Cortos Gerita.

Preparativos

Dicho y Hecho Flavio Vargas armo el mayor drama de las reinas del drama porque lo estaban descartando en diseñar el traje de los novios, berreando en el hecho de que él un exitoso diseñador de moda no podría hacer lucir sus brillantes trajes en la boda de su hermano.

– ¡Esto no es justo! –Critico señalándolos a todos en el lugar – No pueden dejarme así por fuera.

–Por favor Flavio cálmate –pidió Antonio paz en el lugar –

– ¡No me calmo! Tony –Se cruzó de brazos – Eso es cruel para mí, se trata de la boda de mi hermano, va a ser una boda triple un gran evento y los tres con alfas, no con los mejores alfas –Mascullo – ¡pero es algo en lo que tengo que participar!

–Está bien Flavio-san puede participar –Emitió Kiku –

– ¿eh? –Protestaron los trillizos al mismo tiempo – ¿Estás seguro?

– ¡No hagan eso bastardos patateros que asustan! –Se quejó Flavio – ¡Además! ¡¿Por qué no debería estar seguro?!

–Tal vez por el hecho de que a ti te encanta tirar nuestra ropa –Protesto Lutz –

–No es mi problema que tengan mal gusto –Refuto quitándose el polvo inexistente de sus uñas –

–Solo será bajo una condición Flavio-san, no puedes hacer diseños burlescos para ellos.

–Flavio tomó aire intentado calmarse –Primero que nada, soy un profesional yo jamás haría que mi hermano quedara en ridículo, segundo llevo intentado hacer desde hace no sé cuánto que este trío de idiotas se vista bien, aunque Feli y Feliciano han contribuido mucho ya dos de ellos son menos horrendos, el tercero –Miro hacia Lutz –Deja mucho que desear.

–Yo me visto como yo quiera.

– ¡No! Ni hablar en la boda no vas a vestir con tus fachosas de delincuente, primero muerto antes que permitirlo.

–Bueno si insistes –Sonrió Lutz para recibir un codazo de Ludwig – ¡¿Qué?! Él lo pidió, ¿Por qué le quitas todo lo divertido a la vida, Luddy?

–Porque eso no es legal y no quiero una boda en prisión –Protesto – Como sea, está bien Flavio, estoy seguro que sabrás diseñar el traje correcto para nosotros.

– ¡Pero solo los trajes! No puedes hacerte cargo de la boda. –Señalo Louis para que Flavio suspirara –

–Bien, bien será una boda medio fachosa con mi excelente gusto en trajes que le darán el completo encanto por supuesto, pero me imagino que Lilliana estará también ayudando ¿no? En fin tengo otras cosas que hacer, voy a informarle de los hechos a mi querido André, Adiós –Se despidió dejando un beso en el aire –

–Bueno un dolor de cabeza menos –objeto Louis –

–No tío, así no es.

– ¡Que no soy tu tío!

–El dolor de cabeza apenas comienza –Comentó el español –primero hará que se prueben distintos trajes si eso no le gustan hará que se pruebe miles de más, luego probara tela sobre ustedes a ver que tono va mejor y...

– ¡Lutz! ¡A dónde crees que vas! –Exclamo Ludwig observando como su hermano se escapaba por la tangente –

– ¡A México! Me han dicho que sus playas son buenas en esta época, nos vemos. –Pero fue arrastrado por su hermano – ¡No me jodas Ludwig! ¡Yo no me voy a andar dejando hacer toda esa mierda!

–Solo duérmete en medio de todo, eres bueno para dormir en cualquier sitio y en cualquier posición –Respondió Louis y afirmo Ludwig –

– ¡Pero no soy bueno durmiendo en un sitio donde este Flavio! –Se quejó –Ya lo he intentado y siempre termino con una patada en donde no deberían patearme ¡Y si te soy sincero quiero tener hijos! No hoy, pero algún día ya tengo 27 después de todo nos estamos como que atrasando.

– ¡No me marees con tu verborrea! –Protesto Ludwig –Ahora vamos, nos están esperando para probar el sabor del pastel.

–Yo solo quería probar las cervezas...

–Ya sabes que no va a haber cerveza en la boda –Respondió Louis despidiéndose de Kiku y Antonio para seguir a sus hermanos –

– ¡Y por qué rayos tengo que ir!

– ¡Por que también es tu boda!

– ¡Maldita sea! –Se cruzó de brazos dejándose arrastrar por Ludwig –Sabes me estás dañando los zapatos.

– ¡Entonces camina!

–No tengo ganas, mejor cárgame.

– ¡No te voy a andar cargando!

– ¡pero soy tu hermano menor! ¡Eres un terrible hermano mayor!

–Tú sabes muy bien que pesas demasiado

– ¡¿Ahora me estás diciendo gordo?!

– ¡Pues te andas tomando unas cuantas cervezas de más!

– ¡GASP! –Lutz coloco cara de ofendido mientras se ponía la mano en el pecho, Louis comenzó a caminar lentamente se subió el cierre de su suerte y se colocó la capucha fingiendo que no los conocía – ¡Cómo puedes decir eso de mí Ludwig Beilschmidt! ¡A Feliciano si lo cargas!

– ¡Feliciano pesa 70 Kg! ¡Tú pesas 86 Kg! ¡Estás por encima de tu peso! ¡Y además no eres un niño!

– ¿Te da vergüenza cargar a tu hermano gordo? No es así Ludwig, maldito prejuicioso.

Louis se encontraba hasta atrás intentado no reírse de la escena que estaban armando cinco minutos después se encontraba Ludwig cargando a Lutz porque él no quería caminar, Louis intentaba tomar aire mientras esperaban para tomar el taxi pero llevaba tanto tiempo riéndose que le dolía el estómago.