"Me gustaría ser como una mariposa, ¿Sabes? Sentirme libre y hermosa, pero las cosas no son así. Soy prisionera de mi mente, sufriendo día a día al pensar en el pasado."
Un nuevo comienzo. Eso era todo lo que Kate quería.
Al fin ha encontrado el val...
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Es Noviembre por lo que se pueden comenzar a sentir los cambios de temperatura, ahora las noches son más frías y los días ya están amaneciendo un poco nublados.
En las ultimas semanas he estado juntándome con Jonas a estudiar y unas pocas veces con Melissa. Mi compañera de cuarto siempre me invita a salir con ella y Harper, pero yo declino, estas no saben que había escuchado su conversación y quiero mantenerlo así. Por otro lado, tenía que ser sincera conmigo misma y admitir que me divierto mucho con Jonas. Luego de mi llamada, una extraña confianza se había instalado entre nosotros por lo que en estas últimas semanas nos hemos podido conocer mejor e incluso le he contado unas pocas cosas de mi, asimismo, ahora yo también sabía que solo eran él y su madre, ya que su padre los abandonó cuando Jonas nació, además, también pude dar cuenta que Jonas es totalmente opuesto a mi, ya que él es un chico bastante relajado y seguro de si mismo.
Ahora estoy acostada cómodamente en mi cama, sola, Melissa había salido y como ya había hecho las ultimas veces rechace su invitación. No es que me importase la soledad, ya estoy acostumbrada a las noches de películas o series, incluso ya he planeado lo que vería hoy.
Mi celular vibra sobre mi cama haciendo que aparte la vista de mi computadora.
¿Quieres salir?
Era un mensaje de Jonas, lo que me sorprende mucho ya que se suponía que este tenía entrenamiento hoy, ¿Acaso este chico no conoce el cansancio?
No.
Respondo, pero no quiero sonar cortante por lo que agrego: ya estoy en pijama.
Su respuesta tarda en llegar y sonrío cuando la leo: tengo dos entradas para ver Grease esta noche.
No quiero creer que Jonas se acordó de mi película favorita por lo que me digo a misma que solo es casualidad.
No me haría mal salir un rato esta noche, pero luego pienso en que las calles estarían oscuras y frías por lo que tiemblo. Muerdo mis uñas pensando una respuesta y antes de darme cuenta escribo: estaré lista en quince.
~°~
Comienzo a jugar con la manga de mi sudadera al ver a Jonas apoyado sobre su auto y nerviosamente me acerco a él. La noche se encuentra fría y el viento golpea mi cara, por suerte hoy si he elegido un abrigo adecuado para no morir de una hipotermia.
—Hola. —saluda Jonas con una sonrisa cuando estoy a su lado.
—Hola. —sonrio tímidamente entrando en su auto cuando este me abre la puerta del copiloto, dentro de este sonaba una canción suave en la radio.
—Darán la película en un famoso autocine de la ciudad. —dice el castaño dándome una pequeña mirada —Tuve suerte de poder conseguir unas entradas.
¿Autocine? Nunca he ido a uno antes. Luego recuerdo que Danny intento besar a Sandy en el autocine y me sonrojo.
¿Por que incluso estoy pensando en besos? Pienso.
—Me encanta Grease. —digo sonriendo agradecida de que este me haya invitado —. Solo acepté por eso.
—Me dueles, Kate. —Jonas pone una mano sobre su pecho fingiendo dolor haciendo que suelte una pequeña risita —Sé que es tu película favorita, por eso elegí venir aquí.
Sus palabras hacen que sonría y una sensación extraña se instala en mi cuerpo.
~º~
—No entiendo por qué eligieron a actores que parecen de cuarenta. —dice Jonas con una mano apuntando la pantalla y con la otra agarrando una palomita.
—Nunca lo sabremos. —digo poniéndome cómoda en el asiento.
La oscuridad nos rodea y hay un silencio tranquilo. Me esta gustando esta salida.
—Me recuerdas un poco a la chica rubia. —dice Jonas dándome un vistazo.
—¿A Sandy? —pregunto haciendo que el chico asienta —¿Por qué?
—Ella es una chica tímida y temerosa, pero preciosa y hasta tierna. —me sonrojo por su palabras.
¿Hermosa?, ¿Él estaba diciendo que yo era hermosa?
—No soy tierna. —digo mirando al frente, intentando que no viera mi sonrojo, pero luego recuerdo que todo estaba casi oscuro por lo que me relajo —. Y tampoco hermosa.
Sigo mirando la pantalla, pero la verdad es que no estaba prestándole nada de atención a la película.
—Lo eres. —dice Jonas haciendo que lo mire de reojo notando que este me mira atentamente —. Es una lastima que tu no lo creas.
Un silencio incómodo llena el auto en el que estamos haciendo que me remueva en el asiento nerviosamente.
—¿Sabes que yo puedo bailar como John Travolta? —pregunta Jonas entusiasmado, obviamente intentando quitar la incomodidad, mirándome con una sonrisa —. Mis amigos dicen que es mi talento oculto, pero nadie lo sabe porque me da vergüenza.
—¿Tú teniendo vergüenza de algo? —pregunto soltando una pequeña risa, ese chico era demasiado extrovertido como para avergonzarse de algo así —. Pues te creeré cuando lo vea.
~º~
—Lo pase muy bien esta noche. —le digo a Jonas cuando este aparca afuera de la residencia.
—Yo también. —me da una sonrisa —. La verdad creí que no aceptarías.
—¿Por qué?
—Creo que eres una experta en rechazarme. —responde haciendo que lo mire un poco avergonzada.
—Somos amigos ahora... o algo así.
Es cierto lo que digo, o al menos yo lo veo de esa manera. Al fin y al cabo puedo hablar normalmente con él como nunca imaginé que haría. Además, Jonas es muy agradable por lo que el tiempo se hace muy corto y divertido.
—Si, amigos. —dice Jonas sonriendo algo extraño.
Me despido con una movimiento de manos para luego caminar rápidamente a mi dormitorio.
