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  Una extraña aura inundó todo el ambiente exterior en el que estaban sometidos el par de individuos que ahora se veía fijamente. El único sonido audible, era el canto de los pájaros y resonar de las hojas contra el viento; aquello significaba que el otoño se acercaba.

  Taehyung intentó el retroceder, mas las manos del alfa lo sujetaban con firmeza; no había dolor, pero sí fuerza y seguiridad; algo que Jeon no mostraba muy amenudo. Tragó en seco del nudo que se había formado en su garganta y con miedo volvió a posar sus ojos sobre Jungkook; había algo diferente en él, pero el omega no sabía con precisión qué era.

  ¿De verdad Jungkook acaba de decir eso? ¿Dónde había quedado el tonto enamorado?

  Las pálidas y pecosas mejillas del alfa tomaron un pigmento similar a los tomates y manzanas; sin embargo, sus oscuras y grandes órbitas no dejaron de enfocar al joven con grato enojo; estaba molesto, Jungkook lo estaba, Taehyung llevaba sobre su piel el aroma de otras personas; la escencia de otros alfas. Eso sin darse cuenta, había causado que el despertar del alfa interno se produjera; no aquél que brincaba para besar el rostro y cuello del omega, sino ese que era imponente y territorial del cual por naturaleza todo alfa disponía.

  Naturaleza del cuerpo; brutal.

  Jungkook, sin darse cuenta en qué momento; sus grandes manos tomaron con firmeza las delgadas y morenas del omega, aprisionando su presencia ante el momento; quería saber el por qué, más bien, exigía saber el por qué de lo sucedido. Razón por lo que atrajo más al delgado y frágil peli-gris hacia su cuerpo; su actitud era una caja de sorpresas.

  — Hueles a alfa, Taehyung — Pronunció con voz firme, causando un fuerte temblar por parte del omega — Hueles a alfa...

  El corazón de Taehyung bombeó con fuerza y terror; se sentía inferior y diminuto, la faceta que el azabache estaba mostrando, no era más que el mismo alfa interno enseñanando su dominio y territorealismo atraves del pálido con cara de tonto; igual que su hermano mayor cuando lo sacaba de sus cabales con sus ocurrencias estúpidas de omega.

  — ¿M-me estás engañando? — Preguntó de nuevo Jeon, ésta vez mordiendo de su rojo y pequeño labio inferior como señal de nerviosismo.

   Estos alfas y su bipolaridad.

  Sin embargo, aquella última pregunta fue suficiente para que el interior rebelde y socarrón del omega, levantará se su cabeza como si se tratara de un perro al cual le habían lanzado un hueso; eso fue suficiente para recordar su estado y situación actual.

  ¡Oh no, perro! No me harás ver como el maldito parásito infiel aquí.

  Ninguno de los dos se espero; cuando el cuerpo de Taehyung bajó la cabeza para comenzar a convulcionar entre burlonas risas y audibles carcajadas, obviamente fingidas y socarronas; lo cual provocó una mirada de confusión por parte del azabache.

  — JA JA JA — Se rió en su cara, alejando sus delgadas morenas de un tirón y mostrando una expresión cínica — ¡Que divertido eres! — Continuó comenzando aplaudir mientras sus pies daban pasos que retrocedían entre temblores — ¿Tú, mi alfa, Jungkook? ¿De verdad lo crees? — Sin poder evitarlo y pese al dolor que comenzó a insertarse en el fondo de su garganta, el omega prosiguió — ¿Abandonandome? ¿Dejándome a mi suerte cuando sabías que estaba aterrado por tu familia? — El dolor comenzó a expandirse hasta llegar a su pecho y oídos, por alguna razón sentía que su cabeza se volvía más caliente y roja, quizás por la furia bipolar que comenzaba a carcomirlo — Desde que llegamos aquí, no has hecho más que abandonarme e ignorarme para marcharte con esa ¡Niña¡ — Sus dientes mordieron de su lengua al terminar aquello, sabía que estaba siendo egoísta y que pronto abandonaría a Jungkook; no tenía ningún derecho, pero no podía evitarlo; no quería hacerlo, el hecho de imaginar que Jungkook le estaba acusando de infiel, cuando él mismo poseía esas asquerosas y feas manchas ¡No, no querido, estás metiéndote con el omega equivocado! — ¡Y sí, no quiero volver a verte! — Prosiguió tragando de su miedoenojoodioperraomega que se encontraba dentro de su bipolar y retorcida mente — ¡No me vengas con pendejadas! Yi siy ti alfa piri di illa también — Gritó finalizando de aquella pelea, para luego, inclinar de su cuerpo al suelo, tomar una piedra y lanzarsela al alfa en la cabeza.

  — ¡AUCH! — Gritó Jeon cayendo al suelo y llevando una de sus manos justo dónde había recibido el fuerte impacto — ¡Tae! ¿¡Por qué me pegas!?
— Renegó levantando rápidamente de su regazo para tomar con agilidad de los pantalones del omega y tirarlos hacia él; provocando que el cuerpo de peli-gris cayera sobre su desnudo torso.

  Los ojos grises fueron abiertos con brutalidad, sus mejillas se incendiaron; y no por la furia. Observó al alfa sin poder respirar; su bonita y pecosa piel, sus abultadas y rosadas mejillas, esa nariz que podría ser más alta que el Monte Everest, sus pequeños y abultados labios que parecían ser los de un bebé que había recibido una picadura de abeja asesina; todo era hermoso, Jungkook poseía una bella inusual, tal vez no era aquellos sexis morenazos o rubios. Sin embargo, él se había convertido en uno de los hombre más hermosos del mundo para los ojos de peli-gris.

   ¿De verdad Jungkook sería capaz de engañarme?

  Observó con detenimiento esos ojos tan feos y saltones que eran parecidos a los de una rata.

  No, es notorio que no conoces nada de él si llegas a pensar eso.

  Sin embargo, toda chispa se desvaneció cuando líquido con densidad y olor desconocido, aterrizó en el hombro del omega, manchando también con su color blanco la parte de brazo del alfa; y de nuevo todo drama y bipolaridad regresó.

  — ¡Sueltame! ¡Ya me cayó la caca! — Gritó el omega intentado liberarse de los dos pálidos y desnudos brazos que lo aprisionaban — ¡DIJE QUE ME SUELTES, JUANKOOK! — Pataleo y retorcio de su cuerpo como una lombriz; fracasanso en su totalidad.

  — ¡No, Tae!

  Luego de unos segundos de permanecer atrapado y dando la pelea de su vida, el cuerpo del omega finalmente desistió y se controló; ahora entendía cómo era que Jungkook había logrado llevarlo hasta la línea de meta en la caza.

  Ambos hechados entre la tierra y pasto se mantuvieron en paz por unos minutos, hasta el canto de los pájaros y el sonido de las hojas volvieron a ser los únicos que los rodeaban.

  — De acuerdo... — Finalmente habló Jungkook, todavía con sus brazos rodeando al moreno — Te soltare y hablaremos... Sin alfas internos al mando u omegas escurridizos ¿De acuerdo?

  ¿Quién es el bipolar ahora?

  ¿Quién es el bipolar ahora?

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TONTO ALFA: KOOKV°°(OMEGAVERSE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora