°Estoy contigo°

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No se porque estoy haciendo esto, me refiero a estarle rozando la mano haciendo que parezca un accidente pero este chico tiene algo que me obliga de alguna manera a tenerlo un poco más cerca.

Después de dos cuadras de caminar a su lado, llegamos a los tacos. Invite a Joaquin a pasar primero al local, llevaba haciendo esas pequeñas muestras de ¿afecto? desde que lo conocí, pero eso no significa que sienta o quiera demostrar algo hacia el... creo, son simples modales ¿no? Ajjj de verdad quiero saber y entender que me esta pasando con el.

-¿Es bonito el lugar no?- Era un lugar totalmente antiestético y de bonito tenia poco pero solo quería hacer conversación.

-¿Bromeas cierto? No se cual sea tu definición de bonito Emi pero este lugar no lo es créeme- El rio con esa bonita sonrisa que hace rato me venia gustando mucho, ya se había roto esa regla así que podía permitirme sentirme así con su sonrisa pero con ¡nada mas!, no debia sentirme así con nada más que tuviera que ver con el.

-Solo quería hacer conversación Joaco- Confesé y reí bajo -En fin ¿qué vas a pedir?- Le di la carta, yo venia a este lugar bastante seguido y siempre pedía lo mismo así que no necesitaba de ella.

-Mmm- Me le quede viendo embobado mientras el hojeaba y leía con atención cada ingrediente que contenían los platillos, no me di cuenta como lo estaba mirando hasta que el volteo y me miro curioso.

-¿Por qué me miras así Emi? ¿Tengo algo en la cara?- Una bonita sonrisa y unos ojos realmente encantadores pensé y al momento abrí los ojos como platos al darme cuenta de lo que mi mente acaba de maquilar, ¡Emilio basta!

-No... Heee no para nada solo emmm- Me puse bastante nervioso ante su pregunta y comencé a jugar con una servilleta que más que eso la estaba destruyendo por nervios, cambie el tema antes de cagarla más.

-¿Ya sabes que vas a pedir?- Dije rápido me pareció impresionante que el me haya entendido, soltó una risita ante mi comportamiento y contestó.

-Sip uno de pastor y uno de bistec- Yo le sonreí aun con los nervios a mil, levante mi mano llamando al mesero y ordene para los dos.

Tuvimos una buena comida y una buena conversación, acerca de su vida y de la mía, hasta que llego una pregunta que no me esperaba.

-Oye Emi ¿Y tu mamá? ¿No vive con ustedes? Digo ya conocí a tu hermana y a tu padre solo me falta ella- Yo baje mi mirada intentando contener las lagrimas, mi mamá se fue hace 2 meses y aun es algo con lo que no puedo lidiar, siento que no he tenido el momento para pasar por el duelo y no se si quiero hacerlo.

-Vamonos Joaquin- Se que el noto que la pregunta no me cayo del todo bien yo no queria ser grosero de hecho iba a decirle, este chico realmente me inspira la confianza necesaria para contarle algo tan fuerte e intimo pero no aquí, no iba a decirle aquí.

Pagamos cada quien lo suyo aunque yo insistí en pagar ya que yo lo había invitado pero el se nego totalmente supongo que se sentia un poco culpable por la pregunta.
El camino a mi casa fue totalmente silencioso hasta que estuvimos en mi cuarto el decidió hablar.

-Lo siento si te molesto la pregunta, no era mi intención- Me acerque a el tomando aire para decírselo, Joaco retrocedió un poco.

-No me molesto Joaco, para nada no te preocupes es solo que mi mamá... Ya no esta Joaco, ella se fue hace dos meses- Intente decirlo todo sin que mi voz sonara cortada, mis lagrimas ya corrían por mi cara, no quería que el me viera así. Me cubrí la cara con mis manos y entre al baño para calmarme, el se quedo afuera estático sin saber que decir, lo entiendo yo hace dos meses si alguno de mis amigos me decía que había perdido a un ser querido no sabría que decir porque no había pasado por ello, ahora se que es la experiencia más horrible de la vida me arrancaron la parte de mi que me llenaba de seguridad y de felicidad, esa persona que me hacia desayuno por las mañanas y me daba un beso antes de ir al escuela de repente se había ido, esa persona que me había dado la vida, con la que tocaba la guitarra y cantaba de un día a otro ya no estaba.

