Prólogo

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24 de Junio de 2015

Salí de la oficina de la revista de Arte y suspiré con fuerza. Había sido una entrevista bastante, agotadora. No solo me habían hecho preguntas sobre el arte, lo que pintaba y cosas relacionadas a este tema. Me habían preguntado sobre mi antigua vida en Australia, familia, amigos y los dos temas principales: mi antigua relación con Ashton Irwin, hoy en día el famoso baterista de 5 Seconds Of Summer; y mi pareja actual, George Lancoste.

Creo que hay muchas de por medio que sucedieron desde que pise tierra neoyorkina. Desde el 2013 donde aborde el avión a Nueva York y deje al chico que amaba para seguir mi sueño, muchas cosas habían cambiado.

—¡Lou!

—Hola—sonreí y lo abracé.

—¿Cómo te fue?—me abrió la puerta del auto y sonreí entrando.

Una vez que estuvo él dentro también y emprendimos viaje hacia nuestro departamento, contesté.

—Muy bien, luego de la décima pregunta mis nervios se esfumaron.

—¿Cuándo aprenderás a estar relajada cariño?

—Quizás nunca.

—¿Lista para esta noche?

—¿Te das cuenta? Tú también me pones nerviosa con tus preguntas.

—De acuerdo, lo siento. Por cierto, cuando lleguemos a casa no te asustes...

—¿Qué has hecho ahora?

—Solo...tranquila.

Sonreí negando. De él, podía esperarme cualquier cosa. Llegamos al departamento y me saqué los zapatos altos mientras George abría la puerta riéndose de mí.

—Quisiera ver cuanto duras con...

La sala estaba llena de pétalos de rosas blancas y las velas encendidas formaban una clara petición.

Cásate conmigo

Tragué duro y me giré para verlo cuando lo vi, arrodillado frente a mí, con una caja de terciopelo abierta y un anillo de diamantes en él. El anillo era hermoso, dos hilos de plata que tenían pequeñas piedras blancas y en la parte superior se separaban para abrazar un zafiro un poco más grande.

—¿Hoy es el día de los inocentes?

Su sonrisa, sus ojos azules brillando frente a mí haciendo competencia con el zafiro del anillo. Inspiraba confianza y seguridad pero sabía que por su mandíbula, bien definida, tensa y su respiración irregular, que estaba nervioso. Y mucho. Las manos que sostenían esa diminuta caja temblaban con ligereza y sonreí ampliamente.

—George...yo...

—Entiendo si me dices que no porque todavía eres algo chica, pero...necesitaba hacerlo.

—¿George?—sonreí y acuné su rostro en mis manos—. Me encantaría casarme contigo...

Bien, esta es solo la continuación de mi vida. Sé que las cosas están diferentes, denme un poco de tiempo y les explicaré. Ahora, sean felices conmigo por un momento, estoy comprometida.


EDITADO

Long Way Home |ND5SOS|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora