Súpe que ibas a ser para mi 🏳️🌈🌈

Soy tan feliz

Volvemos a españa, y ya es hora de volver a la vida normal, trabajar muy duro para el proyecto que se está realizando y para que mi esposa pueda ser la empresaria más importante a nivel internacional. Yo me enfoco demasiado en mi trabajo. Mientras mi amor está de reuniones en reuniones. Casi no tenemos tiempo de vernos, siempre llegamos muy tarde a nuestra casa y ambas llegamos cansadas, solo siento a mi morenita cuando dormimos.
Ambas sabemos que esto es muy importante para todos.

Pasan los días y todos estamos enfocados en el proyecto, solo tengo tiempo de hacerle miradas a mi morenita y uno que otro besito. De tomarme un buen café, por Dios este proyecto saldrá muy bien, por que mi esposa es la mejor del mundo en todo.

Llego el dia de entregar el proyecto, mi mujer está demasiado nerviosa, estamos organizandonos, mientras nos vestimos hablamos, ella me dice...
Pequeña gracias por todo... Si nada sale bien...
shh calla mujer, todo saldrá perfecto. Le doy un beso y le digo, tu tranquila mi amor, eres experta en lo que haces.
Te amo pequeña y yo te amo a ti mi niña.
Llegamos al lugar donde va hacer la reunión yo no puedo entrar, pero entonces le paso los papeles con todo ordenado.
Deséame suerte pequeña...
Mucha suerte mi amor, tu tranquila dejarás a todos callados. Te esperaré aquí hasta que salgas. Mi morenita se despide de un buen beso y va caminando hacia el ascensor.  

Ya han pasado 2 horas y estoy muy ansiosa, voy a la cafetería y me tomo un buen refresco, veo que ya están saliendo algunas personas, así que decido pagar..., voy de camino donde le dije a mi esposa que la iba a esperar.
Le compre un refresco y robe una rosita que vi en el jardín de la cafetería para dárselo de regalo.
Veo a mi esposa llegar con una mujer alta pelo castaño y de ojos azules.
-Mi amoor. ¿Como te fue?
-Ella me abraza y me dice, gracias...
No sé a qué se refiere, la separó de mí para que me mire a los ojos. Y la digo
- ¿Dime como te fue? Ella sonríe y mira a la chica, y me dice.
-Mi amor me ascendieron de puesto, ahora soy una de las empresarias más importante del mundo. Se lanza contra mí, yo le doy vueltas mientras la abrazo.
FELICIDADES MI AMOR.
La chica nos dicen, que bonita pareja hacen.
Ambas sonreímos y le damos las gracias. Miró de nuevo a mi esposa. Y le digo.
Mi amor... ¿viste que todo iba a salir bien?
Si mi pequeña. Gracias a tí. Te amo.
Vamos a casa. Dice mi morenita , quiero quitarme ya estos tacone. Claro mi amor...
Mi esposa se despide de la chica, y yo hago lo mismo...

Parqueo el carro para comprarle unas rosas y una champaña a mi morena para celebrar que todo salió bien. Vuelvo al auto, y le digo toma mi cielo. Mi morena me da un beso y me dice, gracias mi amor pero con la rosita que me diste y el refresco era suficiente,
Mientras coloco la botella de champaña en los sillones de atrás del auto le contesto, tú te mereces esto y mucho más y le doy un beso.
Al salir del parqueadero veo como mi morena se quita la blusa y queda en brasier.