Aun recuerdo cuando mi padre llego del hospital y tuvo que decirnos entre lagrimas que mi mami se había ido, yo grite, llore y maldije pero nada de eso hizo que ella atravesara la puerta de mi casa y me diera un abrazo, un abrazo que uniera todas las piezas que estaban rotas en mi. Hoy ella ya no estaba y yo no había podido asimilarlo, mi padre me llevo con mil psicólogos y todos le dijeron que yo seguía en la etapa de shock que necesitaban que empezara mi etapa de duelo para ayudarme que podian seguirme viendo pero que si yo seguia negandome a hablar no iban a llegar a ningun lado. Yo no quiero que esa etapa llegue, me da miedo volver a sentirme como ese día que me dieron la noticia o incluso peor, si ahora cada vez que la recuerdo lloro y mi corazón se estruja no quiero imaginar como es esa etapa a la cual llaman duelo. Un golpe suave en la puerta me saco de mis pensamientos y una suave voz hizo que me tranquilizara un poco.

-Emi... ¿puedes salir por favor? Quiero asegurarme que estas bien, después si quieres me voy- No quería que siguiera preocupado así que salí, me lance a sus brazos en cuanto lo tuve cerca necesitaba que alguien me sostuviera y me ayudara a sentirme completo otra vez, aunque mi mamá siempre me va a faltar. Joaquin me regreso el abrazo y comenzó a acariciar mi cabello.

-Todo va a estar bien Emi, yo estoy contigo ¿si?- Lo dijo con una voz que me calmo totalmente y asentí aun con mi cara enterrada en su cuello.

Tomo mi cara entre sus manos y comenzó a limpiar mis lagrimas con su pulgar mientras sonreía levemente.

-Si necesitas algo yo aquí estoy Emi, se que no somos los mejores amigos y nos conocemos hace poco pero si necesitas un abrazo o unas palabras de animo yo voy a estar aquí para dártelas- Me miro con ojos sinceros, una mirada que nadie me había dado hace mucho mucho tiempo y yo le creí.

-Gracias Joaquin... yo no es que quiera que te vayas pero necesito estar solo- el soltó mi rostro y se acomodo frente a mi.

-Si claro, ya sabes puedes escribirme cuando quieras y cada que necesites algo- Agarro su mochila y se fue hacia la puerta.

-Oye emm mañana Brisa y yo hacemos noche de películas ¿quieres venir?- Le dije antes de que saliera, regreso un poco y su cara fue de confusión, me reí ante eso.

-¿En Lunes?- Sonrió nervioso y yo asentí.

-Si, es una tradición de ella y yo

-A bueno si, pido permiso y te aviso mañana, descansa Emi- Salio de mi cuarto y me tire a la cama, comencé a recordar el día y pensamientos que me pusieron bobo y otros que no fueron tan agradables aparecieron en mi haciendo una mezcla un tanto extraña pero no quise pensar más en ello, me acurruque abrazando una almohada y me quede profundo.

...

Quizás estén diciendo ¿Kah pero si el duelo es lo primero que sufres cuando pierdes a un ser querido? Pero cada quien vive la perdida de una manera distinta, hay gente que el duelo lo vive después de muchos años o que lo vive inmediatamente, cada quien es diferente y el dolor se vive diferente. En este caso Emilio tiene 15 años (se que no aclare edades pero por el simple hecho de que acaba de entrar a prepa se dio a entender ¿no? Por si acaso Joaquin tiene 14) es un niño y es un evento tan traumatico que su mente decidio reprimir algunas cosas para evitar sufrimiento por eso el no ha entrado a la etapa de duelo que es la más dura.

Después de esta aclaración ahora si espero hayan disfrutado el capitulo :3 LOS AMO HASTA LA PROXIMAAAAA

Regla No.5//EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora