Siro hablando con Gracia en Francia.

Había impedido que me obligaran a relacionarme con esa panda de odiosos niños repelentes... se negó a una orden directa de Gracia... por mi.

–Estas mejor? –Dudó dándome un beso en la frente.

Si... extremadamente mejor.

–A que abuelos crees que se referirá? –Dudé después de asentir con la cabeza separándome de él.

Ambos miramos a la puerta aún abierta después de que mis recuerdos se fueran, seguía tapiada por el cristal que creaba, pero ahora era opaco y negro.

–A tus abuelos paternos, tus abuelos maternos murieron ambos antes de que nacieras –Respondió caminando hacia la puerta.

Palpó la superficie intentando ver si cedía, pero no tenían pinta de hacerlo.

–El abuelo Archer –Murmuré más desconfiado todavía.

El padre de Abel...

El hombre que me recibió con los brazos abiertos casi llorando por que su mujer no pudo vivir para presenciar que me encontraran.

Quería irme a mi casa... la sentía mil veces segura que este sitio ahora mismo.

Y como si quisiera conceder mi propio deseo la barrera desapareció.

–Alto! –Saltaron un montón de voces de golpe asustándome.

Siro comenzó a retroceder con las manos en alto sorprendido por varias personas apuntándonos con pistolas.

–Siro? –Dudó Abel consiguiendo que todos dejaran de avanzar.

–Lo conoce? –Preguntó uno de los hombres dejando de apuntar con su arma.

Yo aproveché el momento para agarrar a Siro abrazándolo poniéndome yo delante.

–No Aike, detrás –Pidió Siro intentando tirar de mi antes de que Gracia gritara.

–Bajar las armas! Ese es mi hijo! –Saltó disgustada consiguiendo que todos obedecieran.

Gracia rápidamente apartó a todo el mundo tirándose a por mi, pero una burbuja apareció haciendo que chocara de golpe contra ella.

Hasta que no retrocedió sorprendida la burbuja no desapareció de nuevo.

–Que hacíais aquí dentro? –Preguntó uno de los hombres con seriedad.

–Estábamos investigando algo –Respondió Siro abrazándome tratando de darme algo de seguridad.

–El que? Sabéis que hora es!? A demás en esta habitación no pintais nada! –Saltó Abel notablemente nervioso.

Siro me miró con su aura azul dudosa, violeta por la preocupación de lo que estaba pasando y algo verde por la inseguridad.

Pero yo tampoco sabía que hacer.

–Siro! Ordeno bajo tu juramento que me digas que hacéis aquí! –Exigió Gracia con un aura roja por el cabreo, pero también azul por las dudas y con manchas negras por el miedo.

Black (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora