Sino en una cajita de metal

Capitulo 5 El deseo y el búho.

Nota de autor:

Aquí con exceso de azúcar en las venas por pasármela chévere en una fiesta infantil ( me siento como Dewey de Malcolm el de en medio, con mucha hiperactividad azucarada XD ). Pero llegando a tiempo para actualizar el capitulo de la semana. Igual y se hartan pero como siempre les agradezco se tomen unos minutos para leer esta novela pacheca con onda yahoi y ya hasta me están pidiendo peticiones, ¡eso me alegra mucho!.

Muchas gracias y un abrazo a Krystal por apoyarme con este proyecto (y a terminar de poner mi arbolito navideño XP) siempre ayudándome con correcciones y demás detalles que siempre se me pasan, y con todo y todo aún se nos siguen pasando pero es por mi changuez XP.

Es curioso, pero, aunque me encanta dibujar yaoi siempre me acomodo mas escribiendo que haciendo comic cuando se relaciona con ese genero, no se, supongo que la razón es que se me facilita mas el debraye (eso si, para escenas subidas de color se me facilita mas la dibujada XP), y cuando es comic me gusta hacer cosas un poquito mas alejadas pero escribir y dibujar son actividades que me encanta realizar.

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Y en noticias ajenas a esta novela pero que necesito decir por que me pone muy feliz...¡Ya empiezan a llegar los pagos de los dibujos que hago para unas compañías norteamericanas! No puedo hablar mucho al respecto, pero desde este año empecé a trabajar para las mismas. Es genial saber que personas de otros países les gusta mi trabajo a ese nivel, es muy bonito, lentamente mi sueño se hace realidad =) .

Igual y un día de estos hablo sobre mis malviajes relacionados con mis escritos tambien. De hecho puedo contestar preguntar random XD, recuerden que me pueden mandar mensajes en esta cuenta o en luromaru@gmail.com o incluso en mi cuenta de FB, a veces es divertido responder curiosidades y así.

En fin, ya no debrayo más (disculpen si la azúcar saca lo pero de mi XD), aquí el siguiente capitulo de Sino en una cajita de metal.

- O -

CAPITULO 5 El deseo y el búho.

El día era soleado y Soto se encontraba observando el lago, sin nadie alrededor. Desde la noche que llegó, no había regresado a ponerle suficiente atención, y en el día era aún más hermoso y brillante. Tenía tantos detalles que se había perdido porque la noche los ocultaba. Se acercó al lago y entonces una voz tras él lo detuvo.

-Soto.

Al voltear vio a Laurel. Llevaba un pantalón corto negro y una camiseta sin mangas, como el día que lo vio por primera vez confundiéndolo con una chica.

-¿Esta vez no planeas insultarme?-le contestó Soto algo molesto.

-No, pero me da la impresión que quieres irte de aquí.

-¿Es tan obvio mi sentir? Este lugar apesta. Es aburrido y lleno de niños ricos y mimados que creen que se merecen todo, no estoy interesado en ningún taller. Dorothea no para de observarme, me incómoda, Claudio me presiona junto a Rhein y Kamilla, son todos tan odiosos, no tengo razón para estar aquí.

-Mentiroso-Laurel tenía una sonrisa al acusarlo.

-¿Qué dices?

-¿Y yo qué, Soto?

-¿Tú?

-Debes de ser un poco más sincero con tus sentimientos -Laurel se acercó peligrosamente a Soto-. Veo cómo me observas a lo lejos, ¿crees que no me doy cuenta que te gusto?