— ¿Que haces mi amor? Le pregunto.
— Tengo mucho calor, yo sonrío y prendo el aire del carro.
Miro los labios de mi morena y observo como se los muerde, tambien miro sus hermoso senos y me estoy excitando al ver cómo se mueven mientras ella respira.
Veo un parqueadero y entró allí, mi esposa pregunta
—¿Qué haces pequeña? Yo no respondo y me quitó el cinturón de seguridad...
me acerco a mi esposa y la beso. Ella se quitó su cinturón. (Sabe lo que quiero)
Se postra encima de mí y me quitó mi camisa, yo mientra lo hace, tiró el sillón hacia atrás, mi morena hace un pequeño sonido. Y yo toco sus nalgas, nuestra respiración se agita. Le quito el brasier a mi esposa, y me dice, colocate nuestro juegue de gel.
Lo sacó de mi bolso, y me quito mis boxer de mujer.
Quedamos totalmente desnudas.
Mi morena se vuelve a colocar encima de mí, y coloca nuestro juguete en su vagina, comienza a moverse y yo hago lo mismo, mientras la tomo de la cintura. Haciendo con fuerza que se mueva más duro.
Muerdo sus pezones de placer. La penetro una y otra vez.
Le digo. Vamos. Vamos a casa y te lo hago mejor, mi morena me contesta de acuerdo.
Nos colocamos nuestras prendas. Y aceleró la velocidad de nuestro auto, ya queremos llegar.
Llegamos y con desesperación apretamos una y otra vez el botón del ascensor.
Se abre la puerta del ascensor. Y no aguanto más. Así que decido empezar de nuevo en el ascensor mientras subía a nuestra casa. Cargo a mi morena. Y al fín se abre el ascensor, caminando hacia la sala de nuestro apartamento la tumbo sobre los muebles de la sala. La pongo en cuatro y decido meterle los dedos una y otra vez. Le jalo su cabello, (tenemos varios juguetes) así que decido ponerle unas esposas, y la amarró contra una lámpara que está cerca a nosotras:
— Ábrete un poco más mi amor, mi morena me mira muy deseosa y hace lo que le pido.
Beso todo su cuerpo hasta llegar a su interior. La besó una y otra vez y con mis dedos juego con su clítoris.
Mi mujer levanta su pelvis se muerde sus labios. Yo vuelvo a su boca, y me coloco de nuevo nuestro consolador. (Este está más grande) juego un poco con su clítoris, mi morena levanta su cabeza para besarme. Yo me agacho un poco y la beso. Me muerde demasiado duro. Hace que yo me queje. Y le digo:
— Por eso que acabas de hacer, te daré un castigo. Mi morena sonríe y me dice. Hazme lo que quieras.
Así que levanto sus piernas y las coloco en mis hombros y la penetró con fuerza. Mi morena se queja, y murmura
¡Hmmm, hannah despacio!
Y no le pongo cuidado, la penetro una y mil veces muy duro. Mi mujer jadea una y otra vez, sus gemidos se vuelven más duros.
Le quito las esposas y, la siento en mis pierna, ella se mueve una y otra vez, volvemos a cambiar de posición y ahora ella me está dando la espalda y yo le beso su cuello mientras la penetro una y otra vez, caemos muertas en el sofá desnudas, le acaricio todo su cuerpo hasta quedar dormidas.
Me levanto y voy al baño y me doy un buen duchazo... A salir del baño mi morenita aún está dormida en el sofá desnuda.
Sacó una cobija del armario y la abrigó .
Pido algo de comer para cuando ella se levante y ya tengamos comida.
Bajo al parqueadero para sacar nuestras cosas personales del auto y la champaña.
Vuelvo a subir a nuestra casa, y ya mi morenita se esta bañando.
Acomodo todo y le preguntó:
—Mi amor... ¿Todo bien? Me grita desde el baño
—Si mi cielo, todo perfecto.

Llega el domicilio, pagó la cuenta, llamó a mi mujer para cenar.
Nos sentamos en el mirador y desde aquí vemos todo españa. Abrazadas llenas de amor.
Y con mi esposa mientras le acaricio el cabello le digo en su oído (supe que ibas a ser para mi)
Ella se gira y me mira a los ojos y me dice.
Hasta que la muerte nos separe seré para ti.

Autor: Natzumy Kuratomi Londoño.