Capitulo 43. El alta

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Hoy me han dicho que por fin me van a dar el alta médica. Llevo un par de días en el hospital y me han dicho que todo va bien pero que tenga cuidado y que tenga reposo para no tener que volver.
Ahora mismo estoy recogiendo la habitación en la que he estado ingresada estos días y metiendo las pocas cosas que había aquí en una pequeña mochila para llevármelas a casa. Me están ayudando mi padres, las chicas están haciendo su vida y los chicos entrenando, Marco también, que parezco un grano en el culo de lo pesada que soy. Mis amigas del insti; Vic, Sam y Noa han estado aquí desde que se enteraron, pero también les he mandado para casa. Mis padres me pueden ayudar y no necesito a 100 personas en la habitación ayudándome a guardar las bragas que mis padres me trajeron y la bolsa de aseo.
Me despedí de los médicos y médicas que me atendieron, firmé el alta y nos fuimos a casa. Todavía me duele, es normal, así que intento sentarme y andar lo menos posible, aunque también me cansa estar todo el día tumbada.
Al entrar en mi casa vi una cartulina blanca A3 en la que ponía "BIENVENIDA A CASA MARTI" y muchos corazones. El cartel estaba sujetado por mis hermanas, aunque en poco tiempo pasó a ser trabajo de Alicia ya que Carla salió disparada a abrazarme, aunque mi padre la cogió antes de que llegara a mí. Gracias papá.
-Ey papá, bájame -le dijo Carla enfadada.
-Carla, cariño, a tu hermana le tiene que doler todo. Tenemos que tener cuidado. Abrázala pero más flojito, ¿vale? -le explicó mi madre.
-Vaaaaale -dijo y vino a abrazarme no muy fuerte, después me abrazó Ali.
-Luego nos vemos babies, me voy a tumbar que me duele. -dije y al llegar a mi habitación mi madre me ayudó a cambiarme de ropa y ponerme algo más cómodo. Tenía el abdomen vendado por el tema de las costillas, así que mirando el lado bueno... no puedo ni debo llevar sujetador por la espalda y los aros de la parte de delante, siempre hay que sacar lo positivo incluso de las peores situaciones.
Mis padres se tuvieron que ir a trabajar y Ali y Carla subieron para hacerme compañía. Ya me tocaba tomarme el medicamento en sobre para hacer menos esfuerzos, pero no era capaz. Me diréis que soy peor que una niña pequeña y es verdad, pero en mi defensa diré que es que está asqueroso.
-¡Marta! Eres peor que yo. Tómatelo ya. -dijo Carla haciendo de madre. Alicia se levantó para ir a abrir la puerta ya que habían llamado.
-Oye bicho, cuando te toque tomarte algo a ti te vas a enterar, no te voy a pasar ni una. -dije riendo y mi hermana pequeña abrió la boca indignada. Antes de que le diera tiempo a hablar llegaron Alicia y Marco a mi habitación.
-No sé cuál de las dos es más niña. -dijo acercándose, levantó a Carla y se sentó donde ella estaba hace nada con ella encima.
-Ella -dijo Carla señalándome.
-Estoy de acuerdo contigo renacuaja. -dijo Marco.- A ver, ¿qué pasa?
-Le toca el medicamento y no quiere tomárselo. -le dijo Alicia.
-Chivata. -le dije y todos rieron menos yo.
-Marta, te lo tienes que tomar, ¿o es que quieres volver al hospital? -dijo y yo negué con la cabeza- Pues venga, bebe.
No sé cómo pero al final consiguieron que me tomara el asqueroso sobre. Nos quedamos los cuatro viendo una peli (Frozen II a petición de Carla) y cuando terminó nos quedamos hablando. Me contaron que se hicieron "amigos" o al menos se conocieron más en el hospital esperando a que les dijeran algo de mí.
Me gusta que mi familia y Marco se lleven bien, aunque no se hayan conocido en el mejor momento de mi vida.

¿Tú? ¿Otra vez? Marco Asensio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora