El asesinato del Pequeño Conejo (Sesshomaru y Rin)

Capítulo 13: Los sentimientos de Sesshomaru

PDV de Rin

"Necesito a Rin, y ella ya no está"

Sus palabras resuenan en mi cabeza y siento que algo estoy haciendo muy mal. Soy una egoísta, mi amo Sesshomaru sufre, me lo confiesa, y aún así... no se lo digo.

- Nadie desaparece del todo mientras haya alguien que le siga recordando. -murmuro indecisa.- La gente solo se desvanece cuando cae en el olvido.

Eso es algo que siempre decía Etsuko. Que ella adoraba al Destino, pero temía por el Olvido. Yo le prometí que si ella me recordaba siempre yo la recordaría a ella. Ella ha muerto y es a mí a quién le toca la labor de proteger a la otra de las garras del Olvido.

- Y eso, ¿de qué me sirve? -sus palabras son algo rudas. No le gusta lo que le digo, ya que significa mantenerla viva en el recuerdo no olvidarla. Cuando el Olvido es la vía rápida para quitarse el sufrimiento.

- De que ella siga sonriendo allá dónde esté.

Me mira dudoso. Me observa y eso me incomoda. Alza la mirada a la luna y suspira. Casi puedo imaginarme lo que está pensando, pero no estoy segura.

- Tú... -me mira.- ¿Quién eres tú? -¿Se habrá dado cuenta?

- ¿Cómo que quién soy yo? -le observo.

- Etsuko. La Sacerdotisa de Nöritan. ¿Y ya?

Habla sin duda de qué es lo que tengo para ser recordada. A parte de mi madre, la gente ahí me tachará de 'desterrada' y nadie querrá recordarme. Mucha suerte tendré de que me recuerde madre, sí. Pero en realidad la recordada por ella será Etsuko. Y puede que el resto del pueblo cuando se den cuenta de la verdad, también la recuerden. Ella jamás caerá en el Olvido. Y yo, yo tampoco si Sesshomaru decide recordarme. Bueno, tal vez si lo matan algún día. Por lo demás, mi recuerdo podría perdurar años.

- ¿Eso importa?.

- ... -él suspira. Me mira.- ¿Crees que te recordarán?

- Madre me recordará. -Madre mínimo la recordará.

- Jaken dice que tu supuesta madre te miraba sin amor. -indica.

- ¿Tú has mirado con amor a Rin alguna vez? -le pregunto.

A fin de cuentas, es buen ejemplo para indicarle que la mirada de madre no significa nada. No puedo ir y decirle "significa que como no soy su hija de verdad no me quiere".

Él titubea.- ¿Importa? -Claro que importa.

- ¿Ves? Eres el claro ejemplo de que no significa nada la mirada de mi madre. -sonrío satisfecha, divertida. Con algo de orgullo incluso por callarlo una vez más.

- Yo sí he mirado con afecto alguna vez a Rin. -ya está, dice eso y fuera sonrisa. Mantenla, he de mantenerla, eso es.

- Nadie dice que mi madre no lo haya hecho alguna vez, la cosa es que de normal... no.-murmuro.

- ¿Incluso cuando un pequeño demonio, asegura la muerte del asesino de la mejor amiga de su hija? -ahí me ha pillado- ¿Raro no?

Ruedo la mirada y gruño por lo bajo.- Bueno, pues entonces NADIE me recordará. -medito.-Aunque si tú mantienes a Rin viva en el recuerdo igual ella tiene la capacidad de recordarme desde allá. -murmuro más para mi que para él. Picada. Aún a sabiendas de que todo este diálogo es absurdo dada la realidad que desconoce.

- Es una observación. -supongo que lo supone. Es redundante sí.

- De todos modos... -tiro de él haciendo que se siente a mi lado y le miro. Él desvía la mirada, sabe en lo que estoy pensando.- ¿Cuando la has mirado con afecto eh? No te creo...