Capítulo 6 - Doppelgänger

110 14 7
                                    

―¿Qué estás haciendo aquí? Habíamos quedado en que planearíamos la reunión. ―Raphael caminó un poco hacia él, pero el dolor permanecía en su cuerpo todavía.

―¡Oh, no! Querido amigo, no te muevas ―sugirió Lucifer fingiendo preocupación―. Todavía te necesito vivo, mi pequeña aún está perdida.

―¡¿Perdida?! ¡¿Cómo que perdida?! Tu tarea era encontrarla para concluir el acuerdo.

―No, él acuerdo era encontrarla, para que Lilith no saliera de su cuchitril, pero ya es tarde para eso ―aseguró el rey del mal caminando hacia él, observando el lugar―, Ahora la prefiero lejos de Lilith. Oye, a hablando de Lilith, que horrible está este lugar, le hace falta unos ajustes. Recuerdo cuando Eleonor estaba viva y...

―¡Suficiente! ¡Ya cállate! ―lo interrumpió el musculoso hombre, apretando sus brazos de la rabia, hinchando más sus venas.

―¡Uy, qué carácter! ―exclamó la estrella de la mañana― Bueno, mejor voy al grano, porque tú y tus amigos son demasiado lentos, y al final la base no les está sirviendo de nada, si no conocen como trabaja Lilith.

―Habla, ahora.

Raphael se apoyó en la mesa de piedra con sus manos.

―Cuidaron el portal para evitar que cualquier cosa entrara al pueblo, hackearon la base de datos de todos los países, para investigar la revuelta de los demonios; se han preocupado de que la pandemia no ingrese al pueblo, sin embargo, olvidaron lo más simple.

Se detuvo.

―¿Qué? ¿Qué cosa se nos pasó? Habla o terminaré por destruir esta maldita montaña.

―Primero, cálmate ―advirtió Lucifer provocando más dolor en el cuerpo del hombre―. Tienes huevos como para pararte junto a mí y fingir que eres más grande; pero si estoy hablando contigo ahora y no he traído a mis perros a destrozarte es por una; y solo única razón.

―¡Está bien! ¡está bien! ¡está bien! ¿Podrías parar el dolor...por favor?

Lucifer lo observó con el rostro inexpresivo, para luego mostrar de la nada, una enorme sonrisa sempiterna.

―¡Claro! ―exclamó quitando el dolor de Raphael, preparándose para hablar― Ahora, déjame explicarte todo lo que está aconteciendo; pero para que entiendas mejor, debes poner atención al video que Michael Montgomery está a punto de enviar a tu teléfono.

El teléfono de Raphael comenzó a sonar en su bolsillo. Llevó su mirada a Lucifer, encolerizado al notar que el ser maligno podía aun mantener todo bajo su control.

Acto seguido, el marido de Jake reprodujo el video, encontrando varias escenas en donde cada integrante de la base, incluyendo a los amigos de Katherina, se mostraban asesinando a Jake, sin embargo, cada video tenía el mismo horario y fecha, en diferentes partes del mismo pueblo.

―¡¿Cómo es esto posible?! ―asombrado preguntó Raphael― Esto es imposible, ¿cómo demonios lograron eso? Hemos comprobado que ningún demonio cambia formas, puede adoptar la forma exacta, porque el ADN los delata.

―Lo sé, por eso, la pequeña Lilith ha innovado en algo mucho mejor. ¿A que no adivinas que hizo ahora? ―preguntó riendo.

―Lucifer, ¿podrías dejar de actuar como un humano? No te queda, la verdad.

―¡Por el amor a mí! ―exclamó el Diablo― Es obvio, Lilith creo Doppelgängers. Era lo que necesitaba para mantener a todos lejos de su plan real.

El Lamento del Infierno Libro II - La Profecía VivienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora