Golden (Harry Styles)

23.

Capítulo 23.

-¡Lola ni se te ocurra acercarte con eso!-grito desesperada.
Héctor detrás de mi también está ladrando por mis gritos, lo cuál hace todo aún más tenso.
-¡Rosa son unas gotas no una pistola!- me contesta.- ¡Por dios!

Después de decir esas palabras, se aleja y yo me dirijo más tranquila, con mi ojo hinchado por un orzuelo a mi habitación. Es increíblemente gracioso como no me da miedo nada, pero unas gotas para los ojos me hacen temblar más que un flan.

Escucho a Lola hablar desde su habitación pero no le doy importancia y me pongo a preparar cosas para el siguiente día de clase. Así que me entretengo preparando ejercicios, juegos y unidades nuevas para no centrarme en lo mucho que me está molestando el ojo.

Aproximadamente media hora más tarde, el timbre de la casa me sorprende y después de que Lola abra, escucho unos susurros muy acalorados; para unos segundos después, escuchar mi puerta abrirse.

-Rosa...- escucho la voz de Harry.
-No, no, no y no.- hablo pausadamente aunque en mi voz se puede detectar toda la impaciencia que estoy teniendo.
-Cariño te lo ha mandado el médico, es por tu bien.- noto como poco a poco se va acercando a mi, lo cual hace que me fije en otra cosa; lleva las gotas en las manos.

Después de haber visto esto, me levanto rápidamente de mi escritorio y intento esquivarle para salir de la habitación y quizás, de casa y no volver en la vida. Claramente Harry es muchísimo más ágil que yo y me coge entre sus brazos en un abrir y cerrar de ojos. En ese momento, me pongo a llorar desesperadamente.

-Harry por favor no quiero de verdad.- niego desesperada mientras no paro de moquear y llorar como una desesperada.

Se que eso ablanda algo en el corazón de Harry porque suelta un poco su agarre y las siguientes palabras, las trata de decir con tranquilidad.
-¿Tanto miedo te da?- asiento.- vale, pues vamos a hacer otra cosa.
-¿Enserio?- pregunto parando de llorar.
-Si, túmbate en la cama.- le miro con cara rara, no me apetece mucho tener sexo con el ojo como lo tengo.- no para eso, idiota. Vamos a buscar remedios caseros.

Por mi parte, asiento desesperada ante la idea y me tumbo en la cama lo más rápido que puedo. Harry se tumba a mi lado y saca el móvil para buscar en internet algún remedio. Después de unos minutos, llega a la conclusión.

-Voy a ir al supermercado a comprar una té negro y Tylenol.- se levanta rápidamente.
Asiento adormilada mientras se me cae una lagrima del ojo.- no llores cariño, vuelvo en una hora, así también le doy un paseo a Hector.
-No te merezco.

Harry no dice nada, pero después de coger las llaves de su coche, se acerca a mi para darme un beso en los labios mientras murmura que voy a estar bien.

No me entero de cuanto tiempo pasa hasta que escucho al puerta de mi habitación otra vez abrirse ya que me he quedado dormida por el cansancio que tenía de haber llorado tanto. Cuando levanto la vista, me fijo que Harry viene con más de dos cosas en la bolsa.

-¿Qué has comprado?- le pregunto sospechosa.
-Como estás malita, te he comprado algunas cosas.- se sienta en la esquina de la cama y empieza a sacar cosas totalmente innecesarias como cupcakes, un peluche, chocolatinas...

No le digo nada, simplemente me levanto para dirigirme hacia donde está sentado para darle un abrazo y darle un beso; el cual se convierte en un beso húmedo por las lagrimas que están cayendo.
-Túmbate cariño, me voy a hacer un té.- me susurra para luego darme otro beso.

Cuando se asegura de que estoy cómoda, sale de la habitación con la caja de té negro. Mientras está en la cocina, se me pasa por la cabeza un pequeño detalle, a Harry no le gusta el té.
-¡Lola!- le llamó a mi amiga, que en un segundo aparece a mi lado preocupada.
-¿Qué pasa?
-Harry va a aparecer con una taza de té, tómatelo tú que a él no le gusta.- le pido mientras le miro con cara de pena.
-Hecho, me debes una.- me advierte y yo asiento ante el trato.

En cuanto lo cerramos, Harry aparece con una humeante taza de té negro, la cual la deja en mi mesita de noche.
-Justo lo que me apetecía muchas gracias, hombretón.- dice Lola mientras saca la bolsita de té de la taza para salir rápidamente de mi habitación con su té.
-No hacía falta que te lo bebieses, no te gusta el té.- le reprimo.
-¿Cómo lo sabes?- está sorprendido, vaya.
-El dia que te invité a tomar un té en mi casa, casi no lo probaste.- me encojo de hombros.
-Si, me acuerdo.- ambos sonreímos ante el recuerdo.- no sabía cómo decirte que no quería té, lo único que quería era seguir hablando contigo.

Después de que diga eso, no me da tiempo a contestarle porque me da otro beso y coge la bolsita de té caliente para ponérmela en los ojos.
-Cuéntame tu día.- le pregunto.
-Ha sido un día cansado, Harry y yo hemos estado hablando de los diferentes conjuntos que me quiero poner para mis apariciones en la televisión. Luego he tenido una reunión con Jeff porque mañana se estrena Lights up; más tarde he ido al gimnasia y ahora estoy aquí, cuidando a mi...
-A tu...- intento que siga con la frase pero no parece querer seguir.
-¿Qué eres?- me pregunta.
-¿Tenemos que tener un título para que estes más tranquilo?- suspiro.
-desde luego.- asiente enérgicamente.
-Entonces si quieres puedes llamarme novia.
-¡Bien! Después de tres largos meses por fin lo consigo.- hace un bailecito extraño, lo cual hace que nos riamos.-¿Recuerdas lo que me propusiste de poner a las fans lo de sabes quien eres?
-Si, no fue una de mis mejores ideas.- sonrió avergonzada.
-Pues lo hemos subido ya.
-¡No fastidies!- grito entusiasmada.- quiero saber que pone cuando sale mi nombre.

En seguida Harry abre la página en su móvil para poner mi nombre. Cuando se ha cargado, me enseña lo que pone.

Rosa,
Eres audaz.
TPWK.
Con amor, H.

-Está roto, soy tan audaz que no me puedo no poner unas gotas en los ojos para que se me pase una infección.- murmuro.
-ser valiente no es solo superar nuestros miedos.

Como está empezando a anochecer, Lola aparece en mi habitación con unos noodles, los cuales Harry y yo compartimos y finalmente, después de lavarnos los dientes y tomarme un antiinflamatorio para el orzuelo, nos metemos agotados a la cama.

-Estoy cansadísimo.- murmuro Harry mientras me abraza.

No le contesto, simplemente apago la luz para quedarnos dormidos al momento.

Me despierto unas horas más tarde, cuando la luz del móvil de Harry me desvela. Veo como muy adormilado abre la aplicación de twitter y escribe una palabra para después bloquear el móvil y volverse a quedar dormido de la misma.

Cuando cojo mi móvil y entro en twitter para saber que ha puesto, solo veo una palabra: Do.
Sonrío sabiendo que a la mañana se va a arrepentir de poner eso, y me vuelvo a quedar dormida con la misma facilidad.

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¡Hola!

¿Qué tal estais? Yo estoy súper contenta, este viernes es mi cumple y no tengo clases de la universidad, así que tengo todo el día libre.

Contadme que creéis que va q pasar luego. Os leo.