Una hermosa coincidencia ❤

Capítulo 16.

-Abue..lo yo te voy a explicar lo que está pasando aquí, sé que tienes muchas preguntas, pero créeme todo tiene su respuesta y explicación- ¿En serio la tiene? hablaba tan rápido que no me había detenido a escuchar a mi abuelo- en serio, hay una muy buena razón para que todo esto esté pasando, yo no sabía muy bien que él era "de esos Sharman" te lo juro que fue lo ultimo que llegué a pensar, pues solo creí que eran Aaron Sharman uno de los chicos que llegué a conocer en España, y puesto que lo había conocido allá, no pensé que él fuera de los Sharman tan cercano a nosotros, pero luego descubrí que él no era Aaron sino Abel y bueno pues to...- no termino de hablar.

-¡Jodie!- ay no mi abuelo me acaba de gritar, me moriré, cerré los ojos mientras esperaba el reproche o más bien el golpe- perdón, no quería gritarte, pero es que tu no escuchas mientras te están hablando, solo encontré esa forma de callarte- ¿han sentido alguna vez como que el cuerpo se relaja de pronto? pues eso fue lo que sentí.

-Señor fue mi culpa, yo quería ver a la señora Meredith, le había cogido alto cariño y al momento en el que me enteré de su situación solo quise salir de mi casa para poder verla- mi abuelo lo observa detenidamente.

-¿Y tus padres? ¿saben ellos que estás aquí?-.

-No, no señor, ellos no saben que estoy aquí y créame que no les diré, no quiero ocasionarle ningún tipo de problema a esta familia, mucho menos a alguien que me ha dado la mano y ha sabido verme- todos sabemos a quién se está refiriendo al decir esas palabras.

-¿Dónde está tu hermano jovencito?-

-Abuelo él está en España, ha estado viviendo allá unos cuántos meses-

-Sí, ya te había escuchado de decir que los confundiste, pero ahora tengo una duda, tu abuela me ha contado todo y créeme que estoy en shock hasta preguntas han surgido, pero la que más me tiene inquieto es ¿qué relación mantienes con el chico?- ¡ay por favor! creo que me están castigando por algo, todas las miradas están posadas en mí- Jodie te estamos esperando-.

-¿Ya no me quieres abuelo?- digo en tono dramático- Jodie es un nombre muy fuerte en estos momentos ¿por qué no me llamas princesa?- todos estallan e risa al ver el drama que le estoy montando.

-Vamos cielo, solo es una pregunta- cuando mis abuelos hacen preguntas es porque están más que claro de la verdad, esto era algo que ellos dos compartía.

-Aaron y yo so..mos ah ¡de por Dios ustedes ya saben! ¿por qué quieren que lo diga?-

-por eso mismo, para escucharlo de tu propia boca-

-Pues estamos comenzando algo- suben una ceja esperando a que diga qué es lo que estamos empezando- ¿disfrutan esto verdad?- vuelven a reír, el ambiente no está tan malo, es cómodo y tranquilo- una relación amorosa, eso es lo que estamos empezando- no pasa nada- ¿no nos dirás nada porque él está aquí?-.

-No, no lo haré- 

-¡¿Qué?!- gritamos al unísono, luego de esto nos miramos para echarnos a reír.

-sí, eso que oyeron, la abuela me convenció de que a la casa le faltaba un toque de juventud y pues odie tarde o temprano se va a aburrir de estar trancada todo el día. Ella aunque puede salir ha preferido quedarse aquí con nosotros, y sería muy egoísta de nuestra parte alejarla de alguien que le podría servir de compañía, así que joven Sharman usted y el novio de Jodie serán bienvenidos aquí-.

Todos excepto yo habían caído en lo que mi querido abuelito había dicho, no me quedó de otra más que reírme cuando entendí lo que había dicho, no sabía que mi abuelo era tan relajado, pero como dice aquella frase "uno no termina de conocer a las personas". Después de hablar un buen rato con la abuela, bajamos Abel y yo hasta la cocina para poder comer algo.

-¿y qué pasó contigo y Aaron?- se queda pensativo- ¿por qué no has ido a España a buscarlo o simplemente a verlo?- 

-No podrías entenderlo Jodie, la razón por la que nos separaron es un poco dura y creo que Aaron es el que debería de contártelo-.

Nos pasamos la tarde hablando de Aaron, le conté sobre Kelvin, el parecido que Aaron le encontraba, por un momento lo vi deprimido pero luego lo aceptó.

-¿te gustaría hablar de nuevo con él?-

-Sí, me encantaría, pero creo que hoy no podrá ser, ya es muy tarde y no quiero que mis padres sospechen algo-.

-¿En qué viniste? ¿vives cerca de aquí?- 

-Vine en un taxi, y no, no vivo cerca-.

-Pues ven, yo te voy a llevar, no voy a dejar a la persona que hace que los ojos de Aaron brillen irse solo y mucho menos caminando- fui a buscar las llaves del coche, Lucas inmediatamente vio que las tomaba iba a reclamar, pero no dijo nada ¡Gracias Luquitas!

Vamos de camino a su casa, son las 8:30 de la noche lo cierto era que él había durado mucho con nosotros, desde la mañana, estaba asustada de que le pasara algo, al parecer le tiene mucho miedo a su padre ¿quién será ese hombre?

-Cuéntame acerca de tus padres Jodie- nos paramos en por el semáforo

-¿De mis padres?- asiente él- bueno vivía con mi madre, pero no hace mucho decidió dejarme en casa sola, y pues de mi padre- mis ojos comenzaron a nublarse- a él lo asesinaron cuando yo tenía 7 años, ya para ese tiempo yo no vivía aquí, a los 4 años mi madre y mi padre habían peleado, por lo que mi madre decidió irse conmigo a España que era su país natal-.

-¿Quién mató a tu padre?- 

-No se supo, el caso lo cerraron sin dar explicación, mi abuelo no pudo hacer nada para hacer que la investigación siguiera, y puesto a esto creo que el asesino aún está libre- mi voz tiende de un hilo muy fino, Abel parece darse cuenta y prontamente cambió de tema.

-Ya casi estamos llegando ¿podrías dejarme en esa calle de allá?- señala la calle mientras que yo conduzco hasta ella- mi casa es esa, no creo que la logres ver mucho por la luz, llegamos por la parte trasera, por aquí es por dónde me escapo- una vez se había desmontado esperé a que entrara y que aprovechara la luz que el automóvil desprendía, ya que como él había dicho ese lado se encontraba totalmente oscuro.

Voy de camino a casa y el tema de conversación que tenía con Abel vuelve a mi cabeza¿quién será el asesino? ¿Por qué mi abuelo no pudo reabrir el caso? ¿qué habrá hecho mi padre? todas esas preguntas rondaban en mi cabeza, y cada una de ellas buscaba su respuesta.

.

.

.

.