My Thai boyfriend, a superstar.

Capítulo IV.

Las cosas con Bright han cambiado para mejor. Incluso puedo decir que hemos comenzado una amistad, ya que platicamos más y convivimos más en el departamento. Cuando acudimos a la universidad, pues trata de mantenerse al margen con los demás, pero conmigo plática como si fuera un amigo más, cosa que no veo que haga con alguien más.

De hecho, las cosas prosperaron después de aquella noche en la que dormí en su habitación.

Recuerdo que al despertar, Bright estaba durmiendo de costado viendo hacia mí. Sentía su respiración en mi mejilla y su brazo se encontraba rodeando mi torso. No quise moverme hasta que él despertara, pero tenía muchas ganas de ir al baño, así que literalmente supliqué porque despertara pronto.

— Buenos días — dijo al despertar.

— Buenos días — respondí sonriéndole — ¿dormiste bien? 

— Sí — respondió antes de bostezar — ¿tú?

— Igual todo bien — sonreí nervioso — emmm... ¿me puedes liberar para que pueda ir al baño? —  reí nervioso.

Bright no entendía mi pregunta hasta que se percató de que me estaba abrazando. Abrió los ojos como platos y quitó su brazo para liberarme.

— Y...o...yo... — tartamudeó — lo siento — dijo ruborizándose y desviando la mirada.

— No te preocupes — le sonreí naturalmente y lo despeiné aún más — voy al baño — dije y salí corriendo en dirección al baño.

Ese día, como bien dijo, faltamos a la universidad.

Pidió comida a domicilio para desayunar y desayunamos en su habitación viendo otra película.

Literalmente ese día nos la pasamos viendo películas y jugando videojuegos. Definitivamente Call Of Duty no es lo mío, pero Bright es bastante bueno.

— De saber que eras pésimo en COD, lo hubiéramos  jugado anoche en lugar de Mario Kart — dijo burlón.

— Hubieras ganado, seguro, pero ya es demasiado tarde para lamentarse — me encogí de hombros y el me dio un ligero golpe con su puño en el hombro.

Ese fue el día en el que comenzamos a tratarnos más y descubrí que Bright es una buena persona. Que no siempre es tan abierto con los demás, y eso es algo que le agradezco pues significa que confía lo suficiente en mí, como para hacerlo, claro que todo es a su ritmo y sus razones tendrá, de hecho, sí es demasiado reservado, pero cuando has comenzado a ganarte su confianza, es muy diferente a como se muestra en la universidad. Es bastante afable.

Bright POV

Han pasado dos meses desde que conozco a Saúl. Honestamente creí que era estadounidense, pero cuando lo escuché hablar en inglés, pensé que era británico. Debo reconocer que me sorprendí cuando dijo que venía de México.

La universidad me había pedido que le rentara uno de los cuartos que tengo en el departamento. Lo dudé bastante, pero terminé accediendo porque, aunque me gusta vivir solo, en ocasiones un poco de compañía no viene mal y siendo él extranjero, dudaba que supiera de quién soy y a qué me dedico realmente.

Cuando lo vi por primera vez, en las vacaciones de octubre, me sorprendí al ver lo alto que era. , Hay una pequeña diferencia de centímetros entre nosotros, pero soy más alto que él. Su tez blanca lo hacía resaltar entre nosotros pues, somos  apiñonados, y le daba una apariencia del típico chico inglés, que sabe que es guapo. Supe que lo juzgué mal después de ver lo agradable y tan tímido que se ponía cuando se presentó ante las autoridades de la universidad. Además, tiene una bonita sonrisa. Honestamente no sé porqué me fijé en ese tipo de detalles, pero tampoco me preocupé mucho en averiguarlo, así que simplemente lo dejé pasar.