Familia

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Habían pasado unos días desde que los Malfoy y sus amigos, sabían del embarazo de Hermione.

Algunos se habían puesto felices y otros pensaron que era demasiado pronto.

Cuando los hermanos Malfoy se enteraron se pusieron demasiado felices.

¡La familia se agrandaba!

Draco estaba nervioso las manos le sudaban demasiado. En sus manos tenía un caja de terciopelo negro.

Había ido a una de sus bóvedas de Gingots para ir a buscar un anillo de compromiso que tenía un valor sentimental para el, y esperaba que le gustará a Hermione.

Habían pasado unos días desde que los Malfoy y sus amigos, sabían del embarazo de Hermione.

Algunos se habían puesto felices y otros pensaron que era demasiado pronto.

Cuando los hermanos Malfoy se enteraron se pusieron demasiado felices.

¡La familia se agrandaba!

Draco estaba nervioso las manos le sudaban demasiado. En sus manos tenía un caja de terciopelo negro.

Había ido a una de sus bóvedas de Gingotts para ir a buscar un anillo de compromiso que tenía un valor sentimental para el, y esperaba que le gustará a Hermione.

Cómo todos los días ella se encontraba en la gran biblioteca, haciendo su "lectura ligera" que constaba de más de un tomo muy grueso.

Hace días que Orión y Hermione vivían en la Mansión, cosa que para muchos era una locura, ya que todavía no estaban casados ni nada.

Pese al siglo en el que se encontraban daría que hablar que el viudo de Draco Malfoy tuviera a otra mujer viviendo en su casa y con un hijo al cual por el momento no estaba reconocido como un Malfoy.

Draco con sumo cuidado y sin hacer ruido llegó hasta donde estaba la castaña y tapo sus ojos con sus manos.

- ¿Quién soy?- Preguntó juguetón el rubio en el oído de la castaña.

- Mmm...¿un rubio oxígenado con aires de hurón?- dijo Hermione con diversión dándose la vuelta para mirar de frente al rubio.

- Oye...yo diría un rubio extremadamente guapo y sexi- comento con algo de fastidio el rubio pero luego nego con diversión.

El rubio quería decir lo que estuvo practicando toda la mañana pero en ese momento no le salían las palabras.

- ¿Sucede algo, Draco?...te recuerdo que los niños están jugando en el jardín...y en este momento es mi descanso para mí lectura ligera - recordo Hermione mirando con extrañeza al rubio que parecia nervioso.

Draco sonriendo tomo la mano izquierda de Hermione, depositando un dulce beso en ella.

- ¿No crees que se vería mejor con un anillo en ella?- Preguntó Draco con un brillo en los ojos.

El corazón de Hermione comenzó a latir con rapidez al oír eso, ya que sospechaba el rumbo de la conversación.

- Draco...¿Estás seguro de esto?- Preguntó con un hilo de voz la castaña.

Draco sonrio y tomo la cajita de terciopelo que descansaba en su bolsillo.

- Nunca lo estuve más en toda mi vida Hermione- aseguró acariciando su mejilla- Desde que ví ese ramo de flores en tus manos, me imaginé una vida junto a tí...quiero que tu seas la señora Malfoy y que Orión lleve mi apellido. Imagínate, tú, yo, Orión, Scorpius y ese bebé que viene en camino...seremos una familia. Te prometo que no te arrepentirás y te recompenzare por todos esos días de sufrimiento y dolor que te hice pasar a ti y a mi hijo...Te amo Hermione, siempre lo hice y no me cansaré de repetirlo...- concluyó el rubio a medida que se arrodillaba y mostraba el anillo de plata con una esmeralda en el centro

Hasta este punto ambos tenían los ojos cristalinos, cuando Hermione iba a responder fue interrumpida por una voz.

- Padre, acaso no me acompañaras a....- las palabras quedaron en aire, Scorpius al ver a su padre arrodillado supo que estaba sucediendo, pero en ese momento tenía un mar de sentimientos y más aquel día.

- Scorpius...- murmuro Draco antes de que el pequeño rubio saliera corriendo.

¿¡Cómo lo olvide!? Se reprochó el rubio.

- ¿Sucede algo...?- Preguntó Hermione algo cohibida por la situación.

Draco suspiro para luego responder

- Hoy es el aniversario de muerte de Astoria...

(" ')

Scorpius Malfoy se encontraba con los ojos cristalinos clavados en una lápida, en la cual se podía leer claramente: Astoria Malfoy

- ¿La extrañas cierto?- Preguntó Hermione que recién había llegado.

Scorpius asintio

- ¿Sabes?...es raro extrañar a alguien que nunca conociste...toda mi vida me pregunte que se sentiria tener una madre, era mi mayor sueño tener una... Pero tuve que aprender a vivir sin una...en este momento desearía dos cosas- comento el pequeño rubio sin mirar a Hermione.

La castaña puso su mano en el hombro del pequeño y con un hilo de voz Preguntó.

- ¿Y se puede saber que es?

Scorpius miro fijamente a Hermione

- Haberla conocido y lo segundo....que tú seas mi madre - respondió con seguridad Scorpius.

En este punto ambos ya estaban llorando.

- Oh, cariño...por supuesto que seré tu madre...- aseguró al borde del llanto la mujer castaña envolviendo entre sus brazos al pequeño.

- Gracias. Mamá...- dijo en su oído el rubio.

- Ahora si estamos todos...- dijo con una sonrisa radiante Draco quien venía con Orión.

Ambos se separaron del abrazo y observaron con diversión al par que recién había llegado.

Los cuatro se pusieron al rededor de la lápida y la pareja con sus varitas colocaron flores en ella.

- Aún espero un respuesta...- murmuro por lo bajo el rubio.

Hermione sonrió

- ¿Para que preguntas si ya sabes la respuesta?- dijo Hermione antes de darle un corto pero dulce beso.

Draco estaba que no cabía de la emoción, por fin Hermione sería su mujer ante la ley y todo el mundo mágico.

Ante la atenta mirada de los niños, Draco coloco el anillo en el dedo anular de Hermione.

Los cuatro estaban sumamente felices, ajenos a una sombra que los observaba con furia.

- Pronto se les borrará la sonrisa, queridos Malfoy....

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Hola!!!

Aquí les traigo un nuevo capítulo de esta historia, estoy muy feliz de oficialmente haber vuelto.

Los ama ❤️

Claumedi15

Lo Que El Viento Se llevó (SIN EDITAR) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora