Black (Yaoi/BL)

Cap. 42

Ya de por si llevaba días dándole vueltas a muchas cosas... pero ahora que estaba sin poder hacer nada medicado hasta arriba todo me carcomía más la cabeza.

Se suponía que era un Archer..? O se suponía que no? Gracia engañó a Abel?

Gracia siquiera quería a Abel?

Pensar hacía que me doliera más la cabeza, pero no podía evitarlo.

–Ve –Insistí envuelto en una manta sentado en el sofá.

Mi fiebre al menos estaba controlada y ya no tiritaba de frío.

–Pero tu estás enfermo –Insistió Siro buscando su teléfono para llamar a sus amigos y avisar de que no iría esta tarde.

Lo que no sabía es que lo tenía yo.

–Estoy en casa, que me va a pasar? Aunque no pueda conocer a tus amigos tu tienes todo el derecho de ir y pasarlo bien.

–Pero...

–Con lo que os cuesta quedar no quiero que faltes –Corté su queja viendo en su expresión que empezaba a ceder–. Tu también te mereces pasar un día divertido con tus amigos.

Discutimos un rato algo largo, pero al final conseguí que cediera devolviéndole el teléfono.

•A que hora quieres que vaya a por ti?

El mensaje de Chad me confirmó que había conseguido la tarde libre.

No quería meter a Siro en esto... así que estaba bien así.

Vi a Siro vestirse y prepararse para quedar hoy con sus amigos mientras yo vagueaba por el piso.

–Vas muy guapo –Halagué dejando que me diera un beso en la frente.

Quería recuperarme y darle uno en los labios.

–Trataré de volver lo más pronto posible, no te olvides de la medicación de las 6 y no te desabrigues –Respondió preocupado por dejarme con Klari.

–Lo cuidaré lo mejor que se –Trató de calmarlo Klari.

Pero su aura violeta no se apaciguó ni lo más mínimo.

Aún así se fue recordando que cualquier cosa podía llamarle.

Incluso a los minutos de irse me llegó un mensaje suyo de que ya estaba en el coche con uno de sus amigos.

No pude evitar ponerme algo colorado y contento al ver su mensaje.

Era tan tierno.

–Voy a tumbarme un rato –Comenté a Klari para escabullirme del salón.

Aceptó así tiendo con la cabeza y me fui para comenzar a vestirme.

Chad estaba al llegar.

Espero que Siro no se enfadara mucho por lo que iba a hacer.

Una vez me vestí con lo más calentito que tenía en el armario cree una burbuja en el salón encerrando a Klari y reproduciendo dentro el piso para que no se diera cuenta de que me iba.

Trataría de volver rápido.

–Y Siro? –Dudó Chad al verme subir solo a su furgoneta.

–Con sus amigos –Respondí necesitando cubrirme un poco más con la cazadora por un escalofrío.

Solo necesité un poco de concentración para hacer desaparecer la burbuja que retenía a Klari y Chad arrancó para irnos.

–Te conozco, en que estás pensando? –Preguntó sin rodeos ya a la salida de la ciudad.