Set Fire

#18

- La pequeña Seijun ya parece toda una dama- dijo la mujer mientras me daba un leve apretón en la mano que me tenía sujeta-. Tan bella como la difunta Shiori.

- Si, me sorprenda que aún no tenga novio siendo tan bella- comentó el chico en un intento de coqueteo, a lo que solo le dedique una leve sonrisa.

Papá al verme bajar con estas pintas, quiso decirme algo, pero no pudo porque ya estabamos frente a los invitados. Asi que estoy satisfecha con el resultado. De un momento a otro, mi celular comenzó a sonar y cuando ví el identificador, era Satsuki.

- Disculpenme un momento- dije y me aleje lo más posible para contestar- ¿Qué sucede?- pregunté en cuanto contesté.

- ¿Necesitas ayuda para salir de casa?- preguntó y yo sonreí- Tu hermano ya me avisó. Dile a tu papá que quiero hablar con él, yo me encargo de dar pena.

- Todo está en tus manos querida Sat-chan- dije y volví a dónde mi padre-. Padre, Satsuki quiere hablar con usted.

Le pase el celular y vi como su rostro pasaba de serio a preocupado, ¿estará simulando llorar o algo? Que mira que está mocosa le da mas pena que su propia hija.

- Está bien- lo escuché decir y me entrego el celular-. Ve con ella.

- Gracias papá- dije e hice una reverencia para disculparme y subir a mi cuarto- ¿Qué hiciste?

- Unas pocas lágrimas de cocodrilo y era. ¡Ahora apresurate y escapa de ahí!- dijo divertida y me cortó.

Me quite la camisa y el cinturón al entrar a mi habitación. Tomé el jeans que estaba utilizando antes y me volví a colocar. Tomé un poleron con cierre y salí de mi habitación con rapidez.

- Te irán a dejar, tranquila- asentí al escuchar a mi padre y salí de casa y me subí al auto.

Durante el camino estuve realmente tranquila. Al llegar a casa de mi amiga, saludé a sus padres y ella no tardó en aparecer y abrazarme con ganas.

- No me dejas respirar- me quejé y ella me soltó.

- ¿Muchas discusiones con tu padre?- asentí- No me imagino cuánto debes extrañar a tu hermano en estos momentos.

- Ni te imaginas cuanto- me quejé-. Es que ugh, el viejo me dijo que hubiera sido feliz si yo no hubiera nacido.

- ¿Es enserio? Pues imagínate cuántas vidas habría arruinado- dijo y me abrazo de nuevo, pero está vez correspondí.

- ¿Qué haremos de interesante?- pregunté y ella se encogió de hombros.

- Tirarnos en el piso a quejarnos de nuestras vidas- sugirió pero justo su madre fue a abrir la puerta de nuevo-. O soportar a ese chico que esta llegando.

- Oh, Aomine- dije a modo de saludo.

- ¿Qué hace ella acá?- preguntó con el ceño levemente fruncido.

- La rescate de una reunión- contestó mi mejor amiga.

- Si, un baboso estaba intentando coquetearme en vano- comenté divertida, ganándome la atención de ambos.

- ¿Cuál de todos tus vestidos bonitos usabas?- preguntó Satsuki y yo negué.

- Una camisa de Seijuro a modo de vestido con este mismo top debajo- dije, señalando lo que llevaba puesto.

- Vestida tal cual como una muñeca- dijo Aomine a modo de burla.

Se supone que había venido para descansar de las peleas, no para seguir peleando.