D E C I S I Ó N

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—...Hola Mayu—

Fueron las duras palabras que respondió Yato a la mujer de cortos cabellos que acompañaba al anciano. Hiyori quedó desconcertada ante la mujer que estaba al frente suyo con una sonrisa.

¿Mayu? ¿Aquella chica era la persona que estaba rondando en su mente sin a verla conocido antes? Era una mujer joven, tal vez de la misma edad que el pelinegro, cortos cabellos y usaba un hermoso vestido. Sin duda era muy guapa.

Por otro lado, Yato mostraba una faceta seria a los presentes, sin embargo en su interior estaba nervioso, de tal manera que sin darse cuenta había tomado la mano de Hiyori y la apretaba suavemente.

—¿Qué haces por aquí? Pensé que no te gustaban este tipo de fiestas —Preguntó Yato fingiendo una calma. La mujer le sonrió.

—No me gustan, pero ahora estoy trabajando para el señor Tenjin, por lo cual, me vi en la obligación de acompañarlo. —respondió Mayu con elegancia y sinceridad.

—¡Oh es verdad! —El anciano de nombre Tenjin se unió a la conversación —Había olvidado que Mayu era tu antigua trabajadora ¿No? Pero en ese entonces en la oficina le tenían un apodo.

La chica miró a su jefe y le dio una sonrisa —Si, era la secretaria del señor Yato. En ese entonces en la oficina le gustaban tener el sobrenombre de Tomone* , como él no es mucho de compañeros, una forma de burla hacia él. Pero no me molestaba, incluso, ya me había acostumbrado aquello. —Esta vez miró al pelinegro y su compañía —Aunque preferiría que dejáramos el pasado ahí ¿no?

—Sin duda, ¿Y qué tal todo? Hace mucho tiempo que no nos vemos, pensé que habías renunciado a la empresa cuando...

—Preferí seguir prestando los servicios a la empresa, pero en otro departamento —respondió ella tajantemente. Yato tragó saliva, la conversación se estaba tornando un tanto incomoda, después de todo, no era por menor ¿Qué se supone que se le dice a tu exnovia cuando la vuelves a ver?

Miró a la castaña y después sintió como ella apretaba su mano en respuesta a la acción que había hecho él. Se sonrojó y rápidamente la soltó. —¡Eh! Mi-mira Tenjin ¡Te gane la apuesta esta vez! —gritó de un momento a otro Yato al anciano tratando de sonar lo más normal posible.

—¿Eh? —el nombrado miró a Hiyori —¿Quién es esta muchacha? Es trampa si invitas a tu hermana a la ceremonia Yato.

—¡Que gracioso! Por milésima vez...

—La hermana de Yato es mucho más pequeña de estatura que ella ¿Cómo te llamas cariño?

Todos quedaron un tanto perplejos por la información dada por la mujer. Especialmente Hiyori, quién sintió que su corazón se aceleraba. ¿La hermana de Yato? Nora.

—Me llamó, Iki Hiyori —respondió ella tratando de sonar lo más calmada posible— es un gusto conocerlos.

—¿Iki? ¿Por casualidad forma partes de la cadena de hospitales "Iki"? —preguntó el anciano un tanto emocionado.

Hiyori tan solo sonrió y suavemente asintió, al ver la timidez de la chica, Yato la tomó de los hombros y replicó;

—No seas tan modesta Hiyori, Tenjin también es un pez gordo. Esta chica es la hija del dueño de los hospitales de la compañía "Iki" y también una futura gran médico —Pronunció como si fuera el gran orgullo del pelinegro, haciendo que ella se avergonzará.

—¡Ya-Yato, por favor!

—¡Oh, así que eres la futura gran dueño! Se te ve un porvenir muy prometedor y tienes cara de ser una gran estudiante, sigue por el camino recto y verás que tu futuro será iluminado por los dioses —Dijo Tenjin con tono de sabiduría —Aunque, para un gran futuro primero deberías cortar unos "lazos molestos" ¿no? Yato, yo sabía que eras un rufián, pero no esperaba que estuvieras detrás de muchachas jóvenes. —Replicó lo último refiriéndose al pelinegro.

Familia | Noragami | YatoriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora