Capitulo 9.

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Eros en la foto.

Willow.

Después de organizar la mesa, Eros me obligó a sentarme para así servir la comida.

Cocinó carne al horno, rellena con una pasta deliciosa, estaba increíble. Fuimos hablando de temas variados, de el, de mi, pero poco importante. Hasta que...

Eros- ¿Quieres contarme porque dejaste la milicia?

Yo- Es un tema complicado- Dije mirando mi plato.

Eros- Esta bien, puedo entender si no quieres contarme.

Yo- Voy a contarte- El sonrió.

Eros- Soy todo oídos.

Yo- Entre a la milicia a los diez años, era una de las mejores, fui ascendiendo con el paso de los años, a los quince años tuve que asistir en un rescate de veinte niños africanos que los usaban para trasladar droga de un país a otro.- Eros quedo atónito.

Eros- ¿Cómo trasladaban la droga?

Yo- Se las hacían tragar a la fuerza; pequeños envoltorios con cinco gramos de cocaína cada uno, el que se oponía a tragar las bolsas, seria cortado en pedazos hasta que acepte a hacerlo; comenzaban a cortar los dedos de sus manos, luego cortaban los de sus pies, luego las orejas, y así hasta dejar cubitos de carne y hueso.

Eros- Diablos- Yo le sonreí.

Yo- Durante la misión, yo era la encargada de salvar a los niños del bunker donde estaban encerrados. Ellos los mandaban en avión, y de ese avión los encerraban en un bunker para abrirles el estomago y sacarles la droga. El bunker estaba totalmente fuera de servicio, no había luz, ni señal, por lo que nosotros no sabíamos que era lo que nos íbamos a encontrar allí. Al abrir el bunker, nos encontramos con mas de setenta hombres armados, todos disparaban hacia nosotros sin pudor, pedimos refuerzos y los matamos a todos encontrándonos con los pequeños en un costado.- Hice una pausa para tomar aire- Claramente, la primera que entró fui yo, primer gran error, al estar al mando, tenía obligación de entrar sola para así asegurarme de que mis compañeros no se pongan en peligro al entrar.

*Apenas hice un paso dentro, la puerta se sello dejándome encerrada, intente buscar un botón o algo para abrirla pero fue imposible. Escuché un ruido a mis espaldas y antes de girarme note un hilo de sangre por mi cuello, me habían golpeado en la cabeza dejándome inconsciente.

*Al despertarme note una cicatriz en mi estomago, que al día de hoy sigo teniendo, me habían llenado el estómago con bolsas de cocaína, tenía el tiempo contado, si yo no llegaba a África con la cocaína me matarían, y si tardaba mucho en llegar, moriría por las bolsas- Solté un suspiro- Antes de subir al avión me drogaron muchísimo con una droga poco común; al llegar a África, mi padre y los integrantes de la milicia me rescataron, pero tardaron mas de tres horas en sacarme las bolsas, eso hizo que se me inflamen los órganos y varias bolsas se exploten llevando la droga a mi cerebro.
Estuve a punto de morir, pero gracias al hospital militar estoy viva.

Eros- Entonces decidiste irte- Preguntó confuso.

Yo- No, jamás me hubiese ido, pero fueron ordenes estrictas del ministro James y su esposa.

Eros- Wow- Dijo sin poder creerlo- Es impresionante. Cuando mostraste los golpes en la playa no vi tu cicatriz.

Yo- No, los moretones la tapan- Dije riendo- ¿Quieres verla?

Eros- ¿No te molestaría?

Yo- Claro que no, pero hoy tengo vestido- Dije riendo.

Eros- Si, lo siento, quizá otro día- Dijo nervioso.

Yo- Gracias por invitarme, estaba todo muy rico, y tu casa es preciosa- Sonreí.

Eros- Tu estas preciosa.

El calor se subió a mi rostro, agaché la cabeza para que el no lo note pero creo que fue tarde ya que alzo mi vista y pude notar que sonreía.

Yo- Te ayudo a juntar la mesa- Cambié de tema.

Eros- No, lo haré mañana. ¿Vemos una película?

Yo- Esta bien- Sonreí.

Nos sentamos en los sillones de la sala, y comenzamos a buscar una película en Netflix.

Yo- ¿De que te gustan?

Eros- De acción mas que nada, ¿Y a ti?

Yo- De amor- Dije riendo- Lo se, y si, soy una chica muy cursi- Reí mas fuerte.

Eros- Me gustan las chicas cursis- Sonrió de lado.

Nos miramos por unos segundos que parecieron horas, es perfectamente atractivo, los ojos celestes y las pecas que adornan su nariz me encantan.

Note como la distancia se iba haciendo mas corta, como sus ojos penetraban los míos y su mano se deslizaba por mi muslo.

Eros- Me gustas Will.- Yo sonreí.

Eros corto el poco espacio que quedaba pegando sus labios a los míos, inmediatamente le seguí el ritmo, era un beso tranquilo que poco a poco fue tornándose mas feroz, sus manos se encajaron en mi nuca y cabello y mis manos fueron a su pecho.

Se sentía muy bien, y puedo confirmar que es el mejor beso que di en mi vida.

Poco a poco Eros se fue alejando, pegando nuestras frentes y juntando sus manos en mi cadera.

Eros- Eres hermosa Willow James- Sonrió.

Yo no sabía que decir, es tan perfecto que me quita el aire.

Eros- ¿Buscamos una película?- Río.

Yo- Esta bien- Sonreí.

Eros paso sus brazos al rededor de mi cuerpo y me acomodó sobre su pecho para que este mas cómoda, puso una película que su amigo Stefan le había recomendado y nos quedamos así el resto de la noche, viendo películas y besándonos.

Holaa, espero que les este gustando la novela, si es así no duden en dejar sus estrellitas y comentarios!!

Dentro de pocos capítulos pasaran cosas geniales, pero no voy a adelantar nada.

Gracias por leer!!


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