El matrimonio no es fácil y menos cuando el dinero no es suficiente, el amor se difumina en la nada sin que nadie se de cuenta.
#25 Kookmin
Historia Original
Kookmin
Las semanas pasaban demasiado lentas, mi corazón se moría a cada momento, sus turnos dobles en la fábrica, mis horas extras en el restaurante hicieron que no hubiese tiempo para preguntar sobre lo que había escuchado ese día por equivocación.
Pero ese día era domingo, él salió a ver a sus padres, como de costumbre llegaba hasta en la noche.
Rescostado en nuestra habitación lo esperaba mientras releia mi novela favorita.
Desde ese día me di cuenta de los detalles en su comportamiento que denotaba la ausencia de amor.
Tan pronto como llegó se metió a bañar alegando que había salido a pescar con su padre y que estaba muy cansado.
- ¿Cenaras?
- No, ya he cenado con mi padre.
No le contesté, yo no era parte de esas reuniones dominicales con mis suegros, por que no era bienvenido en su casa. Pero en verdad agradecia al cielo que Jungkook se reconciliara con sus padres.
Salí de la recamara hacía nuestra pequeña cocina y guardé la comida que había preparado hace unos momentos.
- Lo siento, cariño, debí avisarte, pero olvidé mi teléfono en la camioneta de mi padre.
- No hay problema.
El secaba su cabello con esmero mientras sacaba una cerveza del refri casi abrazando mi cuerpo con el suyo pero se retiro cuando tuvo la cerveza.
Se sentó en la sala y prendió la televisión para ver las peleas de boxeo.
- Cariño me preguntan si este año iremos al viaje a la montaña.
Nunca ibamos por que yo no me sentía comodo entre su familia y por que nosotros no teníamos solvencia económica para pagar el gasto del viaje.
- Puedes ir tú, es que no tengo permisos en el trabajo, me enfermé hace un mes y utilicé todos.
Yo miraba mis pies desnudos en el piso frío.
- No, les diré que tampoco este año.
Me preguntaba en que momento me pediría el divorcio, yo ya estaba listo para aceptarlo, aunque mi corazón doliera.
- Puedes ir con ellos, los gastos se reducirian a la mitad si solo vas tú.
A mi me tocaba pagar el alquiler y la electricidad, mis clases de cocina y una pensión a mi madre en esa semana. Así que no, yo no podía ir.
- Esta bien, le diré a mi padre que cuente conmigo.
Sonreí triste y di la vuelta, yo me dormía antes que él, temeroso de todo.
- ¿Jimin?
- ¿Si?
Llego la hora, me dije, tome aire.
- ¿Todo bien?
- Si, por qué.
- No lo se, siento como si estuvieras molesto.
- No, solo estoy cansado.
Su mirada se detuvo en mi cuerpo y yo como un tonto me sentí incomodo. Él ya no me amaba y yo lo unico que esperaba era que me pidiera el divorcio.
- Quisiera que hablemos de algo.
Un miedo aterrador me envolvio.
- Puede ser mañana, es que tengo un poco de dolor de cabeza.
- ¿Paso algo malo en tu trabajo? Te doy una pastilla.
- No, no, solo me hace falta dormir, hasta mañana.
Un día más era lo único que anhelaba. Sólo un día más con él.
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