"He Is Killer" •Mclennon•

leave to him or lose

—¿Quieres soda o agua?

Paul y John yacían sentados en la misma banca de siempre.

—Prefiero agua, cariño —Entonces sacó el dinero de su billetera y se lo entrego— Compra lo que quieras con el cambio.

El pelinegro asintió y fue camino a la cafetería, John solo se dedicaba verlo con ojos de amor.

—Buenos días John —Era Klaus—

—Buenos días Klaus —Dijo incómodo. John deseaba matarlo y cada que ese joven se acercaba a él, él solo deseaba molerle la cabeza junto a sus dos amigos y esas otras dos chicas.— ¿Ocurre algo?

—Solo quiero que vaya a la plaza después de la salida, lo veo ahí.—Sin más se alejo con una sonrisa burlona en los labios—

John se extraño ¿Para que lo quería? ¿Que intenciones tenía?

—Aqui tienes tu agua Johnny — Fue entonces que volvió a la realidad y presto total atención al pelinegro— había una extensa fila pero logré comprarla.

—Gracias, caramelito de huesos..—Tomo la botella entre sus manos—

—¿Caramelito de huesos? —Solto una risita y se sentó de nuevo a su lado. Y de repente una brisa azotó contra sus cuerpos; comenzaba a hacer frío—

—Bueno.. es un apodo ¿No te gusta?

—Claro, claro, es tierno y raro. Me gusta la fusión. —Entonces comenzó a comer su chocolate y John solo lo veía con una sonrisa boba— ¿Quieres? —Pregunto al sentir la fuerte mirada—

—No,no cariño. Comelo tú —Vio a los lados y aprovecho que no había nadie cerca para darle un beso y al juntar sus labios, le llegó un sabor a chocolate amargo—

—Johnny.. vayamos al baño ¿Que dices? Yo pediré permiso en mi clase de historia y nos vemos ahí.

—Te gusta el riesgo, caramelito —Le dijo con tono pícaro y Paul se sonrojo—

—Bueno, si tú no quieres pues..

—No, no. Claro que sí quiero.

La campana para regresar a clases sonó. Paul se despidió de John solamente con un ademán y se alejo hacia su salón mientras tanto John fue hacia el salón donde daría clases.

***

Ir al baño fue imposible ya que en la dirección llamaron tanto a maestros como alumnos. Nadie sabía la que pasaba y a todos se les indico que fueran a la cancha donde se practicaba la educación física.

Los alumnos fueron divididos por grado y grupo y quiénes cuidaban de ellos era el profesor que les estaba dando la clase.

John estaba enseguida del grupo en el que se encontraba Paul.

El director llegó y tenía lágrimas en los ojos. El micrófono estaba listo, tomo una buena bocanada de aire antes de soltar algunas palabras.

—Yo... —Solto un suspiro. Para ese entonces toda la escuela permanecía en silencio— yo agradecería si alguien de aquí me dijera cuando fue la última vez que vio a mi hija May Pang, ayer no vine a la escuela ,como muchos saben, y cuando ese tipo de horarios se presentan mi hija suele irse solo o con sus amigos pero —miro hacia el piso y su voz estaba ya por quebrarse— ayer mi mujer y yo la estábamos esperando pero nada... Entonces regrese para aquí y nada. Pensamos en ir a la oficina de policías pero primero he decidido hablan con todos ustedes y de verdad apreciaría si alguien, quien sea, se acercará a mi y me avisará. Tal vez ustedes ven a un hombre muy serio pero este hombre ama con todo su corazón a su hija —Entonces comenzó a llorar— La extraño demasiado y temo que no vuelva.

Varios profesores que estaban cerca del director se acercaron a él y se lo llevaron de ahí para tranquilizarlo. Cuando ya no estaba todos lo jóvenes comenzaron a murmurar.

John volteo hacia Paul pero se cruzó con la mirada de Klaus quien lo miro con una amplia sonrisa para luego saludarlo con un ademán desde lejos.

***

Mary había ido esa tarde por Paul ya que debía acompañarle a hacer compras; lo que dejó tranquilo a John.

—Usted es muy atento profesor —Le elojio Mary mientras tanto Paul estaba cruzado de brazos— No cualquiera se preocupa así por un alumno.

—Eso es mi trabajo señora Mary.

—Dime Mary, me haces sentir vieja si me dices señora —Le tocó el hombro y John solo le sonrió—

—Bien, Mary, ese es mi trabajo —Volteo hacia Paul— Aparte —Volvio la mirada a Mary— le tengo mucho aprecio a este chico.

Mary tenía los ojos muy brillosos, sus manos estaba atrás de su espalda, movía su torso y hombros levemente y lentamente hacia los lados.

—Mamá —Fue entonces que Mary reaccionó— ¿Ya nos vamos?

—Ah, sí, sí. Entonces... Nos vemos John, te linda tarde.

Paul tuvo que jalar levemente el brazo a su madre para comenzar a andar.

John, una vez que Paul y Mary se retiraron, comenzó a caminar en dirección a la plaza de liverpool que quedaba a un par de cuadras del lugar.

—¡John! ¡Espera! —Era Klaus—

—¿No se supone que nos veríamos en la plaza?

—Si pero me dió la gana irme contigo.

—Cuida como me hablas, soy tu maestro —Se detuvo de golpe haciendo que Klaus lo mirara con una sonrisa—

—T-u-t-e-n —Esto lo dijo mientras con su dedo índice le daba toques en su pecho— -c-u-i-d-a-d-o. —Aparto su mano—Se lo que le hiciste a may Pang.

John se alarmó y volteo a verlo.

—!¿D-de que me hablas?! —Su piel se erizo y un dolor inmenso en la cabeza comenzó y las punzadas por toda esta zona—

—Tranquilo, tranquilo. No diré nada... Claro a costo de algo muy importante.

John no lo podía creer, jamás en su vida lo habían atrapado y no podía creer que un estúpido adolecente lo hubiera atrapado con las manos en la masa.

—No tengo dinero.

—No es dinero lo que deseo —Encendio un cigarro mientras caminaban ya por la plaza —Quiero a Paul—

John negó de inmediato.

—Para nada ¿Que quieres? ¿Que lo secuestre y te lo dé? JAMÁS. Aparte el es mío... —«mierda» pensó— digo...

—Cierra la boca, yo sé que tú tienes algo con Paul. Ese estúpido maricon los delata.

—No hables así de él, tu eres un hijo de puta. Yo sé lo que tú le hiciste y ¿Sabes que? Yo tengo un buen testigo ¿Tu que tienes?

—Uy, pues se donde dejaste a May y cuando yo desee puedo delatarte con las autoridades, por asesino y pedófilo.

«Matalo, matalo, matalo»

—Entonces dime ¿Que dices? Es algo fácil... Tu libertad o un simple adolecente maricon.

«Pero yo amo a ese adolescente maricon»

—No soy tan hijo de puta como crees así que te daré hasta mañana para que me digas. —Volvio a inhala de su cigarro— nos vemos — y exhaló el humo. Se retiró dejando a John pensando—

«Yo digo que lo mates, matalo, matalo ¿Que dices John cuerdo?»

«Por primera vez estoy de acuerdo con el loco de John, John debes matarlo»

—Te mataré.