Una hermosa coincidencia ❤

Capítulo 20.

Había decidido escucharla, después de todo no perdía nada haciéndolo y como no sabía cuándo iba a volver a ver a mi hermano, me rendí ante ella.

-Voy a hospedarme en casa de los Evans, Kelvin había hablado con el abuelo de Jodie para ver si nos podíamos quedar allá y él había aceptado- la observo detenidamente- nos quedaremos estos tres días, debido a que en el instituto están pasando unas series de problemas un tanto graves por así decirlo.

-Quédate con nosotros, ven a casa y quédate con nosotros ¡por favor!- los recuerdos que tengo de mi padre llegan a mi cabeza y hacen que entre en pánico- te prometo que cuidaré de los dos, como debí de hacerlo antes de que él te llevara lejos de mí- se aproxima para abrazarme, no he querido hacer una escena, por lo que gustosamente acepté su abrazo.

-Ven con nosotros, y quédate allá conmigo- la idea de estar en esa casa no me agradaba, pero lo que más había querido desde que estaba en España era ver a Abel y pues si este es el precio a pagar, bienvenido sea.

-Está bien, solo pido una cosa, no quiero que tengas algún tipo de problema por mi culpa, yo no sería capaz de soportarlo de nuevo- dije para finalizar con un abrazo tierno, me hacía falta estar con él.

....

Habíamos llegado a casa, comencé a recorrer con mi mirada todo lo que ahí estaba, casi nada había cambiado, solo habían renovado los muebles y sé muy bien quién lo había hecho, seguí con mi inspección, en realidad lo que estaba buscando era a ese hombre, pero él no se encontraba en casa.

-Gracias Dios- dije en un suspiro.

-¿Hablas conmigo?- inquiere Abel, yo rápidamente niego con la cabeza.

Subimos hasta mi ex-recámara, estaba exactamente como la había dejado, con mis libros favoritos, los cuadernos en los que solía escribir y aquel baúl que no he querido abrir, pero que sé que tiene más de un triste recuerdo.

-Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que estuve aquí, creí que no iba a regresar jamás-

-En cambio yo, me la pasaba dentro de esta habitación pensando en qué estarás haciendo, si aún me recordabas o si me odiabas por lo que había pasado, todas esas cosas cruzaban en mi cabeza, en las noches no podía pegar el ojo cuando pensaba en ti- abrazo al adoptado éste.

-Eres sumamente cursi adoptado, ¿lo sabías?- los dos nos echamos a reír- ¿pudiste estar mucho tiempo con Dith (la abuela de Jodie)?-

-Sí, mamá me ayudó la mayoría de veces para que pudiera salir sin que papá preguntara o sospechara algo- me sorprende el cambio que ha dado, ¿qué habrá pasado mientras no estuve?- estaba super mal, si la hubieses visto haciendo un esfuerzo para reír, daba pena ver como una persona así moría de una forma tan mala-

-¿Cómo le hiciste para que el señor Evans te dejara entrar tan seguido?-

Abel me había dicho lo que había pasado aquél día que logré hablar con él a través del celular de Jodie y pues no creía que el señor Evans iba a aceptar tan fácil esto, pero lo bueno es que lo hizo y gracias a eso él pudo estar con ella, cuidándola y de paso viendo a la señora Evans.

-Sabes, Jodie no es tan mala de llevar, es como estas personas que trata de ocultar lo que realmente es y eso me hace sentir curioso, el tiempo que estuve con ella y Dith pude descubrir que tan parecidos son ustedes dos- lo observo un poco confundido, yo no encontraba el parecido entre nosotros- también me enteré de que estás saliendo con ella-.

-¿Qué estás diciendo adoptado?- me agarro desprevenido.

-Anda y cuéntame, ¿cómo es España? ¿Qué se siente tener compañía? Lo digo por Jodie y el tal Kelvin- noto como pone sus ojos en blanco al decir Kelvin e inmediatamente sé qué es lo que le pasa.

-¿Estás celoso de Kelvin?-

-¿Quién, yo?- estalla en risa, no pude evitar reír con él.

-Vamos tarado sabes que eres mi favorito en todo el planeta, no sabes cuánto me he arrepentido de no haber estado pegado como una cucaracha de ti-.

-Y eso que el cursi soy yo, pero bueno debo de admitir que yo también pensé en todo el tiempo que teníamos para estar juntos, pero que nunca aprovechamos-.

Traté de cambiar el tema contestando una de las preguntas anteriores y pues bueno la que más le ha dado vueltas en su cabeza es qué tenemos ella y yo, pues la verdad hasta yo quiero saber,pero no sé.

....

Habían pasado varias horas, llamé a Jodie, pero ella no me había contestado, sé que debe de estar pasando un mal momento y que ha de querer estar sola, yo no pude oprimir la preocupación que sentía, por lo que llamé a Kelvin para ver cómo estaba ella, él me dijo que todo estaba tranquilo, el señor Evans había estado encerrado en su recámara y pues Jodie se la había pasado sentada en un sillón de la terraza.

-¿En qué piensas idiota? O más bien, ¿en quién piensas?-

-Hablé con Kelvin para saber de Jodie- otra vez volvió a virar los ojos- vamos tarado era para saber cómo estaba ella, a parte ya te he dicho que tu eres el preferido-.

Tock... tock...

-Pase- dijimos al unísono.

-Niños, su madre dice que bajen a cenar- Laura terminó de decir, ella es la sirvienta de la casa, fue la que reemplazó a Elena, mi antigua y querida nana.

-Hace mucho que no me llamaban así, ahora que lo pienso la última en hacerlo fue Elena-.

-Wao fue hace mucho tiempo entonces- no le había dicho que ella vivía en España y que justamente trabajaba con los Duran.

-Pues no, solo hacen unos cuántos meses, ella vive en España, solía trabajar para la familia materna de Jodie "Los Duran", pero no hace poco tuvo que dejarlo por un problema que tuvo con la madre de Jodie-.

-Esa mujer no ha tenido la vergüenza de presentarse y darle el pésame a su hija- si supieras todo lo que ha llegado hacer, ya hace rato le hubieses cogido mal apego.

-La señora Yudith ha sido una persona sumamente extraña, no la llegué a ver, por lo que me pude enterar había decidido dejar a Jodie por alguien más, hace un mes atrás-.

-Papá desapareció como por arte de magia también- me he quedado pensando en aquella vez que lo escuché hablando por teléfono, uno de los detonadores de mi miedo hacia él.

-¿No dijo hacia dónde se dirigía?-

-Pues no, solo desapareció y ya, le había preguntado a mamá para ver si ella sabía, solo me dijo que no sabía absolutamente nada acerca de él-.

.
.
.
.
.