Él no era más que un niño cuando su tormento comenzó...
Quién generaba felicidad, comenzó a generar desgracias. Poco a poco se ganó aquella fama digna del villano de aquella historia incierta. Que sólo llegó para entrometerse en el destino ya escrit...
Marinette no paraba de dar vueltas por su cuarto, siendo observada por Tikki con confusión por la actitud de su dueña. Llevaba demasiado tiempo suspirando y sonriendo como tonta ¿Acaso no estaba triste porque Adrien estaba con alguien más? ¿Qué se había perdido en ese tiempo en el que ella no uso su Miraculous?
Tikki: Marinette ¿Y esa bolsa? - Señaló al otro lado del cuarto, dónde se encontraba una bolsa de compras con letras doradas que marcaban el nombre de la tienda a la que esa tarde había visitado con Felix.
Marinette: Ah, eso... - Sonrió con cariño mientras sacaba la ropa de dentro. - Felix me lo regaló. Él está... Muy pendiente de mí - Observó los detalles del conjunto que no se había podido probar en la tienda. - (Ahora que lo pienso... Tampoco pude verlo con el segundo conjunto que escogí para él. Aunque muy seguramente no podré verlo, era un estilo moderno y él detesta eso...) - Volvió a suspirar y miró juguetonamente el espejo - (¿Y por qué no probarmelo ahora?)
Y así se cambió, luciendo la bonita falda con tirantes, color negra. Con una camisa blanca con puntos pequeñitos y un lazo en el cuello.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tikki: Wow...
Marinette: Lo sé... Tiene un gran gusto para combinar ropa. - Mencionó mientras sus mejillas se teñían de un rosa ligero por estar hablando de el rubio.
Se escucharon ruidos en el techo, haciendo que ambas se sobresaltaran.
Tikki: ¿Qué fue eso? - Cuestionó a la defensiva.
Marinette: Averigüémoslo, ocultáte Tikki. - Ordenó decidida mientras comenzaba a subir para llegar al techo. No esperaba ver lo que encontró.
Black Cat luchaba con una paloma para que dejara de picarlo. Definitivamente el felino de la mala suerte estaba haciendo honor a su Miraculous.
Black Cat: ¡Ya! ¡¿Cuál es tu problema?! - Intentaba esquivar el pico del ave que parecía muy enojada con él. Por otro lado, Marinette no podía evitar reír. Estiró su mano para alcanzar el bastón, y al tenerlo, activó la guadaña para espantar al ave y que dejará de atacarlo. Dió un Suspiró al ver qué había funcionado y se había librado - Si, si... Muy divertido. - La miró ofendido, aunque esa expresión duró poco al percatarse del atuendo de la azabache; sorprendiéndolo y haciéndolo sonrojar.
Marinette: Lo siento... - Se disculpó entre risas, calmandose un poco. - ¿Por qué te atacó? - Cuestionó con burla.
Black Cat: Salte sobre un tejado y nos chocamos sin querer... No creí que iba a enojarse tanto. Maldita ave. - Se levantó del suelo un poco adolorido y cerró la guadaña. - Aunque... Me alegra que estés bien - Habló con su convencional tono cálido, que ella sólo había escuchado para su versión destransformada; ya que con Ladybug, difícilmente podría dirigirle ese tono tan amistoso.
Marinette: Bueno... Hoy no fue un día tan malo... - Sonrió, desviando la mirada para recordar la sonrisa que el rubio le había dedicado esa tarde.