Medical Student.

Capitulo 33.

Willow.

Eros- Will...- Levanté mi mano para que se calle.

Solté un suspiro con las manos en la cadera y me acerqué abrazándolo.

El se sobresalto pero rápidamente me abrazo, estuvimos así unos minutos hasta que me aleje, sentía las lagrimas acumuladas en los ojos intentando no pestañear para que no caigan.

Cuando Eros me miró acaricio mi rostro mordiendo su labio inferior.

Yo- Lo lamento- Una lagrima calló por mi mejilla.

Eros la quitó y beso mis labios.

Eros- No tienes que pedirme disculpas amor, yo te las tengo que pedir a ti- Negué.

Yo- Lo lamento tanto, odio que me veas en ese estado, es que se me nubla todo cuando alguien lastima a quien amo.

Eros- Lo comprendo amor- Besé sus labios y lo miré.

Yo- Tengo algo que contarte.

Eros- Sentémonos, ¿Qué ocurre?

Yo- Tengo dos cosas en realidad que decirte, o tres- Sonreí levemente.- Lo primero es que lo que resta de hoy y mañana no vas a alejarte de mi en todo momento, Agustín y sus amigos fueron trasladados lejos y estoy mas que segura de que van a intentar algo contra mi- Eros asintió cabizbajo- Y lo segundo es que mi padre tiene una propuesta para ti mientras yo esté en Vietnam- Me miró sorprendido y asustado- Tranquilo, no vas a venir a Vietnam conmigo- Reí- Mi padre quiere que hagas entrenamiento militar mientras yo no estoy, es peligroso que te vayas ahora que los idiotas de Agustín y sus amigos están en otro lado, pueden escaparse y lastimarte- El me miró mordiendo su labio inferior- Los circuitos y entrenamientos son como los que me viste hacer en el primer entrenamiento, es un poco peligroso, pero yo creo que te vendría bien- Le sonreí- Es decisión tuya cariño, tienes menos de dos días para pensarlo- Reí.

Eros- Me gustaría intentarlo Will, sería también una distracción para no morirme de depresión por no poder tenerte- Río- Me encantaría cariño- Yo asentí.

Yo- Está bien, podemos ir ahora mismo a decirle si quieres- Asintió- ¿Luego salimos a cenar?

Eros- Me encantaría- Sonrió.

Salimos de la habitación y nos dirigimos al despacho de mi padre, luego de que la secretaria nos reporte entramos y Eros le contó que le gustaría hacer el entrenamiento.

Mi padre acepto gustoso.

Yo- Eros, lo único que me queda por decirte es que yo no quiero regresar a la milicia, fue algo que hable con mi padre y para mi es una decisión tomada.

Eros- Lo comprendo y no voy a adentrarme en la milicia, cuando vuelvas de Vietnam nos volvemos a ir a nuestra ciudad- Le sonreí.

Yo- Ministro, ¿Me concede un permiso de salida?- Hablé sonriendo.

Mark- Deja de decir tonterías y sal de aquí- Dijo riendo.

Los tres nos reímos y luego de despedirnos nos fuimos a la habitación, nos duchamos y salimos en mi bebé hacia el centro de la ciudad.

Luego de llegar a un restaurante precioso, nos sentamos y comenzamos a hablar mientras esperábamos la comida.

Yo- Eros, en verdad quiero que no te hagas ilusiones con la milicia- Dije cabizbaja.

Eros- Amor, lo único que quiero es que regreses de Vietnam y nos vayamos de aquí a vivir a Italia, ¿Está bien?- Asentí sonriendo.

Yo- Te amo cariño- Le sonreí.